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domingo, 9 de agosto de 2015

* El voto y la urna *

***Excelente Domingo para todos

Por aquí Domingo de elecciones primarias empapadas de lluvia, buena ocasión para compartirles la opinión de Fernando Buen Abad Domínguez, pero antes un peñique sobre el Sol.
Un par de estallidos en farside ayer, que explican cómo hace el Sol para ponerle freno a la radiación cósmica;





Pero con la colaboración del viento que fluye desde los agujeros coronales que enfrentan a la Tierra, aunque ahora comiencen a desacelerarse;



De las manchas solares que enfrentan a la Tierra, bueno.., mejor dicho *la mancha*, que es la única que intenta denodadamente aportar lo suyo pero que no obtiene resultados para el equipo solar;



Así que amigos, ésto es todo lo que hay, muy a pesar de que el amigo Galileo ya observaba las manchas solares allá por el año 1.613..., aún no podemos predecir lo que pueden hacer;



Domingo de elecciones en Argentina regadas con una lluvia que complica la asistencia de la gente a las urnas.
Urnas..., ranuras por donde entra algo llamado *voto*, como si fuera una especie de acto sexual.
Papeleta que descansa en el interior de la urna y que al volver a salir, da nacimiento a algo nuevo.
Para algunos esperanza que viene con una pan bajo el brazo, para otros...un aborto o algo malogrado.
Elegir al verdugo...o elegir al muchachito de la película que llega para rescatar a todos del opresor..
¿Elegimos?..¿Qué elegimos?...¿Qué tenemos en cuenta para elegir?..

Fernando Buen Abad Domínguez;

¿Síndrome de Estocolmo electoral?

-Preguntas retóricas para iniciar una reflexión. ¿Puede una víctima votar por su victimario? Alguien que roba, tortura, reprime, saquea y humilla sistemáticamente a un pueblo, ¿puede salir victorioso en unas elecciones limpias? Aquel que exhibe con impudicia =impune= en los hechos, su obscenidad ideológica, sus derroches, sus corruptelas, su servilismo, su entreguismo… su estulticia, ¿puede ganar el voto de una mayoría y representarla? Esos que se muestran circenses y faranduleros, insensibles al dolor popular, embriagados con su *vida empresaria* o *funcionaria*, henchidos de glorias fraudulentas, desfigurado el rostro por su mentalidad corrupta, deformados por su ignorancia y señalados como delincuentes, criminales y traidores… todo junto y por partes ¿pueden ser líderes populares de varias generaciones?

Uno no puede descargar responsabilidades sobre las victimas hasta no *separar la paja del trigo* y se esclarezcan los factores, objetivos y subjetivos, que permiten a la democracia burguesa convertirse en dictadura de la estulticia con votos. Tenemos a la vista casos estruendosos. Todo análisis simplista prueba ser fallido. Unos argumentan que la *ignorancia* del votante es la bendición de la oligarquía; que el *atraso político* de los pueblos es el ariete de todos los engaños; que todo es obra de la manipulación mediática al estilo Berlusconi y que la escuela de Goebbels está más actualizada que nunca. Pero el debate teórico y práctico es crucial.

¿En qué piensa cuando piensa el votante? Si, hipotéticamente, ser pobre contiene, entre mil factores, el de la vergüenza que se convierte en auto-negación; si la *cultura del despojo* impide la existencia de un imaginario y un ideario que derrota a la *propiedad privada*; si la política se reduce a *figuritas* de temporada; si reina la indiferencia y la irresponsabilidad salvo cuando hay que acarrear votos; si se cree que todo lo resuelve una *buena foto* y un *buen slogan* repetidos hasta la nausea… si todas las formas del maltrato operan ideológicamente como fatalidad para el pueblo y golpe de suerte para el *político*… en suma si los trabajadores nos son protagonistas ni conductores de la acción política, incluso electoralmente. 

¿En qué piensa el que vota, cuando vota?
Como está de moda que los *candidatos* de las oligarquías no expliquen, no respondan no postulen… convicciones, programas o planes =moda en España, México, Argentina, Colombia…= porque es *tendencia* en el mercado de las *ingenierías de imagen*. Como se estila la pose más que la idea, quizá en la lógica moderna de la burocracia burguesa prospera el silogismo infeliz de que el elector que no piensa es el elector anhelado. O mejor aún, el elector que sólo piensa lo que le decimos que piense, es decir, nada, será el elector más codiciado por los estrategas de la vaciedad electoral.

Otro capítulo es el delito de lesa humanidad que consiste en prometer el cumplimiento de tareas que jamás se cumplen o que se cumplen al contrario de lo prometido. *Fortaleceremos la economía*, *defenderemos el empleo*, *garantizaremos la salud*, *mejoraremos la educación*, *garantizaremos la vivienda* y bla, bla, bla, bla. Jamás un tribunal especializado en delitos de falacias electorales, fraudes o traiciones a mansalva. Jamás una herramienta de justicia para los pueblos que miran desfilar ante sus ojos y sus oídos la retahíla nauseabunda de palabrería electorera diseñada corruptamente para el engaño serial. 

Delincuencia con premeditación, alevosía y ventaja. Sin atenuantes.
Y todo eso a precios demenciales con episodios de obscenidad inenarrable a la hora en que no hay cuenta que salga si hacemos balance de costos en materia de *campañas* electorales. Los grandes triunfadores como siempre son los monopolios y consorcios televisivos, radiofónicos y editoriales que con formato de *propaganda oficial* o camuflados con entrevistas, referencias o noticias facturan a destajo en el reino del mercenarismo mediático esta vez disfrazado de *democracia*. El costo por voto es una bofetada =otra más= a la clase trabajadora que paga por estos circos el precio de ser humillada, despreciada y robada por el modelo de fraudes políticos consuetudinarios. Y dicen algunos *politólogos* que eso es lo *moderno*.

Dicen muy despatarrados los señorones y los señoritos que medran con los procesos electorales =funcionarios, publicistas, asesores, encuestadores, periodistas….ufff= que al pueblo le gusta ver a los políticos en contacto con la realidad =pero sin decir qué harán con ella, qué mandato obedecen ni cuánto cobran por eso=. Dicen los *eruditos* del voto que a la gente le gusta que el político debata =pero al estilo televisivo, con tiempos recortados, sin mucho enredo y calculando los anuncios publicitarios sin los cuales el negocio de la imagen no se sostiene… dicen=. Dicen los *jefes de campaña*, de los candidatos oligarcas, que la gente vota por la *gestión* y no por el discurso. 

Y le llaman gestión a salir en la foto, en la tele, en los cines, en carteles públicos… con su sonrisa de vencedor y su slogan de coyuntura. Dicen que eso es hacer política. Confunden a los pueblos con los *públicos*.
En el fondo de la historia la cosa es muy distinta. Los pueblos votan acosados por una sistema de presión primero económico-política, con ello ideológica y mediática, en el que reina la incertidumbre y el chantaje omnipresentes, bajo miles de trastadas cotidianas y en el pantano de la desinformación y la manipulación de la realidad.

Si hubiese información libre y suficiente, si la comunicación sirviera para organizarnos críticamente y para confiar en la fuerza de los trabajadores y no para el individualismo y el linchamiento mediático de las luchas a nadie se le ocurriría votar por sus verdugos aunque se disfrazaran de santos o de *buenos muchachos*. Nadie pondría un voto a cambio de babas gerenciales salpicadas contra la historia de despojos y humillaciones incontables. 

Nadie votaría ni por el *glamour* de campaña ni por el fetiche. Nadie pondría su confianza en el torturador histórico que ha mentido, robado y vuelto a mentir y robarnos sempiternamente. Nadie permitiría semejante farsa y fraude, si pudiésemos votar libremente. Sin capitalismo. Votaríamos sólo por quienes conocemos, con nosotros, en lucha hombro a hombro, diariamente y por el bien de todos. ¿Exagero?

Fernando Buen Abad Domínguez

Cada quien saque sus propias conclusiones...

Ésta noche quiero contarles algo que poco tiene que ver con el Sol, el espacio, la Gnosis, la geopolítica y demás cuestiones, o...tal vez sí.
Les haré una invitación que a su vez es un pedido, un préstamo...que necesito, pero no para mí sino para alguien que mañana necesitará fuerza, energía, y por sobre todo tranquilidad.
Pero...se los cuento ésta noche, los espero.

Gilgamesh***

Fuentes;
-rebelion

viernes, 31 de julio de 2015

* Fernando Buen Abad Domínguez; cortinas de humo *

***Hermosa noche de Viernes para todos.

Se nos va otro mes..el séptimo de doce..
Si me preguntan qué hay de nuevo con el Sol y esas cuestiones, les digo que nada, que todo sigue ahí, frizado, y la eterna pulseada entre Febo y los neutrones, continúa.
Todo continúa...je..., la vida misma se escribe cada día con capítulos de una larga novela, tan vieja y casi eterna, que ninguno de los que la escriben sobrevive para ver el final. 

Culmina una semana más, por fin Viernes al menos para quienes obligadamente entregan sus ocho horas diarias en pos de eso llamado..trabajo.
Todo pasa tan rápido como el aleteo de un Colibrí cuando uno está feliz, y tan lento como un caracol cuando uno no está feliz.
Tiempos, reflexiones, pensamientos, y ahí andan los Filósofos tratando de entender qué es la vida...o cómo hay que vivirla.

Quizás ayudan, quizás no, pero siempre es un placer leerles y razonar con la ayuda de sus perspectivas, que de ninguna manera deben sustituir las nuestras pero sí...ponerle un valor agregado que nos pueda ampliar el ángulo de visión corto que todos tenemos ante semejante panorama..
Tal como les prometiera, vamos a compartir las reflexiones de Fernando Buen Abad Domínguez y me resulta increíble ésto de la Gnosis que se manifiesta en personas que no la conocen, ni que tienen ningún apego por las religiones ni por las creencias.

Imagino que Fernando no habría de sentirse cómodo al saber que alguien relaciona sus trabajos con una creencia, pero tal vez él desconozca que aquellos Gnósticos fueron los primeros en descubrir dónde estaba el gérmen del mal...., sin tecnología humana posible de la comunicación, tal como disponemos desde que la imprenta se inventó.

Y ésto me ayuda también a pensar porqué una enorme mayoría de pensadores o intelectuales que solemos conocer por sus trabajos sobre la política y la sociedad, son ateos o al menos se consideran agnósticos..., no creen en dios o al menos no, hasta que alguien demuestre lo contrario. Será por eso que tanto a los Gnósticos como a los ateos/agnósticos siempre se les persigue o se les estigmatiza..Parecería que fueran totalmente antagónicos, sin embargo...ya ven que no..jeje.

Con él me despido hasta mañana, si es que *mañana* existe, porque...no vaya a ser cosa que uno esté muerto y sueñe que está vivo....
Los medios...,la ingeniería social, los lavados de cerebro, las cortinas de humo..para todos los gustos.

-Así como la ideología de la clase dominante ha entrenado a muchas víctimas para que se inyecten por sí solas el veneno que las aniquila, y les ha enseñado a fabricarse sus propias jeringas… así ha creado medios y modos para esconder sus formas de ocultamiento y obligarnos a creer que *aquí no pasa nada*. Algunos están *convencidos*. Ahora usted está informado.
O dicho de otro modo, ya no hace falta que te escondan los asesinatos, las persecuciones, los *linchamientos mediáticos* contra los líderes sociales, las invasiones a los países, el saqueo de sus riquezas y las esclavitud de los trabajadores… sólo hace falta convencerte de que eso es *lo mejor que podría pasarnos* porque ciertos líderes, ciertos países y ciertos trabajadores son una amenaza y *alguien debe hacer algo*. No hacen falta adivinos para deducir quién es ese *alguien*.
Estamos en una guerra mediática, una guerra de propaganda en la que una de las ofensivas centrales es hacer invisibles los ataques y los efectos de los ataques. Dañar al enemigo y que lo agradezca. Hacer pasar por divertida la degeneración criminal de un sistema económico que necesita invisibilizar la depredación de la naturaleza y el crimen sistemático contra la clase trabajadora.



Hacer que parezca *completa* la información que ha sido descuartizada en las salas de redacción. Hacer que parezca *democrático* un sistema de fraudes seriales cometidos a mansalva en cada rincón del tejido social. Hacer, en fin, que parezca *normal* una vida plagada por la irracionalidad destructora más dañina en toda la historia de la humanidad.
La ideología de la clase dominante necesita que creamos fanáticamente en que la sordera y la ceguera que nos impone son en verdad *lucidez* y *plenitud* de saberes y que, por colmo, nos de miedo perder lo que el sistema nos da porque creemos que *estaremos perdidos* sin el capitalismo. Corona esta abrumadora escalada alienante la meta cúspide basada en que, encima de todo, agradezcamos lo que el sistema nos infiltra porque siempre ha tenido razón de que *las cosas sean como son*. Eso lo tapa todo incluso todas las *tapaderas* anteriores.
Cada cortina de humo que el capitalismo instala, tiene fecha de caducidad y límites de cobertura.



Por eso necesita generar cortinas de humo en secuencia capaces de cubrir lo que queda al descubierto mientras, también se cubren las cortinas de humo nuevas. Galimatías endemoniado que pergeña un sistema de mentiras desplegadas en todos los rincones de la lucha de clases y camufladas unas mejor que otras. El ejemplo supremo es la economía burguesa y todas sus expresiones objetivas. Casos hay a raudales.
No importa si hablamos de la industria fílmica, de la industria bélica o de la bolsa de valores… para los fines aviesos del capitalismo todo es útil a la hora de esconder las masas ingentes de riquezas que se embolsa saqueando a los trabajadores el producto de su trabajo. En las máquinas de guerra ideológica llamadas *medios de comunicación*, está una de las herramientas más potentes del capitalismo para sembrar cortinas de humo enfrente de otras cortinas de humo. Una telenovela tapa las operaciones pedagógicas que adiestran a las audiencias sobre los valores, gustos y tradiciones que deben obedecerse ciegamente en la trama ideológica de clase impuesta por el capitalismo.



Otra cortina de humo disfrazada de canciones, modas y cosméticos refuerza la cortina de humo que inocula la publicidad y todas se tapan con la cortina de humo llamada consumismo. La base de la fuerza del trabajo productora de todos los bienes queda tapada por la espesura del humo farandulero que, además de todo, es un gran negocio. Muchas personas pagan por dar mantenimiento y refrescar su cortina de humo de cada día. Las iglesias está llenas de ejemplos.
Incluso los fenómenos de la naturaleza son útiles en la fabrica de cortinas de humo. 

Huracanes, sismos, sequías o inundaciones… si hay que tapar los hurtos, la represión, las vejaciones y la corrupción que son consustanciales al capitalismo, serán bienvenidas y manipuladas al máximo para, de inmediato crear una cortina de humo que esconda tal manipulación. Un torneo de fútbol, por ejemplo. 
Dime qué cortina de humo prefieres y te dirá quién eres.
Como en todo, la manufactura de las cortinas de humo, sus materiales y sus acabados, evidencia tradiciones y habilidades =entre la cantidad y la calidad= para asegurar éxito al objetivo concreto de invisibilizar a la *bestia* histórica que es el capitalismo y todas sus monstruosidades a diestra y siniestra.



A ese objetivo concreto se dedican muchos especialistas y muchas empresas de todo tipo, en escalas de masas o en el fuero íntimo de las relaciones interpersonales cotidianas. Nunca la historia de los seres humanos tuvo ante sí el tamaño que hoy tiene la maquinaria descomunal de cortinas de humo. Nunca tantas, nunca tan espesas, nunca tan velozmente reproducidas y nunca tan solapadas las unas con las otras. Nunca, incluso tan demencial la competencia entre cortinas de humo para ganarse las preferencias de los patrones.

Se trata de una batalla enorme, es la *Batalla de las Ideas*. Sólo con un mapa meticuloso, capaz de hacer visibles los tejidos ideológicos, los más grandes o los más sutiles, que tapizaron al siglo XX y XXI en todas las latitudes del orbe; sólo con herramientas afiladas para desbrozar el enjambre y la selva de silogismos pergeñados por la ideología de la clase dominante… sólo con instrumentos poderosos como *Materialismo y Empiriocriticismo* de Lenin, seremos capaces de penetrar toda cortina de humo y dejar ver con claridad dónde están las trampas ideológicas.



Sólo así será posible derrotar el fardo de anti-valores, supercherías y burradas que contiene la, irracional y asesina, lógica burguesa de depredar al planeta, destruir las fuerzas productivas y aniquilar a los seres humanos. Hay que tomarse en serio la *Batalla de las Ideas* pero siempre unidas a la práctica transformadora. Sin nubarrones.

Fernando Buen Abad Domínguez

Gilgamesh***

sábado, 25 de julio de 2015

* Entendiendo a los medios...

***Hermosa noche de Sábado para todos.

Sin novedades solares ni del clima espacial.
Le damos un descanso hoy a la investigación de Manuel Pomés y les voy a compartir el primero, de varios artículos que a futuro llegarán de la mano del Dr. Fernando Buen Abad Domínguez. 
Estamos en un tiempo donde la masa está siendo arrastrada más que nunca por los medios de comunicación, y Abad es un experto en éstas cuestiones.



Nosotros podemos tener nociones y detectar cómo se está creando un mundo paralelo para mantenernos en él, perfectamente aborregados.
Es por eso que la palabra de Don Fernando hoy es tan importante para entender lo que no debemos aceptar.

Maltrato sensiblero para la diversión de *toda la familia*.

Todo el tiempo es maltrato, humillación y desprecio al televidente. Aunque digan o contrario. Todo el tiempo subestimación y agresión contra la inteligencia de las personas. A lo cuatro vientos, en las telenovelas, en los noticieros y en la publicidad… maltrato tras maltrato, el pueblo =para ellos= es sólo un pelele consumidor al que se puede inocular todo estímulo sensiblero para excitarle las hormonas consumidoras y, luego, usarlo como objeto de burlas. 

Victimar a la víctima, además, con chistes.
Es un callejón sin salida semántica, no hay a dónde escapar, están cerradas todas las puertas y el único paisaje posible es resignarse a un mamarracho de la *Caverna de Platón* con caldos ideológicos empobrecidos, minuto a minuto. La barbarie destazando la inteligencia de los pueblos. Con toda impunidad y a la vista de todos. Y el *rating* no baja. Dicen.
Hay estragos dolorosos y alarmantes en personas convertidas en adictas, victimadas por el secuestro monopólico de los *medios* y en manos de jaurías especializadas en máquinas de guerra ideológica.



Hay muchas bajas en las filas del *público* que evidencia sus heridas con gestos de afecto consumista impelido a la compra compulsiva y al consumo acrítico de toda basura que se le imponga. La voluntad queda aplastada. Aunque digan lo contrario.
Dicen, desde sus tronos de cinismo: *si no te gusta cambia de canal*, sólo que todos los canales son ellos mismos y su ideología chatarra ha hecho metástasis rentable en un circuito infernal de narcóticos sensibleros para la diversión de *toda la familia*. 

No hay escapatorias para un sector muy importante de la clase trabajadora que, además, padece el cerco jurídico-político de gobiernos serviles a la procuración de leyes beneficiarias de la espiral monopólica. Es una guerra de propaganda abierta en todos los frentes objetivos y subjetivos. A la vista de todos aunque invisibilzada.
Las víctimas adictas a semejante ofensiva ideológica burguesa suelen responder en las *encuestas” y dicen que les gusta tal o cual programación, que les gusta tal o cual publicidad, que sí les gustan los cantantes, las actrices, los bailarines y los locutores.



También dicen creer y respetar lo que dicen en los noticieros y admiten tomar como referencia de opinión los comentarios de los *expertos* asalariados por los monopolios televisivos. Sean del grado que sean.
Las víctimas, ese sector adicto =paradójicamente= a la ideología de la clase que lo somete y explota, acepta, según dicen las encuestas que compran los monopolios televisivos, que nada hay más divertido ni más creíble, cada día, que eso *preparado* por la mano de los comerciantes televisivos que son chistosos, bonitos, ocurrentes y audaces minuto a minuto. 

Dicen las víctimas, incluso con cierto orgullo, que son adictos permanentes de ciertos canales y personajes que por el simple hecho de aparecer en la tele ya portan aureolas de privilegios múltiples. Incluso en sus cuentas bancarias.
Las víctimas de las máquinas de guerra ideológica aprenden también a reproducir las ideas de la clase dominante, como si fuesen propias y con afecto profundo. Aprenden a defenderlas como bandera identitaria y suelen estar dispuestas a dar batallas diversas en defensa de sus torturadores mediáticos.



Las víctimas, incluso, suelen negar que lo sean e incluso suelen acusar a quienes crítican, con epítetos también fabricados por los monopolios mediáticos: *resentidos*, *zurdos*, *troskos*, *envidiosos*…
Las víctimas de las máquinas de guerra ideológica no saben, ni quieren saber, que una parte enorme de sus males proviene de los fetiches que adoran diariamente ante el televisor y ante sus hábitos de compra. 

No saben ni quieren saber que una red endemoniada de intereses mercantiles, tejida por industrias y marcas de todo tipo, se adueñaron de las herramientas de *comunicación* para descargar con ellas todo el arsenal de guerra psicológica necesaria capaz de activar el consumismo que deje vacías la bodegas y llenas las casas, y las cabezas, de los televidentes.

Las víctimas de semejante violencia semiótica padecen, mañana tarde y noche, *Bullying* psicológico e ideológico de todo género y padecen estragos emocionales y físicos que construyen ya formas patológicas nuevas cuya existencia y tratamiento nadie quiere reconocer porque, entre otras cosas, implicaría el reconocimiento científico del modelo de tortura creado para someter los pueblos en todas las modalidades posibles.



Hay ejemplos a raudales y las consecuencias de ese sistema de tortura y amedrentamiento mediático ya llenan tomos y más tomos en la memoria de las patologías fabricadas para rendirle culto al capitalismo. Los gobiernos burgueses son cómplices y beneficiarios.
Como el capitalismo no es sólo un sistema para la fabricación, y venta, de mercancías y porque es también, en simultáneo, un sistema de producción de sentido =valores, ideas, creencias, gustos…= es necesario saber que toda tarea y lucha para superarlo definitivamente debe destruir las bases económicas tanto como las superestructuras con toda su parafernalia de *falsa conciencia* monopolizada para expandirla como endemia perversa e impune. Hay que combatir, en simultáneo, la estructura y la superestructura de un sistema social y un modo de producción que en su etapa actual arrastra a la humanidad, y al planeta entero, hacia una etapa de saqueo y explotación cada día, si nada hacemos, más aberrante e irreversible.



Como no tenemos un padrón completo de las víctimas producidas por las máquinas de guerra ideológica burguesa, como no sabemos, en extensión y en profundidad, los alcances de los daños, como sólo podemos identificarlas por su grado de aceptación, aprecio y defensa de lo que los aliena. Hay que estar alertas, empezando, también, por nosotros mismos. 
¿Hay alguien que esté a salvo?





Gilgamesh***

Fuentes;
-fbuenabad