* Porqué monitorear la actividad solar. *

Tal como esperaba, la actividad solar no ha sido demasiado importante a pesar de los pronósticos de NOAA.
Los eventos se han producido desde éstas manchas;
1654; C2.2-C1.4-C1.4-C1.2
1650; C1.1-C1.1-C1.0-
1652; C1.1

Parece ser que un grueso filamento se soltó en torno a la mancha 1650, y podría ser geo-efectivo, aún oficialmente no se ha informado sobre su dirección. No creo que acarree algún problema, mas que alguna mínima alteración, que quizás sea lo que se observa en los gráficos de protones y electrones.





He estado haciendo un repaso de los grandes eventos X desde la era de los satélites para hilar fino sobre en qué época del año se han producido. Me llevé una sorpresa;

Dos de las erupciones medidas por el GOES más grandes fueron los eventos X20 =2 mW/m2= registrados el 16 de Agosto de 1989 y el 2 de Abril de 2001. Sin embargo, estos dos eventos fueron eclipsados por una erupción el 4 de Noviembre de 2003, que ha sido la erupción de rayos X más potente jamás registrada. Al principio se la clasificó como una X28 =2.8 mW/m2=. Sin embargo, los detectores de GOES quedaron saturados durante el pico de la erupción, y actualmente se piensa que realmente estuvo entre X40 (4.0 mW/m2) y X45 (4.5 mW/m2.
Se cree que la erupción más poderosa de los últimos 500 años sucedió en Septiembre de 1859: fue observada por el astrónomo británico Richard Carrington y dejó rastros en el hielo de Groenlandia en forma de nitratos y berilio-10, que permite medir su potencia aún hoy.
El pasado 23 de Julio de 2012, el Sol lanzó una gigantesca nube ardiente de partículas y radiación hacia el espacio. En su camino, esta enorme eyección de masa coronal dió de lleno en una de las sondas gemelas Stereo de la NASA, que pudo registrar su velocidad. En el momento en el que dejó la superficie solar, la llamarada viajaba entre 2.896 y 3.540 kilómetros por segundo. Los científicos del centro espacial Goddard de la NASA en Greenbelt, Maryland, casi no podían creérselo. Acababan de presenciar la eyección más rápida jamás registrada por la misión Stereo desde su lanzamiento en 2006.

¿A qué apunto con éstos datos?, si bien tenemos llamaradas solares fuertes a lo largo de todo el año, es decir que las han habido y las hay en cualquier mes, lo significativo resulta de que, aquellos eventos considerados como los más potentes de la era moderna que fueron registrados y considerados como *hitos*, nunca ocurrieron en meses del Verano en el Hemisferio Sur. Desde Abril =a cuanto mucho Noviembre= se sucedieron éstos eventos, que son un dato más para tener en cuenta sobre el mentado pico de éste ciclo que el mundo esperaba para el mes de Diciembre del año pasado. No es un condicionante ya que nuestros registros solares cuentan con un escaso historial si tenemos en cuenta la era de los satélites, pero tampoco es para desecharlo si nos apoyamos en las reiteradas y cansadoras noticias de advertencia, oficiales como no oficiales, sobre los riesgos de un gran evento solar para éste ciclo 24. 

¿En qué cambia la consecuencia de un Hemisferio u otro?
Por las características de nuestro campo magnético, América del Sur se encuentra entre las zonas menos afectadas por las tormentas solares, además, es en el Polo Norte donde se encuentran grandes concentraciones humanas en su proximidad. Sin embargo, en la región ubicada entre el sur de Brasil, Uruguay y el norte de la provincia de Buenos Aires se da un fenómeno conocido como la Anomalía del Atlántico Sur que ya hemos tratado en reiteradas oportunidades, una fuga de electrones desde los cinturones de Van Halen que provocan serias anomalías especialmente en vuelos de aeronaves. Un aspecto positivo es que las partículas con carga eléctrica provenientes del Sol no llegan fácilmente a estas regiones del Sur, y su impacto en las redes energéticas es menor. Pero cuando el campo magnético de la Tierra se invierte, fenómeno que ocurre a intervalos irregulares que van desde los mil hasta 200 mil años, el Ecuador queda desguarnecido durante lo que dura éste proceso, alrededor de entre 100 y 800 años. En ese período la humanidad podría padecer un baño de partículas dañinas para la salud. En mi humilde opinión, un evento solar de proporciones afectaría a todo el planeta sin excepción, ya que la tecnología y las redes eléctricas se han multiplicado como nunca antes. Si entendemos que en el evento Carrington las auroras llegaron a ser vistas en Cuba y el Caribe, imaginemos una situación similar o peor, debido al debilitamiento de nuestra magnetósfera, hecho declarado oficialmente hace años por la ciencia oficial.

Sumarle también éste ciclo, en el cual las anomalías espaciales y el viaje de nuestro sistema solar en medio de las nubes de materia interestelar altamente cargadas, son un factor extra, un plus que hace a un combo muy peligroso. El problema más grave para el Hemisferio Norte si un evento solar se produce en el Verano de ese Hemisferio, es el efecto directo sobre las personas, que generalmente no es habitual, pero ante todas éstas nuevas condicionantes del clima terrestre y espacial, podrían cobrar una gravedad excepcional. Ya en la tormenta de Noviembre de 2003 muchas personas que se hallaban expuestas a los rayos solares en EEUU en el momento del fuerte evento X28, quedaron atontadas, en un estado de conmoción y shock, pero lamentablemente nunca trascendió lo que ese efecto provocó a posteriori en la salud de aquellas personas. Ese es el efecto que se teme si un gran evento ocurre en el Verano Norte o en meses cercanos a esa estación. Ya sabemos sobre las advertencias oficiales, pero son muy ambiguas ya que por otro lado afirman que un gran evento solar no es frecuente y bien podría suceder dentro de 100 años o cuando ya no estemos aquí. Si recopilamos los datos mundiales de pérdida de vidas por fenómenos climáticos o geológicos, inclusive por enfermedades, guerras o violencia cotidiana, podemos deducir que el Sol no es nuestro asesino al acecho, pero sí es capaz de lograr lo que los seres humanos no somos capaces de lograr, es decir, un cambio rotundo de nuestra civilización. 

He allí donde radica, en gran parte, la preocupación por ponerle al tema solar toda la atención y lejos está de ser un fanatismo o un capricho. Las personas solemos elegir temas de ésta clase como nuestros favoritos, y afortunadamente ocurre eso ya que la gama de riesgos que afronta nuestra humanidad es muy variada. Ninguno de esos temas es menor que otro, y es preferible que se diversifique el seguimiento antes que todos nos centremos en uno solo. Mis temas aquí tratan de ser variados pero como ya saben el tema solar es el elegido a mi consideración y creo que luego de éste post podrán comprender un poco más que lo mío no es un capricho si no una elección, como las hacemos todos, ni mejor ni peor, ni más importante ni menos relevante. Es tan valorable que alguien se aboque a los sismos, a los huracanes, a las epidemias, a la política, etc., y creo que mucho peor es no hacer nada. Sabemos que éstos eventos son eso, hechos que suelen ocurrir sin previo aviso y entonces muchos se preguntarán;
¿para qué entonces preocuparse tanto? para lo mismo que pensaban Maria Curie, Luis Pasteur, o el mismo Carrington, que es preferible anticiparse con lo poco o mucho que poseamos de conocimiento sin bajar la guardia nunca, porque el conocimiento se escribe cada día en la práctica y el estudio, en el ensayo-acierto-error, y que si nadie se hubiera preocupado alguna vez por hallar respuestas no nos estaríamos comunicando ahora a través de una pantalla, por ejemplo. Me resulta imposible de imaginar que quienes cobran un jugoso sueldo para estudiar las tormentas solares sean acusados de sembrar el pánico, simplemente estudian y advierten. 

Quienes nos consideramos *creyentes* sabemos perfectamente que nunca leeremos los estatutos de Dios ni el arqueo de su infinito, ni el inventario de su Creación, sin embargo Él, muchas veces ha permitido que al menos un minúsculo rayo de conocimiento llegue a la razón humana, aún ante sucesos imposibles de comprender. Sé que en los temas científicos tenemos a mentes excelsas con un conocimiento tremendamente caudaloso y un coeficiente intelectual varias veces superior al que la mayoría tenemos, pero en las grandes obras son necesarios tanto Arquitectos como Albañiles, Jueces como Abogados, Generales como Sargentos, y si uno, humildemente puede aportar una pequeña porción útil a los demás, creo que siempre es positiva. Me hubiera encantado que me explicaran la Química de una forma amena, para que me hubiera enamorado de ella y hubiera sido una eminencia, o por el simple hecho de entenderla, pero lamentablemente el sistema no fué ni es lo suficientemente generoso para que todos tengamos la posibilidad de aprender algo que suele estar circunscripto para acotados grupos humanos. Por eso, éste sitio no pretende ser una academia de ciencias, pero tampoco un almacén de ramos generales, es más bien una construcción de buena voluntad.
Gilgamesh***