CONTENIDO DE TIEMPO FINAL

sábado, 14 de noviembre de 2015

* Infiltrados; pudrir todo desde adentro *

***Buena noche de Sábado para todos.

Me resulta a veces ingenuo, analizar cuestiones místicas, esotéricas, religiosas, basándonos en libros que los mismos analistas aceptan como tergiversados.
Es imposible hacer análisis para explicar lo oculto cuando se usan los mismos libros que se critican al considerarlos mendaces, tergiversados o incluso manipulados, mezclando verdades con medias verdades, verdades con mentiras.
Quien analiza el significado de las palabras de Jesús, por ejemplo, ¿cómo sabe si la frase que está tomando es veraz o es mendaz?, porque ésto de interpretar un libro, que, de antemano se sabe manipulado, pone en serio riesgo del ridículo a quien toma de ese libro lo que le gusta, y lo que no le gusta lo considera mendaz.

Si un enorme libro está plagado de mentiras y medias verdades, ¿qué garantía tiene el analista de que la frase elegida para analizar sea real o ficticia?.
Por ahí pasa la cuestión, creo, cuando empezamos a delirar en interpretaciones olvidando que lo que analizamos puede ser mendaz.
Pregunto; ¿no es mejor primero verificar si el libro fué manipulado, por quienes, cómo, para qué?..
En fin, que les dejo para reflexionar unos muy interesantes estudios de esos que van primero a lo primero...como debe ser...

Escribe el Teólogo alemán Dieter Potzel

El ataque soslayado al cristianismo primitivo-parte 1

Cómo Pablo alteró la enseñanza de Jesús



Las primeras sociedades cristianas prístinas eran guiadas directamente por Cristo mediante la palabra profética. Él se manifestó por profetas, y según la testificación de los hechos de los apóstoles *la multitud de los creyentes eran como un corazón y un alma* =Hechos 4, 32=. *Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en la partición del pan y en las oraciones* =Hechos 2, 42=. Y le hicieron el bien al prójimo *y teniendo favor con todo el pueblo* =Hechos 2, 47=. En esta época llegó Saulo, llamado más tarde Pablo, y dió el primer y mayor motivo para discordias …

Saulo de Tarso, en Asia menor =la actual Turquía= es, como fariseo judío, un encarnizado enemigo de Jesús de Nazaret y persigue a la comunidad cristiana original. En una visión un día cree escuchar la voz del hombre de Nazaret, y también cree estarlo viendo. Después de esta experiencia, Pablo llega al convencimiento de que Jesús en realidad es y fue *Cristo*, es decir, el enviado por Dios, el prometido salvador de Israel. Pablo se reorienta. En el futuro quiere luchar por él y ya no más contra él. Pero desde el comienzo no está dispuesto a encasillarse dentro de la comunidad existente.

Él incluso hace notar que no dialogó con los otros cristianos originarios =Gálatas 1, 16=. Por decisión propia comenzó a predicar. Después de tres años Pedro les visita por dos semanas, y luego vuelve a viajar por el país.
Muy pronto se comprueba que Pablo mezcla la enseñanza cristiana con sus conceptos romanos, y allí donde en sus viajes se encuentra con grupos cristianos originarios, se producen discrepancias y conflictos. Pero Pablo no permite que le digan nada ni que lo corrijan. Al contrario: 

Cuando al cabo de 14 años, se llega a las primeras conversaciones oficiales con todos los responsables del movimiento cristiano originario, Pablo escarmienta severamente a Pedro y *le resistí cara a cara*, como él mismo lo escribe en la Biblia =Gálatas 2=. La rencilla con Pedro, a quién Pablo acusa abiertamente de hipocresía, se enciende en las raíces judías del cristianismo primitivo y entre otras cosas en la cuestión del consumo de carne en la comida cristiana originaria. Pero las diferencias entre Pablo por un lado, y los apóstoles y Jesús de Nazaret por otro son mucho más amplias …

Ningún interés por Jesús

Mientras que los apóstoles fueron aleccionados directamente por Jesús, Pablo no conoció a Jesús. En vez de esto aprendió la enseñanza farisea de los adversarios del hombre de Nazaret. Pero en vez de informarse lo más posible sobre Jesús y orientarse tanto como sea posible a él como modelo, Pablo declara su deficiencia simplemente como insignificante y escribe con arrogancia *aún si a Cristo conocimos según la carne =referido a los apóstoles=, ya no lo conocemos así* =2da Corintios 5, 16=.
¿Pero de dónde quiere saber Pablo si el Cristo de su versión y su imaginación concuerda con el Cristo que vivió en Jesús de Nazaret entre los hombres? Jesús, el Cristo, para Pablo parece ser más bien *solo un motivo*, es una *figura mítica a la cual se le pudo imputar todo*, tal como le reprocha el filósofo Friedrich Nietzsche.

Y de hecho: En vez de preguntar qué había enseñado Jesús, Pablo interpreta la vida de Jesús según la muestra de las religiones de misterios paganas y del culto imperial, donde se habla de dioses que mueren y que vuelven a resucitar, en las cuales el creyente podría tener participación mediante identificación o mediante ejercicios mágicos. Igualmente se acopla al culto de sacrificios judío y lo reinterpreta: Mientras que judíos ortodoxos quieren apaciguar una supuesta ira de Dios, Pablo declara sencillamente que la sangre que Jesús ha derramado en su ejecución aparentemente tendría por siempre un efecto expiatorio para Dios =Romanos 3, 25=, de manera que los sacrificios de animales ya no serían necesarios.

La reinterpretación

Por cierto, Jesús también era contrario a los sacrificios de animales. Pero a lo contrario de Pablo, él había anunciado a un Dios que no necesita ningún *sacrificio expiatorio* y que nunca había necesitado uno. En vez de esto, el deseo de Dios sería que todos sus hijos le abran su corazón y que paso a paso *sacrifiquen* su ego y estén a disposición del prójimo. Pablo empero regresa a la concepción divina de los hombres, anterior a Cristo =de la ira de Dios y del sacrificio expiatorio=, y alude esto solo ahora a Cristo. El punto álgido de su reinterpretación consiste en que con solo la creencia en la muerte de Jesús como suceso de salvación todo se podría justificar, o sea *sin merecimiento*, es decir sin obras buenas. Este fue uno de los mensajes esenciales de Pablo y fue un mensaje agradable para el pueblo. 

Con el incómodo Jesús de Nazaret esto no tenía nada que ver. Porque Jesús enseñaba observar los Diez Mandamientos y el Sermón de la Montaña diciendo: *haz esto, y vivirás* =Lucas 10, 27=.
Con esto Pablo estableció las bases para una Iglesia popular, que pronto va a celebrar cultos para el *acto de sanación*, que nuevamente fueron tomados del paganismo.
Ya un alumno de Pablo de la primera generación convierte a Jesús, el Cristo, en un *sumo sacerdote* =en la Epístola a los Hebreos de la Biblia=, cuya sangre *limpia nuestra conciencia* =9, 11=. Pronto siguen los teólogos y escribas como *sacerdotes asistentes*, nuevamente hay ritos y ceremonias, talares, púlpitos y altares, tal como la gente estaba acostumbrada en sus religiones de antes. Jesús no quiso ser entendido como *sumo sacerdote*. 

Él pudo haberse dejado elevar a esta categoría por sus apóstoles. Pero con Jesús y sus seguidores los sacerdotes y rituales se hicieron superfluos, ya que las personas de esa época habían comenzado a ubicar el Reino de Dios en su propio interior, puesto que no tenían a ningún superior frente a ellos y tampoco necesitaban a un *mediador* ante Dios. Los primeros cristianos originarios construyeron su relación con Dios dentro de sí, y fueron guiados directamente por Cristo, cuando Él se manifestaba por un profeta.
Pablo frente a esto es el primer escriba que llega a una posición de responsabilidad mayor para la sociedad originaria. Con esto usó habilidosamente su ventaja intelectual frente a los ex pescadores y carpinteros de entre los apóstoles.

Estos por ejemplo son mucho menos diestros en cosas de discusión y por otro lado tampoco pueden evitar cómo Pablo introduce su *conocimiento* teológico, cambiando con esto de forma obvia o no tanto la enseñanza cristiana. Así también enseña a la comunidad de Roma una predestinación =capítulo 9; *Dios elije y obceca al que quiere*=, lo que nuevamente no tiene nada que ver con Jesús. Y también lo que escribe a la comunidad de Corinto no proviene de Jesús: *Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios* =1era Corintios 2, 14=. Así Pablo, *se han de discernir espiritualmente*. Con esto les niega a las personas simples, en parte de entendimiento infantil, la posibilidad del conocimiento de Dios por ejemplo en la naturaleza, y en vez de esto se lo concede al hombre *espiritual*. 

Posteriormente la Iglesia declara, basándose en Pablo, que solo por ella, la iglesia, se podría recibir el Espíritu de Dios, y a sus *funcionarios* los hace llamarse *clérigos*. Jesús enseñó otra cosa, por ejemplo: *Que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el Reino de los Cielos* =Mateo 18, 3=.

Gilgamesh***

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Gilgamesh.

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