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Echamos un vistazo al Sol.
Manchas a la vista;
Como se observa en la imágen la mancha ex 2529 retorna y ya es visible en el borde Nor-Oeste, acusando una intensa actividad magnética, al menos en lo visual con un chisporroteo interesante.
En el compuesto de la siguiente imágen podemos entender cómo nuestro campo magnético ha estado bastante inestable desde que el viento solar trepó hasta alcanzar unos 650 kilómetros por segundo de velocidad, lo cual puso a nuestro escudo en estado de intensa reverberación produciendo algunas leves tormentas geomagnéticas.
Al final del compuesto apreciamos a los electrones que se habían derrumbado conjuntamente con nuestro campo magnético y que repentinamente consiguieron elevarse notablemente incitando a la magnetófsera a hacer lo propio.
Y ésto no es coincidencia sino..organización celeste, especialmente al ver que el mismo día de la crisis de nuestro escudo, los rayos cósmicos estaban entrando peligrosamente y no había respuesta;
La radiación cósmica es alta, el sistema protector de nuestro planeta tendrá que ingeniárselas los próximos 10 u 11 años para soportar el embate de los neutrones que parecen no aflojar aprovechándose de un Sol en largas vacaciones.
Nuestro gráfico de estudio con inicio en Septiembre del 2014, vean donde estamos;
Recién hoy los neutrones están siendo un tanto sofocados por acción de esos vientos soplados desde los agujeros coronales solares, pero es poco..apenas un parche;
Mientras todo ésto ocurre, la energía cósmica acumulada en las entrañas del planeta sigue mostrando clara evidencia de la actividad volcánica;
Ojo con varios datos, ya no sólo tenemos actividad en aumento en volcanes conocidos o despertares de otros que estaban en silencio. Como habrán visto en las instantáneas, comienzan a presentar actividad zonas de esas que antes eran llamadas *termales* o *lodales* tal el caso de Puerto Escondido en Colombia o el Rincón de la Vieja en Costa Rica.
Muchos están empezando a poner un ojo en zonas que hoy son turísticas...;
-Lo llaman el techo de Panamá porque, desde sus privilegiados 3.474 metros de altura, otea sin descanso el Mar Caribe y el Mar del Sur.
Ubicado en la Cordillera de Talamanca, en la provincia occidental de Chiriquí, el Barú es el pico más alto de Panamá y el tercer volcán activo con más elevación de Centroamérica, superado por el de Fuego en La Antigua, de 3.765,53 metros, y el Santa María, de 3.772 metros, ambos en Guatemala.
El Barú es un volcán científicamente activo porque solo han pasado casi 500 años desde su última erupción =1550=, que fue documentada por navegantes españoles que viajaban por el Pacífico panameño. Para que un volcán sea considerado inactivo debe llevar sin actividad más de 10.000 años.
*Hasta que no han transcurrido como mínimo 10.000 años, no se puede certificar la inactividad de un volcán. No hay más que ver el caso del Chaitén, en Chile, que entró en erupción en el año 2008 tras más de nueve milenios*, recuerda el vulcanólogo Arkin Tapias.
En los últimos 1.800 años, el Barú ha sufrido unas cinco erupciones, que se han dado aproximadamente cada 400 a 500 años, pero el dato más antiguo reportado por el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales fija en el 9280 a.C. la primera erupción confirmada.
*Si atendemos a sus tiempos y consideramos que entra en actividad cada cuatro siglos, podemos decir que estamos en el rango de una nueva erupción*, advierte el investigador. La pregunta del millón de dólares es cómo de profundo es el sueño de este oteador de mares. Según el experto, hay dos escenarios posibles: que el Barú se esté echando una larga y apacible siesta o que haya caído en un coma del que es difícil despertar.
Tapias se decanta por la primera opción porque en los alrededores del cráter se suelen dar pequeños sismos, en su gran mayoría imperceptibles, que desvelan cierta actividad volcánica. Por eso, le gusta decir que *el Barú ronca y ronca bastante*.
Aunque la palabra *ronquido* impresiona, el científico asegura que no existe ningún tipo de peligro porque las erupciones son en la actualidad fenómenos *extremadamente predecibles*. Así que, que no cunda el pánico.
¿Será?...
Gilgamesh***
Fuentes;
-diarioextra
-eldiario
-teletica
-elheraldo
-actualidad
-rionegro
-crhoy
-lavanguardia
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