* En la piel del otro *

***Feliz Martes para todos.

Mientras SDO nos muestra un bello eclipse..;



..y nuestro campo magnético se cierra violentamente incitado por la CME que se esperaba, para mitigar a una radiación cósmica galopante..;



..en éste mediodía de Agosto hablamos de otras cosas, cosas que nada tienen que ver con el espacio ni el clima, cosas que son como la materia obscura invisible al ojo humano pero que tienen el poder de ligar o de dividir a las personas.

Solemos escaparle a muchos temas que invitan a exponer un punto de vista y escapamos porque *tememos*.
Hoy la gente culpa a ciertos temas como causa de división o discrepancia, exponer una opinión sobre política o religión hace que muchos prefieran no opinar para no desagradarle tal vez, a quien piensa distinto y les interesa no *perderlos*.
Se *posee* entonces al otro, y se construye una relación artificial donde se tapa con capas de barniz lo que no conviene sacar a relucir.

Sin embargo no es la exposición de una postura personal lo que en verdad divide, nos divide la imposibilidad de reflexionar profunda y atentamente sobre lo que el otro expresa. Cuando las personas están programadas para pensar según los moldes, defienden apasionadamente una postura sin siquiera entender porqué la defienden.
Mucha gente *siente* cosas que en realidad son de otros, es decir que quedan mágicamente preñados de sentimientos ajenos y pocas veces se ponen a meditar y reflexionar sobre porqué *sienten* cosas que tal vez no deberían sentir.

Ésto, se refleja claramente cuando analizamos que cómo es posible que la gente termine votando a una fuerza política que al llegar a ser gobierno, no haga más que hacerle la vida más miserable y desgraciada a quien le otorgó con su voto el poder de gobernar.
Si un sistema perverso tiene la extraordinaria habilidad de inducir a pensar, de distorsionar los sentimientos personales para suplantarlos por sentimientos ajenos, la autodestrucción está garantizada. 
En política o en democracia es grave por ejemplo cuando la masa mayoritaria no es capaz de distinguir entre sus propios intereses y los intereses de una minoría que trabaja en función precisamente de eso, lograr que la mayoría *sienta* como una minoría que no es, para que la minoría finalmente...termine arruinando el destino de esa mayoría.
Divisiones, divergencias, intolerancia finalmente, en una enorme masa adoctrinada por su enemigo para que casi casi sin darse cuenta, termine siendo funcional a quien le hará la vida más desgraciada.

Es increíble como la gente repite como loros conceptos que, si se tomara dos minutos para reflexionar, jamás podría sostener, sin embargo la dominación de la voluntad del otro se basa en su ignorancia.
Sí, ignorancia que no tiene que ver con los iletrados o analfabetos sino con una ignorancia por opción.
Nadie quiere ni quisiera ser catalogado de ignorante porque es una palabra que suele ofender a quien ha estudiado o incluso es profesional, sin embargo somos ignorantes en la medida que no comprendamos que todo aquello que dejamos en manos de otros, termina siendo perjudicial para nuestro razonamiento, y que si perdemos la capacidad de razonar...caemos en la ignorancia.
La ignorancia es la ausencia de Conocimiento, sin Conocimiento estamos incompletos para poder reflexionar sobre cualquier cosa que ésta vida nos plantea, lo que no entendemos lo dejamos para que otros lo expliquen y asumimos como propios los conceptos ajenos.

Permitirnos *vaciarnos* para ser *llenados* por ajenos nos hace correr el serio riesgo de ser un molde listo para rajarse en cualquier momento.
Se juega mucho en la política con eso de las *clases* sociales, con la capacidad que uno ha tenido en la vida de ser lo que hoy es, estudio, posición económica, y demás factores determinan que nos sintamos *pertenecer* a tal o cual clase social.
Pero hay algo que todos pasamos por alto, y es que nadie recuerda o tiene un documento donde diga previo a nuestro nacimiento, que naceríamos en tal o cual país, tal o cual familia. Y eso no es poca cosa amigos. Si pudiéramos analizar ésto nos daríamos cuenta que es imposible desde nuestra condición social no tener la capacidad de situarnos en el lugar de quienes no han tenido la misma ¿suerte? que nosotros.
Habremos hecho mucho mérito quizás para obtener una buena *posición*, pero eso no excluye que otros que han quedado en peldaños inferiores no hayan hecho el mismo o más mérito que nosotros.

Nos olvidamos que hemos tenido cierta suerte...y cuando olvidamos eso nos volvemos injustos, insolidarios e ignorantes.
Necesitamos entonces adornar nuestra propia vida con méritos y galardones para intentar explicar que, si estamos mejor que otros es porque hicimos un enorme sacrificio, trabajamos duro, nos esforzamos, pero seguimos disfrazando que tan sólo...hemos tenido suerte.
Entonces allí usamos a la religión o a la espiritualidad para la justificación y decimos que si nos ha tocado mejor suerte será porque dios nos ha premiado o privilegiado, o que en otra vida anterior quemamos karma y hoy evolucionamos.

Pero...¿y el otro?...¿ese que no tuvo el privilegio o careció de evolución?...¿qué hacemos con él?..¿qué actitud tomamos con quienes quedaron rezagados?.
Y allí quedamos, entre vivir para nuestro propio ombligo, o vivir disfrutando de lo que nos ha tocado en mayor o menor medida, y teniendo que elegir...si entendemos al mundo desde nuestra realidad o desde la vastísima realidad de otros que conviven con nosotros.

Bien deberíamos sentirnos congraciados por esas cosas que nos han tocado, pero de ninguna manera desconocer e ignorar a quienes no las tienen, y dejar de pensar en ellos, de trabajar por ellos, que en definitiva es ser solidarios, y no se puede ser solidarios si cuando hay que elegir a nuestros gobernantes nos da igual una cosa que otra.
Siempre los habrán imperfectos y corruptos, pero hay matices y diferencias que hacen la gran diferencia, especialmente con quienes no han tenido nuestra misma *suerte*.

Ignoramos entonces las plataformas electorales, los antecedentes, el debe y el haber de tal o cual tendencia política para evaluar nuestra elección, dejamos que el debate lo dirijan los medios manipuladores en lugar de ser nosotros quienes insertemos los debates que apunten a hacer de nuestras sociedades algo más justo y equitativo.
Ignoramos sobre cómo funcionan ciertas políticas en otros países, hablamos por hablar y repetimos como loros lo que otros dicen sin siquiera tomarnos el trabajo de *conocer* para salir de una supina ignorancia que nos vuelve injustos e insolidarios.
No poder ponerse en la piel del otro para entender que sólo hemos tenido suerte....nos pone a jugar el juego que a otros siempre les conviene.
Divisiones, pobres contra pobres, menos pobres contra menos pobres, mientras los grandes poderes se frotan las manos.

Linda nota que hallé por ahí, donde alguien expresa su dolor al sentirse excluído por alguien que ya no le quiere más, por no coincidir con su forma de ver el mundo.


Guillermo Prado Lima;

-ME EMBARGA UNA TRISTEZA PROFUNDA.



Seguro no lo vas a leer hasta el final, porque, como a muchos, no te interesa lo que a uno le pasa. ¿Por qué toman como *ofensa personal* que uno tenga ideales o preferencias políticas distintas?
¿Por qué te *dejan de hablar* personas con las que tenías contacto permanentemente?

Me doy cuenta que, quizás, uno CANSA CON COMENTARIOS EN LAS REDES SOCIALES SOBRE POLÍTICA. Pero cuando uno ve o escucha, en la mayoría de los medios, la misma campana, ignorando todo lo que está pasando en la calle, en las instituciones, en nuestros mismos hogares, uno se pone *chapita*.
Recuerdo, entonces, el *Zoon politikón* de Aristóteles. Expresión griega que dice que el hombre es *animal político* o cívico, en todo caso. Aristóteles pensaba que tanto los hombres como los animales son seres sociales, por su naturaleza misma, pero solo el ser humano tiene la capacidad de organizar su vida en ciudades, creando sociedades. Y es ahí donde el hombre puede *desarrollarse como individuo*, justamente en esas relaciones SOCIO-POLÍTICAS. También decía que aquellos que eran incapaces de vivir en una sociedad, porque no la necesitan, o son bestias o son dioses.

Dejando en claro, entonces, que somos SERES POLÍTICOS, me *resulta extraña y hasta me angustia* la *apatía* de mucha gente conocida.

Seguro, quizás canse que uno ponga en las redes sociales cosas que no te muestran en los medios. El llanto apagado en soledad de los papás que se quedaron sin trabajo, la preocupación inconmensurable de la mamá que ya no puede alimentar como debe a sus hijos, los pobres viejitos que salen desconsolados de las farmacias porque su medicamento, que no puede dejar de tomar, sea cada vez MÁS CARO, las decenas de manifestaciones de protestas que se hacen diariamente.

Seguro, quizás canse que uno ponga en las redes sociales cosas que no te muestran en los medios. Y en esa *apatía* de la que hablo es como que a ellos no les afecta si tienen algún amigo o pariente de edad avanzada al que despidieron, que no les afecta que estén cerrando la panadería, la granjita, la ferretería, la carnicería, la zapatería, la tiendita, donde, habitualmente, hacían sus compras diarias, que no les afecta que los precios de los alimentos hayan aumentado tanto, los aumentos de gas, agua, luz, transporte, que no les afecta le digan que viviste una ilusión porque te podías ir de viaje, comprar celulares, comprar plasmas, que no les afecta que vos que sos un pobre diablo te sacan cada vez más y a los ricos le sacan cada vez menos, que te estén mintiendo en la cara en discursos donde NO DICEN NADA Y SOLO JUSTIFICAN SUS DECISIONES CON MENTIRAS.

Pero si no te lo mostramos nosotros… ¿entonces quién?

Desde muy chico me enseñaron que la injusticia, ES INJUSTICIA, venga de donde venga. Desde muy chico me enseñaron que la desgracia ajena, uno debe sentirla como propia. Que uno no puede dar vuelta la cara cuando un chico siente hambre. Porque no me la contaron, porque la viví en carne propia. Porque por años fui un desocupado, y sé del LLANTO APAGADO EN SILENCIO, de la impotencia de volver a casa con las manos vacías, *sin saber que decir*, que se te cierren las puertas porque sos *grande*, que te enteres que digan que sos un vago, que no querés trabajar, cuando uno era lo que más deseaba, *un trabajo*, de mirar los ojos de mis hijas y saber que les faltaba de todo, y que venían los abuelos o tíos con comida, con ropa, y a uno se le PARTÍA EL CORAZÓN, viste. 

Cuando tenía que, CON LA CARA LLENA DE VERGÜENZA, recurrir a la familia porque no tenías ni un mango para el colectivo para ir a una entrevista de trabajo y te decían: *lo llamamos* y vos esperabas con ansiedad que sonara el teléfono. Que todo esto te haya costado, dolorosamente, hasta el *matrimonio*, también.

Porque hacía 42 kilómetros en bicicleta para trabajar 12 horas sacando la mugre de un silo subterráneo para que te paguen chaucha y palitos, porque fue lo único que conseguí a pesar de tener un TÍTULO TERCIARIO.

Porque tuve que renunciar de un trabajo donde estuve 10 años porque te trataban como un sorete, cuando vos le enseñaste a *tu jefa* como se debía trabajar, pero no eras de su círculo de *confianza*. PORQUE LA VIVÍ, NO ME LA CONTARON.

Seguro que quizás te canses que uno ponga en las redes sociales lo que NO TE MUESTRAN EN LOS MEDIOS. Pero soy *humano* y a mi sí me afecta lo que pasa. Porque pasé noches enteras pensando: y ahora qué hago? Porque se me ESTRUJABA EL CORAZÓN pensando en mis hijas y uno tenía que poner la mejor cara como que no pasaba nada. ¿Me entendés? 

Porque me gustaría que vos tampoco te DESENTIENDAS de lo que sucede. Porque me gustaría que vos pienses con criterio, que no te dejes llevar por lo que escuchas en la tele, sino que *MIRES* a tu alrededor, en tu entorno, pero que *mires de verdad* y vos saques tus conclusiones. QUE NO SEAS TAN ORGULLOSO, que seas más humilde y reconozcas que hay cosas que están mal. ¡MUY MAL!

No importa si me dejaste de hablar, porque tal vez no te gusta lo que pongo en las redes sociales, solo quiero que cuando apoyes la cabeza en la almohada, NO PIENSES EN MIS PALABRAS, SINO QUE PIENSES SI *HOY* ESTÁS CONFORME DE VIVIR ASÍ.

Nada más y nada menos...que Cristianismo Original..., Gnosis enpleno siglo 21.
Pasen un excelente día.

Gilgamesh***

Fuentes;
-nuestrasvoces