domingo, 4 de agosto de 2019

* Dilemas en el manicomio *

***Gran jornada de Domingo para todxs.

Algunos sucesos que ocurrieron y ocurren, llaman la atención sobre el grado de violencia social, de locura, de división.

Estados Unidos y su compulsión a la violencia, a la libre portación de armas, a una locura colectiva que nos supieron vender en sus películas y series donde siempre la violencia ha sido el eje.
Muy penoso todo ésto;



-Este sábado, un joven de 21 años entró con un rifle en un Walmart de El Paso-EEUU y empezó a disparar a la gente, acabando con la vida de al menos 20 personas. Después se entregó a la policía, confirmando que su objetivo era *matar al mayor número de mexicanos posible*.

Horas más tarde, en Ohio, a más de 2.500 kilómetros de allí, un hombre mató a nueve personas en otro tiroteo letal.
La policía consiguió abatirle.
Así han sido las 24 horas más sangrientas de Estados Unidos en mucho tiempo.
Concretamente, desde el 1 de octubre de 2017, cuando un hombre mató a 58 personas e hirió a más de 400 desde su habitación de hotel en un festival de Las Vegas.

El atacante de El Paso, Patrick Crusius, entró este sábado por la mañana en el centro comercial Walmart y empezó a descargar su rifle de asalto hacia las personas que estaban en el supermercado.
Minutos después se entregó a la policía local.
En los últimos meses, El Paso, una ciudad fronteriza con con México, ha estado en el foco mediático.
Miles de familias centroamericanas han llegado a la ciudad buscando asilo, sobrepasando a los funcionarios de inmigración y convirtiéndola en el centro de un enconado debate entre Demócratas y Republicanos por la inmigración.

Crusius, proveniente de un suburbio de Dallas, aseguró en un texto publicado minutos antes del ataque que lo hacía en respuesta a la *invasión hispana de Texas*.
El jefe de la policía de El Paso, Greg Allen, confirmó a los medios la existencia de este texto y aseguró que aún estaban analizando su autoría.
El manifiesto, titulado *La verdad incómoda*, apoyaba al terrorista que mató hace unos meses a 51 personas en dos mezquitas de Nueva Zelanda y destilaba odio hacia los hispanos.

*Tomarán el control del gobierno local y estatal de mi querida Texas, cambiando las políticas que mejor les convengan*, escribió Crusius.
Además, culpaba a los políticos, tanto republicanos como demócratas, por el hecho de que Estados Unidos se *estuviera pudriendo* de dentro hacia afuera.
El otro tiroteo se produjo en un vecindario del centro de Dayton-Ohio horas después.
Un hombre mató a nueve personas e hirió a otras 16.

La policía de Dayton confirmó en Twitter que el tirador había sido abatido y la situación ya estaba bajo control.
Por el momento se desconocen las causas.
La alcaldesa de Dayton, Nan Whaley, dijo que el atacante llevaba puesto un chaleco antibalas y varios cargadores de munición.
*Cientos de personas podrían estar muertas hoy en el distrito de Oregón* si la policía no hubiera actuado tan rápido, afirmó la alcaldesa.

En lo que va de año ha habido más de 250 tiroteos masivos =cuatro o más muertos= en Estados Unidos y más de 8.000 muertes por armas de fuego.
Hace una semana un hombre supremacista blanco mató a tres personas en el Festival del Ajo en California.
Después se pegó un tiro.
En una publicación de Instagram se preguntaba por qué las ciudades norteamericanas *tienen que hacer hueco a las hordas de mestizos*.

El jefe del FBI, Crhis Wray, declaró el mes pasado ante el Congreso que se está produciendo un aumento de arrestos ante ataques terroristas, la mayoría de los cuales *han sido motivados por el supremacismo blanco*.

En tanto aquí en Argentina, se estaba realizando el típico encuentro anual de la llamada Sociedad Rural, donde en el predio se llevan a cabo concursos y premiaciones a los criadores de animales de faena, vacas, ovejas, cerdos, etc.

Cocardas, medallas y demás trofeos, también costumbres del ámbito rural muy arraigadas en cierto sector de la sociedad, destreza con caballos por ejemplo, algo que viene siendo muy cuestionado desde hace tiempo por organizaciones que defienden los derechos del animal.

Y ésta exposición anual en la Sociedad Rural tiene también un marco político muy fuerte especialmente cuando a quien le toca ser Presidente de la Nación va allí a hacer un discurso que generalmente espera el sector agropecuario en materia de anuncios por parte del ejecutivo nacional.

Cabe recordar al valiente ex Presidente de la Nación Don Raúl Alfosín, cuando en una oportunidad fué a la Rural, al acto, y mientras comenzaba a hacer su discurso, desde las tribunas, los ruralistas lo abuchearon y silbaron, ante lo cual Don Ricardo no se amedrentó y les respondió;



Qué huevos tenía Alfonsín..más allá de los errores de su gobierno el tipo era un demócrata y sabía muy bien qué había detrás de esa poderosa Sociedad Rural...

En el amplio abanico que cabe en la palabra *Ruralismo*, hay que entender que no todo es lo mismo.
Hay Productores pequeños, medianos y grandes, no es lo mismo una huerta familiar que produce a baja escala que un gran pool de siembra que tiene cientos o miles de hectáreas.

He allí que, meter al ruralismo en una misma bolsa es un grave error, pero ya sabemos cómo se logra mano de obra gratuita para causas ajenas que nada tienen que ver con la causa de los más débiles.

Ese sentido de *pertenencia* al ruralismo ha logrado que los pequeños Productores explotados por los grandes consorcios agroexportadores y los terratenientes poderosos, jugaran a favor de las causas de éstos, sin darse cuenta que nada tienen que ver con ellos pero bueno...así es como muchos sectores de la sociedad hacen de mano de obra gratuita para quienes los terminan esquilmando.

Cabe recordar también el grave conflicto que le tocó a la ex Presidenta Cristina Fernández de Kirchnner con los sectores ruralistas.
Al respecto así se refería Susana Yappert para el diario Página 12 en Junio del año 2008;



-El conflicto entre campo y Gobierno lleva casi cien días.
Intereses sectoriales pujan por modificar las políticas impuestas por un gobierno elegido por voluntad popular.
Lamentablemente, es necesario recordarlo.

El Gobierno ha dado muestras de ceder ante las presiones desestabilizadoras de su gestión y ha justificado una y otra vez las retenciones.
Que no son un invento argentino.
Las aplican varios países latinoamericanos, para no irnos a sociedades más lejanas.

Pero el campo va por más.
Va por todo.
Como siempre lo ha hecho en la Argentina.
Quizá la diferencia crucial del presente con el pasado sea que ahora no tienen militares para dar el golpe, ni un partido conservador como antaño.

Pese a ello, mantienen intacta su fuerza y su *mística*.
Sin duda la actual coyuntura nacional les ha otorgado una oportunidad.
Manejan el malestar de muchos, ya que han logrado, asesores de imagen mediante, poner en frente de las demandas del sector a todo el espectro ideológico con cuatro hombres que representan muy bien su rol de *patrones de estancia*.

Estos cuatro hombres tan distintos y distantes han sido catalizadores de descontento y malestares sociales.
Sería hasta saludable que quienes cortan las rutas hoy se atrevan a un juego político mañana, que elijan el camino de las urnas y no el de las botas y el de la ilegalidad, como lo hicieron históricamente.
Cortar la ruta es un delito.

Pero que lo sea para piqueteros, ruralistas, entrerrianos en contra de las pasteras, descamisados y oligarcas.
Cortar las rutas es un delito, no así que cada ciudadano tenga derecho a protestar, como lo garantiza la Carta Magna.
No se trata de ser kirchnerista o antikirchnerista; peronista o antiperonista.
Se trata de ser respetuosos del orden constitucional.
Y esto corre para todos, para los que salen a cortar rutas o para los que, desde un gobierno, actúan comprometiendo el futuro de una sociedad determinada.

Al margen de las conductas misóginas a las que se ha tenido que enfrentar continuamente Cristina Fernández =como le ha sucedido a Michelle Bachelet en Chile, no nos sorprendamos=, misoginia que en gran medida reproducen otras mujeres que no la creen capaz de gobernar, la juzgan frívolamente o la acusan de ser apenas una emisaria de Néstor Kirchner;
una gran porción de la sociedad argentina trasluce en este conflicto inmadurez, desprecio por la ley y una profunda mezquindad.

Los mismos personajes que aplaudieron al General Galtieri el 2 de abril, lo defenestraron dos meses más tarde;
los mismos que salieron a la plaza de Semana Santa, empujaron a Alfonsín a un abismo sin retorno, los mismos que votaron a Menem, votaron a De la Rúa, fueron a la plaza de Neustadt, a la de Blumberg, a Rosari, pero nunca se los vio caminar en círculos en Plaza de Mayo, ni llenar una plaza =ni cortaron una ruta... ejem= en defensa de los derechos humanos;
ni de nuestros recursos naturales, ni protestar por los abusos a los que nos hemos visto sometidos como país de parte de otras potencias.

Una gran porción de la sociedad argentina =acrítica y sólo movida por odios ancestrales e irracionales= colabora a agigantar un conflicto sectorial.
Una gran porción adopta eslóganes rancios como aquel que reza *todos somos el campo* y virgencitas de Luján y escarapelas en los actos, reciclando sociedades del pasado que no han traído más que desigualdad a la Nación.

Cuando el gobierno de Carlos Menem y Domingo Cavallo, otro matrimonio presidencial, terminó de destruir el aparato productivo nacional =tarea iniciada por los gobiernos militares que la Sociedad Rural indefectiblemente apoyó siempre= y se deshizo de los recursos estratégicos de la Argentina, no hubo la misma euforia por defender el país como en el presente.
¿Por qué lo que era del conjunto de la sociedad no se defendió con la misma energía que hoy se defiende lo que es de una minoría?

Es extraña la historia argentina.
Como me dediqué a estudiar los procesos de la comunicación humana me inclino a pensar que el presente puede ser leído como un triunfo en la comunicación de un sector de nuestra sociedad, el que siempre ganó, que siempre gana.
Al que es difícil contrarrestar, en términos mediáticos con todo lo que ello implica.
Pero hay actores que se pierden en la multitud.

Se extravían.
Políticos de izquierda que se mezclan en la mesa de la Sociedad Rural;
mujeres que van a la quinta de Olivos a criticar al mejor estilo de peluquería a la Presidenta con pancartas que dicen *abajo las extensiones, que se vaya* o *Kris: No te vayas con Chávez, andáte con-chuda*; y los millones de siempre, que prefieren ponerse donde brilla el sol.

¿Dónde están ecologistas que denunciaban los errores de sojizar una nación?
¿Los que denuncian la tala irresponsable de bosques con el exterminio de pueblos y etnias?
¿Dónde están los caritativos que cada junio reclaman dar más a los que tienen menos?

No me sumo a un reclamo sectorial, a defender el bolsillo de esos pocos que además tienen sobrados recursos para defenderse solos y que han demostrado un oportunismo pocas veces visto, usando eso que se les dio por llamar *bases*, en su beneficio.
Me sumo a defender los derechos de la mayoría, que se expresa periódicamente en las urnas.

Tal como pueden apreciar, esa oligarquía rural enquistada en nuestro país desde sus inicios siempre ha sido un sector de gran poder que ha sabido poner en jaque a cualquier gobierno democrático que se atreve a tocar sus intereses.
El tema es muy interesante, ¡¡¡riquísimo en datos históricos!!! y es precisamente el porqué se trata de *des-historiar* a la población, pues porque conocer la historia no le conviene a quienes ostentan el verdadero poder.

Nos quieren bien burros...la historia es aburrida, entonces nos han metido sus engañosos libros en la escuela donde los criminales y genocidas terminaban siendo...patriotas a quien rendir pleitesía..

El tema es atrapante como extenso, a quienes les interese un buen resúmen les recomiendo apenas uno de los cientos que hay al respecto;



Del cual extraigo sólo ésto;

-*El historiador y periodista O. Bayer se refiere a la influencia de los estancieros para impulsar el genocidio indígena, es decir, las conquista de esas tierras pobladas por los pueblos originarios fue financiada por los estancieros del norte bonaerense, encabezados por el titular de la Sociedad Rural, Martínez de Hoz, apellido conocido no precisamente por la democracia argentina.

De esta manera se incorporaron 42 millones de hectáreas que se repartieron entre los 1.800 estancieros de la SRA, y que con el desarrollo del ferrocarril potenciarían su producción y con ello el rol de Argentina como semicolonia británica*.

Cuando uno conoce la historia puede comprender gran parte de lo que nos pasa en la actualidad, por ejemplo pónganse ustedes a pensar cuando a aquello se lo denominó *Campaña del Desierto*...
¿qué desierto?...jeje...en ese.. *desierto* aún vivían miles y miles de lo quedó de aquellos Pueblos Originarios llamados *indios* o *indígenas*, y la *Campaña* no fué otra cosa lisa y llanamente que ir a matar indígenas y asolar sus existencias para robarles las tierras y repartírselas entre un puñado de vivos...que hoy le dicen a los gobiernos democráticos lo que tienen que hacer...

Por eso era necesario hacer ésta larga presentación para comprender que la *Ruralidad* no significa una sola cosa, pues nada tiene que ver un Productor de Duraznos de San Nicolás, o un Productor vitivinícola de Mendoza con éstos...impresentables que poseen millones de hectáreas destinadas al suicida monocultivo de la soja, que ahora además es transgénica y encima....para que cada vez les rinda más rocían a la población rural con sus glifosatos y demás venenos agroquímicos.

Y ojo...lector lectora de países vecinos de la América Latina e incluso de Brasil, que ésta *historia* argentina...les es común a ustedes cuando se ponen a estudiar vuestra propia historia, que en nada desentona con una misma gestación de esas clases dominantes detrás del robo de tierras a los Pueblos Originarios, que hoy son los grandes lobistas de la producción de alimentos, sean cereales, granos, hortalizas y la producción cárnica.

Pues entonces...
¿qué se puede esperar de éste sector?..nunca nada bueno.

Nada bueno es lo que les pasó a los jóvenes que defienden el derecho de los animales, a quienes se les ocurrió ingresar al acto de premiación de la Rural para visibilizar su protesta, solamente con unos carteles que alzaban para que la gente en las gradas tomara algo de conciencia...

Se los intentó después ridiculizar tildándolos de *Veganos* siendo que en realidad en esa agrupación no son sólo veganos sino también otros colectivos de lucha social.
Vean ustedes lo que les pasó;



Al mejor estilo de los tiempos de la *Campaña del Desierto*, sacaron a éstos jóvenes a talerazo y rebencazo, a puro *caballazo* atropellándolos con los equinos y revoleando sus taleros de cuero trenzado para meterles chicotazos en el lomo o donde sea, y algunos...hasta sacaron sus *facones* de plata =puñales de campo= con otras intenciones...

En las gradas...la gente alentando a los *Gauchos* de a caballo como en tiempos del circo romano..

¿Se da cuenta Usted al grado de demencia que hemos llegado?

¿De qué lado hay que ponerse?

Pues imagínese que en las gradas había público común que nada tiene que ver con el ruralismo, gente que ve atractivo eso de las premiaciones a unas vacas enormes que pesan cientos de kilos, incluso...esos Gauchos de a caballo que salen a meterle rebencazos a los manifestantes ni siquiera huelen los millones de dólares que amasan sus *Patrones* y lo más probable es que trabajen en negro por un mísero salario rural limpiando la bosta que cagan los caballos en el establo del Patrón...

¿De qué lado se ha puesto la sociedad?
Bien podemos cuestionar la protesta, ir a meterse ahí...en el corazón de la oligarquía nacional es medio como suicida...pero de todos modos, una sociedad con las neuronas relativamente sanas no puede alentar a semejante circo romano autóctono a poner en riesgo la vida de esos jovenes que ante todo, mucho antes de ser *Activistas* de su causa, son 
SERES HUMANOS....SEMEJANTES...

Creo que una parte de la sociedad ha quedado completamente *Desnortada*, sin brújula, y esas son las divisiones del hábil sistema, haciendo que quien nada tiene en común con esa élite....la termine defendiendo.
Por ejemplo, no me cabe duda alguna que incluso ésta opinión que estoy abordando puede ser tildada de *izquierdista*, pues yo pregunto...
¿es de izquierda revisar la historia o defender la vida de las personas y sus derechos?....

Por eso la sociedad enferma y desnortada es capaz de hacer lo que ese demente en Estados Unidos, quien seguramente desconoce la propia historia, y no comprende que esos *mexicanos* a quienes quiere eliminar eran los dueños de Texas hasta que los anglosajones se la robaron a México..., y a algunos mexicanos también habría que recordarles que a los Aztecas también le hicieron la *Campaña del Desierto* pero a su particular manera.

El mundo, amigas y amigos, es un verdadero cúmulo de atrocidades que se apilan a medida que retrocedemos en el tiempo y la historia, todos, querramos o no, gozamos de una patético ADN y de una herencia que se nos viene encima cada vez que nos ponemos a pensar porqué nos va como nos va....

Mismo retroceso incluso, necesitaría conocer las voces de las tribus o pueblos que fueron sometidos por los mismos Aztecas.. o a quienes padecieron a los Diaguitas en Argentina antes de que el *hombre blanco* los sometiera a ellos.

En-ton-ces...cuando analizamos a fondo todo ésto...uno termina sintiéndose necesariamente *EXTRATERRESTRE* porque ser terrestre...es un auténtico manual de atrocidades que no se pueden justificar BAJO NINGÚN PUNTO DE VISTA, y he allí...la Gnosis.

Cuando uno analiza realmente a fondo todo ésto...se caen a pedazos los nacionalismos, y todos los *ísmos* posibles, y apenas nos queda la elección de ponernos del lado de los más débiles, amarga realidad que debería al menos...hacernos remedar un milímetro...de los kilómetros de injusticias que cargamos sobre nuestras espaldas cuando miramos hacia atrás en la historia humana aunque hoy nosotros no hagamos lo que hicieron antes, entonces...¿podremos al menos limpiar un poco semejante horror del pasado negándonos a aceptar cosas del presente?.

No hay ideología prefabricada amixs...tiene que haber consciencia...algo que va mucho más allá de una mera cuestión política.

Me extendí demasiado...jeje...como siempre, tenía otras notis para compartir pero voy cerrando con éste tema de los *ruralistas*.

Greenpeace tomó venganza después del circo romano, y se burló de una manera realmente muy ingeniosa...
Hay que preguntarse que..¿cómo lograron hacer ésto?.., seguramente que en semejante inexpugnable recinto alguien con consciencia...les dió una mano y pasó ésto sin que los arcontes rurales se dieran cuenta, hasta que el papelón...jejee...ya estaba hecho;



Pero es apenas un recreo, porque el balance entre una lucha desigual sigue siendo muy negativo, yo sigo preguntándome...
¿no sería más inteligente y menos riesgoso y más económico aprender a votar?..

Cierro, ahora sí, con otra noti que precisamente pone de relieve otro ísmo, en éste caso el del Ecologismo, u otro *ísta* por Izquierdista.

Antes digo que nadie debería estar en desacuerdo por los postulados de ésta niña y de tantísimas personas que en verdad tienen las mejores intenciones, están convencidos honestamente de lo que los medios ...les informan, y quieren un planeta sano.

Ahora bien, me parece que, si siguen siendo los medios masivos quienes inducen la agenda en la sociedad...vamos a estar también desnortados, y gastaremos energía vital y neuronal en cosas que nos sacan siempre del eje que no quieren que toquemos, y es precisamente el eje del poder real.

La Ecología y la lucha por un planeta sano para todos es válida y yo la apoyo, pero cuando se radicaliza algo que es apenas una parte de un todo, y hace la vista gorda de cosas gravísimas...me parece un derroche distractivo que no suma, sino que...divide;



-Greta Thunberg, la joven sueca de 16 años que ha hecho de la lucha contra el calentamiento global el motivo de su vida, adquirió en pocos meses una vertiginosa celebridad que genera controversias sin duda reveladoras de un malestar generalizado ante una crisis planetaria irreversible.

El contenido del discurso de Greta es, desde todo punto de vista, indiscutible.
Señala la ingente tarea de dirigirnos hacia una gestión ambiental sostenible desde la era del Antropoceno, las responsabilidades que los seres humanos tienen ahora para con la naturaleza y las generaciones futuras, y el cambio de comportamiento individual, colectivo, económico y político que ello implica.
Sin embargo, muchxs consideran que la que se presenta como activista ecológica es en realidad, a pesar de ella, un producto marketing del capitalismo verde.

Su seriedad, el síndrome de Asperger que le diagnosticaron hace unos años, su edad, el tono de su discurso en el que reivindica el pánico como motor de cambio, sus sponsors, sus padres, también le valieron muchas críticas.
En un primer nivel de reticencia, la razón de la adultez la invita a volver al colegio en vez de usurpar una autoridad política reservada a la pericia de lxs mayores, ya que, para dedicarse de lleno a su activismo, Greta Thunberg decidió tomarse un año sabático.

Al cambio climático lo descubrió a la edad de 8 años, al ver documentales sobre el derretimiento de los glaciares, el destino de los osos polares y de los animales marinos. Desde entonces, ha estado aprendiendo constantemente sobre el tema:
conoce de memoria los elementos de la tabla periódica, revisa los informes del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático-IPCC, lee la curva de Keeling y sabe explicar qué son los gases de efecto invernadero y cuál es su impacto sobre el clima.

A los once años, después de un episodio depresivo de ocho meses en el que habría perdido casi 10 kilos, se le diagnosticó síndrome de Asperger.
A diferencia de otrxs niñes, según un retrato que le dedica el New York Times, ella no ha podido olvidar esas imágenes de osos polares hambrientos o de océanos llenos de plástico.
A los 12 tomó sus primeras decisiones militantes:
se hizo vegana y convirtió a su familia a su nueva forma de vida, a tal punto que su madre, mezzosoprano sueca, interrumpió su carrera para dejar de viajar en avión =por la emisión de carbono que provocan esas naves=.

En mayo de 2018, ganó un concurso de ensayos sobre el medio ambiente organizado por un periódico sueco, que publicó su artículo.
Al poco tiempo, el 20 de agosto, después de las olas de calor y los incendios forestales que tuvieron lugar en Suecia durante el verano, lanzó la primera *huelga estudiantil por el clima*.

Decidió dejar de ir a la escuela hasta las elecciones parlamentarias suecas del 9 de septiembre e hizo un llamamiento al Gobierno de ese país para que, en conformidad con el Acuerdo de París, redujera las emisiones de carbono.
Todos los días, durante el horario escolar, se sentó frente al Riksdag con el cartel:
*Kolstrejk för klimatet* =huelga estudiantil por el clima=.

Ahora esa huelga, también conocida como Fridays for future, se convirtió en un movimiento internacional de adolescentes, estudiantes, artistas, activistas y científicxs, que participan, cada viernes, en manifestaciones en apoyo a la acción climática, algunas con incipiente impronta ecofeminista.
Así, Greta Thunberg devino en una figura cuya notoriedad la ha llevado hasta la COP 24 =la Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático de 2018= donde pronunció un discurso de alerta ante un peligro inminente, desde un *nosotres* que generó reacciones epidérmicas:
*les niñes*.

Con sus marchas por el clima, estxs niñes vienen clamando cada viernes, en países de todos los continentes e incluso en el Antártico, que se consideran la generación capaz de prevenir una catástrofe climática.
El pasado 15 de marzo fue un día histórico en el que más de 1,4 millones de jóvenes manifestaron en 125 países y 2083 ciudades.
Una movilización juvenil universal en favor de un cambio climático que no tiene precedentes en la historia reciente.
En Francia, lxs jóvenes dedicaron la llamada *Marcha del siglo* a la convergencia entre la justicia social y ecología.

En esas marchas, se destaca la estrecha relación entre feminismo y ecología, ya que las chicas tienen muy claro que la opresión de género y la destrucción de la naturaleza son dos procesos que tienen su origen en las mismas estructuras de dominación, patriarcales y capitalistas.
En lxs distintos comunicados de estas adolescentes, se expresa claramente el carácter ecofeminista de sus demandas, entre las cuales el cese de la financiación pública de armamento =incluida la producción y venta de armas= y, en particular, la abolición de las armas nucleares.

Esto es, también la conciencia de que la dominación de la naturaleza corresponde a la prerrogativa de una virilidad tóxica que estamos condicionadxs a valorar desde nuestra infancia.
La capacidad de movilización de lxs jóvenes asusta.
Basta con ver el seísmo provocado en los medios franceses, cuando se dio a conocer la invitación del colectivo transpartidario *Aceleremos la transición ecológica y solidaria* para que pronunciara un discurso en la Asamblea Nacional, el martes 23 de julio.

Varixs parlamentarixs se opusieron a su llegada y anunciaron que boicotearían el evento.
En su mayoría diputados de los partidos de derecha y de extrema derecha LR =Les Républicains= y RN =Rassemblement National=, pero también del partido de turno LREM =La République en Marche=, expresaron su categórica negativa a legitimar la presencia de Greta Thunberg en la Asamblea.

En refuerzo de esa negativa, cierto discurso médico apunta al *extenso historial psiquiátrico* de Greta, *escudo humano inexpugnable*, según el cirujano urólogo y cofundador del portal francés Doctissimo, Laurent Alexandre, para *predicadores apocalípticos que encontraron así la musa perfecta:
sin distancia, sin espíritu crítico, sin sonrisa, sin humor, sin capacidad de resistencia a la manipulación y con un discurso ingenuo, repetitivo e hipnótico*.

Desde sectores de militancia anarco-ecologista, se critica la estrategia de una colaboración con empresarios, políticos e instituciones multimillonarias y científicas que buscan absorber la posibilidad de pensar alternativas disidentes, radicales, de anti-consumo, de desobediencia civil y ecológica a la ley del mercado.
Algunxs han resaltado una supuesta proximidad de la familia Thunberg con Ingmar Rentzhog, creador de la start-up We Don’t Have Time =no tenemos tiempo=, presidente y director ejecutivo del grupo de expertos Global Utmaning, cuya fundadora es Kristina Persson, hija del multimillonario y ex ministro socialdemócrata de Desarrollo Estratégico y Cooperación Nórdica entre 2014 y 2016.

El concepto de *transición ecológica*, característico de cierto green business, es puesto en tela de juicio por economistas, como transición del capitalismo tradicional hacia un capitalismo *verde* orientado a la conquista de mercados de masas con productos o energías supuestamente limpios.
Un financiamiento de innovaciones a través de fondos de capital de riesgo en los que ciertos multimillonarios en el Silicon Valley no han dudado en invertir su fortuna personal.

No obstante, el discurso de Greta se acerca más a una propuesta de desaceleración, de descrecimiento, que a una transición económica hacia un capitalismo *limpio*.
Por otra parte, dijo claramente en la COP24 que *Nuestra biosfera es sacrificada para que los ricos =de países como el suyo= puedan vivir en el lujo.
El sufrimiento de la mayoría paga el lujo de algunos*.
Estaba frente a 20 jefes de Estado.

De todos modos, cada nuevo paso que da, levanta nuevos interrogantes.
Invitada el 23 de septiembre a la Cumbre Mundial sobre el Clima de la ONU, Greta Thunberg anunció que irá en velero desde Inglaterra.
Se trata del Malizia II, que pertenece al equipo del mismo nombre fundado por el vicepresidente del Yacht-Club de Mónaco, Pierre Casiraghi y que forma parte del proyecto *My Ocean Challenge*, para *promover la protección de los océanos*.

A sus detractores, que la acusan de contar con el apoyo de dudosos lobbys, responde:
*El equipo de Malizia tiene patrocinadores.
Pero para este viaje conmigo a Nueva York, no hay patrocinador comercial.
Me ofrecieron un viaje gratis porque apoyan mi causa*.

Para sectores de activismo anticapitalista como *Extension rébellion*, aunque la cobertura mediática de la joven puede tener efectos positivos, sus intervenciones carecen de una crítica profunda a la globalización.

Pero según el astrofísico y militante de izquierda francés Aurélien Barrau, investigador del CNRS de Grenoble, la ciencia está del lado de Greta:

*Los que nos dirigen no han entendido en absoluto la magnitud del problema.
Están totalmente fuera de lugar.
Piensan que los pequeños ajustes, las pequeñas acciones, las pequeñas cosas, pueden resolver el problema cuando nos enfrentamos a una gran crisis existencial.
Los pocos diputados rebeldes deberían entender que la ciencia, la seriedad y la razón están precisamente del lado de Greta.

Sabemos desde hace 40 años que estamos en una situación crítica.
15.000 científicos han advertido de la gravedad de la situación y no se ha hecho nada.
¿Y ahora están indignados de que una mujer joven venga a transmitir este mensaje? 
Seamos claros:
La ciencia está del lado de Greta*.

Precisamente, la alocución de Greta Thunberg en la Asamblea Nacional remitía al último informe del IPCC publicado en octubre de 2018, que alerta sobre el estado del actual presupuesto de emisiones de CO2, a punto de agotarse.

Lxs mismxs disputadxs que aplaudieron el discurso de Greta Thunberg, votaron el mismo día, unas horas más tarde, a favor del tratado de libre comercio entre la Unión Europea y Canadá, el Ceta =Comprehensive economic and trade agreement=, que viene a completar el del Mercosur y que inhabilita a los poderes políticos para llevar a cabo políticas sociales y ecológicas.

La ratificación fue aprobada por 266 votos a favor y 213 en contra.
Mientras la derecha e incluso la mayoría estaban dividas, la izquierda se opuso unánimemente.
Ahora le toca al Senado ser consultado, en una fecha que aún no ha sido definida.
Estas votaciones nacionales continúan en toda Europa, se espera que voten un total de 38 asambleas nacionales o regionales.

El Ceta es el primer acuerdo de este tipo en el que participa toda la Unión Europea.
Varias ONG advierten que los mecanismos del tratado permiten a los inversores privados impugnar una decisión pública que les resulte desfavorable:
en su origen, era un dispositivo concebido como parte de la descolonización para proteger las inversiones de las potencias europeas en sus antiguas colonias.

Desde entonces, se ha ido extendiendo gradualmente y ahora se utilizan ampliamente estos acuerdos que corrompen la capacidad de las autoridades públicas para llevar a cabo una política ecológica y social, en beneficio de las empresas multinacionales y de su dominio sobre la industria agroalimentaria a nivel planetario.

El cinismo desacomplejado de lxs políticxs que se manifiesta en la simultaneidad entre los aplausos al discurso de Greta Thunberg en la Asamblea y el voto a favor de la Ceta parece confirmar lo poco que se puede esperar del diálogo con gobiernos y empresas.
Cinismo o pedagogía de la crueldad, que hace eco a otra votación que tuvo lugar el 28 de mayo de 2018 en la misma asamblea.

Esa vez se impuso el voto en contra sobre el principio de establecer un dispositivo para regular el sufrimiento animal en la cadena de producción agroalimentaria, como por ejemplo la instalación de una videovigilancia en los mataderos, la prohibición de aplastar vivos a los polluelos machos o de gasear a los cerdos con dióxido de carbono.

En otro orden de crueldad, el reproche a la ausencia de sonrisa de Greta es una constante.
De ahí, opera un deslizamiento hacia un complotismo misógino y psicofóbico cada vez más violento.
*Greta Premio Nobel del Miedo, es manejada*, escribe el filósofo Michel Onfra y, *por intereses ocultos*.

*¿Qué alma habita aquel cuerpo sin carne?* pregunta el pensador inquieto por el semblante de esta joven *cuyo rostro de cyborg ignora las emociones =ni sonrisa, ni risa, ni asombro, ni pena, ni alegría=.

Un rostro de *Alice sueca … =continúa Onfray= que no es de mármol, sino de silicona*, ha venido a castigar la conciencia de los adultos con el látigo prepúber de la dictadura ecológica bien pensante.

Aparte del climato-escepticismo por así decirlo tradicional, de una oposición a la supuesta voluntad de unos ecologistas apocalípticos de llevarnos a una Edad de Piedra vegano-bolchevique, apuntar el autismo de Greta equivale para algunos a protegerse del fantasma del Führer.

En el país de la razón de Las Luces y de la colaboración con el nazismo, el síndrome de Asperger de una activista de dieciséis años despierta el punto Godwin =ese punto en el que las discusiones terminan con la aparición de la amenaza del nazismo=.

Otra Alice, de apellido Anafasenko, doctora en literatura e investigadora, miembro de la Asociación Francófona de Mujeres Autistas, respondió al desencadenamiento de odio sintetizado bajo la pluma de Onfray:

*Les autistas no somos posthumanos.
Desafortunadamente para nosotros, estamos en el presente, en un presente difícil y al que nos aferramos a pesar de nuestras especificidades sensoriales y neurológicas que no facilitan nuestra tarea.
A pesar de la estigmatización a la que nos enfrentamos.

A pesar de los prejuicios que llueven cada vez que intentamos expresarnos.
Y no es porque no manifestemos nuestras emociones como ustedes, no es porque tengamos una racionalidad y afectividad diferente a la suya que no podamos pensar y pesar en los debates contemporáneos*.

Anafasenko concluye señalando que, sobre las ruinas de la French Theory, persiste un disciplinamiento conservador que siempre termina patologizando a las mujeres:

*La pequeña Greta Thunberg no sólo se equivoca en ser autista, sino que también es una mujer y una adolescente, es decir, lo contrario de lo que conforma nuestro panorama político, intelectual y mediático actual.
Y esto es insoportable para la mayoría de los hombres.

Si tiene razón o no, no importa.
Esa no es, esa ya no es, la pregunta de hoy.
Porque lo que el fenómeno Greta revela básicamente es el eterno falocentrismo del pensamiento francés que las feministas ya deploraban =y Derrida con ellas= en los años setenta*.

Aquel inextirpable falocentrismo fue denunciado desde el origen del Movimiento de liberación de la mujer en mayo del 68, por su confundadora Antoinette Fouque, que teorizó *la envidia o deseo del útero* como fundamento del odio hacia las mujeres.

En la Cumbre de la Tierra organizada por las Naciones Unidas en Río de Janeiro en junio de 1992, declaró:

*La primera colonización es la del útero, pero como el capitalismo se recicla constantemente, el falocentrismo busca constantemente nuevos territorios que colonizar para modernizarse y enriquecerse a la vez que sigue esclavizando y explotando el cuerpo de las mujeres*.

Si la ciencia está del lado de Greta, varios colectivos feministas también lo están.
Es el caso de Femen, que ha decidido incluir la lucha contra el cambio climático en su activismo y apoya firmemente a Greta.

Jenny Wenhammar, fundadora de Femen Suecia y ex miembro del Partido Verde de su país, explica las correlaciones entre las lógicas de deslegitimación de las acciones de Femen y las de Greta:

*Las declaraciones que pretenden que es usada por otros, incluyendo sus propios padres, se asemejan a la teoría de la conspiración en base a la cual Femen fue fundada y dirigida por un hombre.
Porque piensan que las niñas y las mujeres no pueden tener la capacidad de hacer lo que hacen por sí mismas.
Los adultos han abusado, violado y jodido a la Tierra.

Lxs activistas que luchan por salvar lo que queda son asesinadxs cada semana.
La Generación-Greta está aquí para cambiar este paradigma.
Lxs niñxs y Greta, que salen de la cajita en la que se espera que se queden, asustan literalmente a los adultos que pretenden luchar contra el cambio climático a través de la negación*.

A medida que se refuerza su voluntad de despertar conciencias, y su prestigio, crece la construcción discursiva de la monstruosidad de un mundo secuestrado por niñes. 
Esto parece tener relación con el punto Godwin francés que ha despertado la figura de Greta en el ya citado Michel Onfray, entre otros:
el miedo a que un *nosotres, les niñes*, adquiera en boca de la joven la potencia de un *Nosotros, los hijos de Eichmann* de Günter Anders.

El apresuramiento de algunos en sugerir que las trenzas nórdicas de Greta reeditan el bigotito germánico no es sino una anticipación y una forma de evitar pensar la destrucción del planeta como la continuidad de una lógica de producción de muerte en masa, que no empieza ni termina con Auschwitz :

*Tan pronto como se nos da un empleo para que ejecutemos una de las innumerables actividades aisladas de las que se compone el proceso de producción, perdemos no sólo el interés por el mecanismo en tanto que totalidad y por sus efectos últimos, sino que, además, se nos arrebata la capacidad de crearnos una representación de todo ello.
Una vez sobrepasado cierto grado máximo de mediación =y esto es la norma en la forma actual del trabajo industrial, comercial y administrativo=, renunciamos, o mejor dicho, ya no sabemos siquiera que renunciamos a lo que sería nuestra tarea: c
ontar con una representación de lo que hacemos*. =G.A=

Ya que el poder de producción del ser humano excede completamente su capacidad de representación, de percepción de la constante repetición de una catástrofe, nos dirijimos hacia a la obsolescencia programada de la vida humana, animal, vegetal.
En condiciones de impunidad ilimitada, la evacuación de toda noción de responsabilidad para con la destrucción de las especies y del planeta impide que se pueda tomar una decisión entre continuidad o ruptura.

A muchxs resulta inaceptable leer entre líneas, en el discurso de una niña con Asperger, que están siendo los dignos herederos de Eichmann.
Una niña que, no pudiendo renunciar a una tarea que considera como la inversión de un proceso de muerte, se destaque como capaz de percibir, y dar otra representación del mundo.

Mas allá de la posibilidad o no de una manipulación capitalista de la hiper-conciencia de Greta Thunberg, en el miedo de lxs adultxs a que *se le otorgue a la juventud la representación política que se merece*, parafraseando las palabras de Ofelia Fernández, resiste el mismo viejo negacionismo a partir del cual se sigue programando la liquidación de nuestros recursos vitales.

Sabemos que la ecología no es soluble en el capitalismo, habrá que hacerse a la idea de que la ruptura y las alternativas disidentes, quizás, también puedan surgir desde subjetividades neurodiversas que tampoco son solubles en una percepción normativa de la legitimidad política.

Bueno...como verán..todo es una ensalada mixta donde se ponen ingredientes diversos y se mezcla sin piedad.
Lo triste es que legítimos reclamos y positivas propuestas se gatillen bajo la excusa del *Cambio Climático*, porque en realidad antes que pensar en que bajando la temperatura vamos a hacer un mundo mejor...es cuanto menos dejarse usar por los mismos de siempre.

Sería hermoso que todas las ideas honestas fueran gatilladas ante la indignación por la clase de mundo al que hemos llegado y que hemos sostenido, y que no necesitemos que un puñado de vendedores de tecnología nos convenzan de que el mundo va a mejorar si les compramos sus artefactos para =según ellos= enfriar un mundo que se derrite.

Tantísimo es lo que necesita de alta prioridad...más que cambiar la matriz energética, que es apenas un eslabón de ésta poderosa cadena que hace de éste mundo...un manicomio.

Una cosa no quita a la otra, pero si sólo atacamos en un solo frente...no estaremos siendo más que funcionales a los mismos de siempre.
En definitiva, creo que el mundo que muchos ansiamos no es compatible con quienes ostentan el poder y lo quieren tal como está, ante lo cual ante todo, deberíamos sentarnos a discutir cómo les quitamos el poder...y qué hacer del poder..

Fuerte abrazo.

Gilgamesh***

Fuentes;
-elconfidencial
-pagina12
-laizquierdadiario
-pagina12B