* De las teorías de clima espacial y de la reflexión interior *

Sin demasiadas novedades hoy con respecto al Sol, que parece estar tomando un breve descanso.
Breve, es la palabra correcta porque pasan los días y no cesan las advertencias sobre un repunte en la actividad solar por parte de la ciencia oficial. Ya hemos hablado muchas veces sobre éste tema, y particularmente, no me cabe la menor duda de que tendremos actividad extrema por más que el presente ciclo sea de los más bajos. Y todo ésto lo asocio con mi propia teoría que ya he expuesto también, en numerosas oportunidades. A medida que nos acercamos al Verano en el hemisferio Norte y el Invierno en el sur, nuestro planeta ha dejado de estar escondido detrás del Sol, que recibía los impactos de los rayos cósmicos en su otra cara, es decir, la cara oculta o farside. Por ello las manchas permanecían desactivadas frente a la Tierra y eso está cambiando. Las piezas se han invertido de posición y es la Tierra la que queda en el medio como el jamón del sandwich. Una cara de la Tierra quedará de frente al centro de la galaxia, o si se quiere, hacia lugares del espacio desde donde estará a expensas de los rayos cósmicos. La otra cara de la Tierra mirará al Sol, que a su vez también recibe la radiación cósmica pero por el tamaño de la Tierra no se verá beneficiado, como sí nuestro planeta era *tapado* por el Sol haciendo de escudo, es una cuestión de tamaños, entonces así, la Tierra al ser tan pequeña comparada con el Sol no le servirá de escudo a Febo, quien recibirá la radiación cósmica y las manchas se activarán, descargando los eventos sobre esa cara de la Tierra opuesta a los rayos cósmicos pero de frente al Sol. Por delante y por detrás nuestro planeta va a recibir energía, la pregunta es ¿Cuál hemisferio terrestre se llevará la peor parte?.



Yo pienso que de ser potable ésta teoría, todo el planeta va a estar bajo severas condiciones del clima espacial. La cara terrestre que mirará más directamente al Sol cuando llegue el mes de Junio será el hemisferio norte, y la cara que queda más a expensas de la radiación cósmica es el hemisferio Sur. A partir de allí las piezas comienzan a moverse nuevamente y a invertirse los roles. Todo éste movimiento es muy complejo y no pasa por una fecha en especial, sino por un período que por más que intentemos desentramar es imposible conocer con lujo de detalles. Lo concreto de ésta teoría es que a medida que nos acercamos al inicio de la nueva estación en Junio la actividad solar y espacial en general tendería a aumentar notablemente. Y si a todo ésto le sumamos las advertencias oficiales, creo que podríamos elucubrar que ellos lo saben y se están preparando. Pero todo ésto no culmina aquí porque en Diciembre cuando llegue el otro cambio de estación las piezas vuelven a intercambiarse y hay un condicionante clave en todo ésto. La llegada del cometa ISON, que ya sabemos, será un evento astronómico sin precedentes. Bien sabido es el efecto de los cometas en el clima espacial y éste cometa es impresionante, llegando justamente en un mes de cambio de piezas, el Verano para el hemisferio Sur y el Invierno para el hemisferio Norte. Son dos momentos sumamente interesantes para tener en cuenta en éste año especial que nos toca vivir. El aumento en los avistamientos de bólidos en el cielo, de lluvia de meteoritos y de peligrosos escombros que traspasan la atmósfera como el reciente de Rusia, año de cometas, de cambios drásticos en los patrones climáticos y la parte humana, que también parece acompañar todas éstas cosas a nivel civilización, me indican que los cambios son imparables.



No quiero acotar a ésta teoría la parte religiosa o espiritual porque eso es cuestión de Fé y no de pruebas o de cálculos, esa parte queda en mi intimidad, aunque ustedes, amables lectores y amigos, conocen en parte, a través de mis miles de post a lo largo de éste tiempo. No estamos para adivinar porque es imposible, ni para caer en pseudo-iluminaciones que siempre resultan INCOMPROBABLES, no tengo ningún interés en debates religiosos o científicos cuando tanto se ha dicho y escrito, simplemente quiero dejar de lado miles de detalles que en realidad terminan distrayéndonos de lo escencial cuando esbozamos un pensamiento o una teoría o un parecer. Porque éste mundo está lleno de personas que parecen especializarse en generar debates interminables adrede, buscándole siempre la quinta pata al gato para no llegar nunca un punto concreto, rodeos y mil vueltas en círculo para seguir divagando en lo cinturones periféricos y alejándose finalmente del centro. Licenciados en crear nudos a lo largo de la cuerda del pensamiento para bloquear la libre circulación de una idea. De ésta manera se chicanea con habilidad, es como si estuviéramos viendo que a la distancia viene una gran manada de animales levantando una gran polvareda y amenazándonos con llevarnos por delante y ahí...siempre habrá un *distractor* que se pondrá a decir *son vacas*, y enseguida otro dirá *son caballos*, y uno nuevo afirmará que *son elefantes*, y al final todos se agarran a las trompadas para defender su propia versión y la manada llega sin remedio para arrollar a todos. Buscar siempre el pelo en la leche, como decimos aquí. Ésta es una razón por la cual hemos permitido que nuestra civilización llegue a éste punto de división y de acostumbramiento a un estado de cosas que jamás tendríamos que haber permitido, un hábil combo que nos alejó de lo escencial para meternos en una burbuja hecha a la medida de *alguien* que necesita que vivamos así..en la gran Babel.



Hay especialistas en hacernos *perder tiempo*, a veces son ignorantes inconscientes y otras...son adrede para poner zancadillas, una especie de autistas diplomados con título habilitante para sacarnos de la ruta trazada, porque si nos sentamos a hablar sobre cómo resolver un problema ellos se sientan a hablar de otra cosa, es el típico asistente =por ejemplo= a una conferencia sobre el sistema de transporte adecuado en una ciudad, e interrumpe al orador para preguntarle a qué altura vuelan los aviones. Uno no sabe si éstas personas son felices llamando la atención porque carecen de ubicuidad, o lo hacen adrede porque no tienen nada positivo que aportar, o sencillamente porque no soportan que a los demás se les ocurra progresar en sus ideas. Sean como fueren obedecen a una forma de zancadilla mental y psicológica que es nociva para el resto, ya que jamás enriquecen una idea aportando algo distinto, sino que se dedican a derribar sistemáticamente lo que otros aportan, sin nada alternativo mas que destruir.
Por eso, los detalles de la realidad que estamos viviendo forman parte de lo periférico cuando en verdad tenemos ante nuestros ojos un cambio muy fuerte si apuntamos al tema del cambio climático y espacial, sabemos que las cosas no están dentro de lo que conocíamos como *normalidad*, y está muy bien que los especialistas se aboquen en la búsqueda de los detalles para saber adónde está el problema para así, obrar en consecuencia y buscar una solución, pero aquí estamos hablando de tiempo...y de cosas que por más que logremos desentramar en los detalles son demasiado grandes como para disponer del tiempo para modificarlas..y menos, de la capacidad para hacerlo.



Pienso humildemente, que todos éstos cambios que observamos tienen como objetivo prevenirnos de que vamos a tener que aprender a vivir en un entorno distinto, en un planeta distinto, y adecuarnos a lo que nos toque, y ni siquiera hablo de cosas que nadie puede vaticinar en concreto, pero sí podemos generalizar para darnos cuenta de que estar prevenidos no sólo implica salir o no con paraguas, vivir o no cerca de un volcán, sino que implica un cambio de actitud reflexiva sobre la vida, sobre nuestra manera de ser, de relacionarnos con el prójimo, de obrar, de darle el valor correspondiente a cada cosa, de aprovechar el combustible que llevamos dentro para transitar por ésto que llamamos vida y que es solamente un lapso de tiempo, un período dentro de otros períodos en los cuales confiamos que existen dentro de nuestra creencia religiosa o espiritual. Ese es el objetivo de éstos cambios, nunca un motivo de alarma, de locura colectiva ni de un sálvese quien pueda, es una gran oportunidad de estar inmersos en un momento del universo en el cual las cosas cambian y tenemos que cambiar nosotros también. Cambiar, creo que es hacer algo distinto a lo que hemos estado haciendo, de lo contrario es imposible esperar resultados distintos.
Amor-odio, desesperanza-Fé, envidia-bendición, egoísmo.generosidad, y todos los *positivo-negativo* que quieran agregar a la lista, son parte del cambio, pensar, reflexionar sobre nuestro pasado individual y colectivo, sobre lo que quisiéramos para un nuevo tiempo, sin necesidad de caer en la necedad criminal y genocida de que para mejorar, todo tiene que ser aniquilado. Creo que hemos estado siendo funcionales a un libreto, los millones de seres que hemos pasado por ésta Tierra en las distintas eras hemos sido cada uno como una letra de un argumento de miles de páginas, petrificados y atados , imprimados como la tinta que no puede escapar del soporte donde fué escrita. Un decreto que nos dice que no hay que mirar nunca hacia arriba porque vamos a morir y resulta ser que arriba sólo está el espacio infinito y no hay nada que nos amenace, vivimos condicionados una vida que termina siendo vivida por otros, una acción psicológica que hábilmente nos ha inducido a ser cosas que no deberíamos ser, porque la habilidad ha sido el engaño, creer que lo bueno es malo y que lo malo es bueno.



Imposible compatibilizar la convivencia con la guerra, la educación con el látigo, la libre creencia con la imposición, el compartir con el saqueo, la paz con misiles, la espiritualidad con el dinero, el amor con el egoísmo. Son lecciones que nunca provendrían de un maestro sano, sino de una mente enferma y manipuladora. Ser letras de semejante argumento es obedecer a formar parte de un libro sínico, manipulador y escrito por alguien que nunca ha deseado que el argumento fuera bello y positivo. Hemos sido letras formando parte de un argumento que irremediablemente termina con el final que alguien escribió para ese libro, si no comenzamos a acomodarnos como letras de un argumento nuevo, difícilmente el final del libro nos depare algo feliz. Cambiar, aprovechar los cambios, y no perder el tiempo en detalles inútiles, el miedo por ejemplo, que sólo nos hace pensar en cómo haremos para evitar algo peligroso mientras nuestra alma se consume haciendo siempre lo mismo, que no nos ha dado resultado positivo alguno. Y creo finalmente que, nuestro egoísmo de pensar en lo inmediato nos ha vuelto precisamente incapaces de darnos cuenta que aunque un día ya no estemos aquí, habrán otros y esos otros van a tener que vivir de lo que les hemos dejado. No vamos a cambiar el mundo en el brevísimo período que nos toca a cada uno conocido como *mi vida*, pensemos más allá de nosotros mismos, así como el hijo que un día se queda sin sus padres pero que los lleva dentro como un tesoro por todo el esfuerzo que hicieron para que él tenga una vida mejor. Vida mejor que no es lo material, sino lo interno, porque estamos siendo solamente testadores de materias primas que de nada le van a servir a nuestros herederos en un mundo donde no harán falta materias sino valores humanos..



Cambiar, invertir éste tiempo llamado *mi vida* en hacer y dejar cosas positivas para quienes vengan después, mucho más que una casa, un coche o una cuenta bancaria, es dejar sentadas las bases para que puedan convivir con los hijos de los otros, donde se haya entendido que el asesinato no debe existir, que el egoísmo fué del pasado y que somos nosotros, las letras que deben escribir un libro que termine siempre de manera feliz y no ésto...que parece llevarnos a un final que nunca debió ser.
Gilgamesh***