Primer viaje virtual a Norteamérica, no por prejuicios hacia los norteamericanos, quizás sí hacia sus políticas con respecto al resto del mundo, lo cual bien podría recaer también en sus ciudadanos, sin embargo no se puede meter a toda la gente en una misma bolsa y aún cuando tenemos discrepancias hay que aprender a tolerar y convivir.
Así que me di una vuelta por ésta ciudad donde percibí inmediatamente que el nivel económico de sus habitantes era de un muy bueno.
Poco que ver en materia de monumentos históricos del pasado remoto, más bien una ciudad que hace gala de los espacios verdes, muy buenos parques, todo muy ordenado, más que nada una ciudad que parece ser predominantemente *residencial* con pocos edificios de esos que están a la vanguardia y que nos obligan a doblar el cuello hacia atrás para poder verlos en su total majestuosa altura.
Residencias a las cuales no les falta un jardín, chalets y estilos típicamente norteamericanos, y lo que me sorprendió o no tanto, la falta de rejas, lo cual nos dice que la inseguridad en Fullerton no ha de ser un problema acuciante.
Ésta son las imágenes de mi paseo por Fullerton;
Fullerton, fundada en 1887, es una ciudad del condado de Orange en el estado estadounidense de California.
En el año 2000 tenía una población de 126.003 habitantes y una densidad poblacional de 2,191.4 personas por km².
Ocupa el puesto 40 entre las ciudades más habitadas de su estado.
La economía de la ciudad se ha basado históricamente en el cultivo de naranjas y otros cítricos y la extracción de petróleo.
Hay evidencias de que la parte noroeste de la ciudad estaba habitada en el periodo prehistórico.
La llegada de españoles sucede en 1769, cuando Gaspar de Portolá lideró una expedición al norte de lo que hoy en día es la ciudad, estableciendo la Misión de San Gabriel Arcángel, en las tierras que ocupaban los indios Gabrielinos.
La ciudad en sí fue fundada en 1887 por George and Edward Amerige, y toma su nombre de George H. Fullerton, quien consiguió estas tierras para el desarrollo del ferrocarril en la región.
Fullerton se encuentra aproximadamente a 40 km al sudeste de Los Angeles, y a unos 18 km al norte de Santa Ana, la sede administrativa del condado.
La ciudad se eleve a 46 metros sobre el nivel del mar, encontrándose a unos 17 kilómetros en línea recta del Océano Pacífico.
Tiene un clima mediterráneo, con una temperatura media de 16,8 °C.
De acuerdo con la Oficina del censo de los Estados Unidos, la ciudad tiene un área total de 57,6 km², de los cuales 57,5 km² son de tierra y el resto, un 0,14%, de agua.
El censo del año 2000 arrojaba que la ciudad tenía una población de 126.003 habitantes, contando con 43.609 viviendas, y 29.610 familias residentes.
La densidad de población era de 2,191.4 h./km².
El 61,89% de los habitantes eran de raza blanca, el 16,08% de raza asiática, el 2,27% eran afroamericanos, y el resto de otra etnias.
Sobre el total, el 30,17% de la población tenía origen hispano.
Los ingresos medios por hogar en la localidad eran de 75,700 dólares, y los ingresos medios por familia eran de 57,345.
Los hombres tenían unos ingresos medios de 40,674 frente a los 31,677 para las mujeres.
La renta per cápita para la localidad era de 23,370.
Alrededor del 11.4% de la población estaban por debajo del umbral de pobreza.
Fullerton debe su existencia al desarrollo del ferrocarril.
La ciudad se encuentra atravesada por la BNSF Railway, por la que circulan trenes de la compañía Amtrak.
La línea principal que cubre la ciudad es la denominada Southwest Chief, que enlaza Los Ángeles con Chicago.
Existe también una línea de cercanías que enlaza con las principales ciudades californianas.
La media de un viaje a Los Angeles es de 30 minutos.
Por carretera, está atravesada por tres grandes autovías, la 91 y la 57 estatales, y la Interestatal 5, que recorre toda la costa del Pacífico.
El Aeropuerto Municipal de Fullerton es el único de aviación general del condado de Orange.
Dos figuras de notoriedad pública nacieron en Fullerton, Leo Fender, luthier y creador de la fábrica de instrumentos eléctricos Fender cuya joya fué la guitarra eléctrica.
También Gwen Stefani, cantante de No Doubt.
Culminaba así mi fugaz visita a Fullerton donde me sentí muy a gusto.
Antes de comenzar mi partida miré por última vez la belleza del Hotel, el bello complejo Holliday Inn Express;
Pero no..jeje...no fué el Hotel donde me alojé, apenas si pasé porque la puerta estaba abierta..
Mi presupuesto no da para semejante lujo, a duras penas que mi bicicleta cósmica me permite recorrer el mundo con cero pesos.
Y luego sí, emprendí mi viaje para dejar Fullerton, pero aprovechando que a apenas 12 kilómetros existe un imponente Templo Budista no antiguo, me di el gusto de conocerlo.
El *Hsi Lai Temple*;
Fué así que luego de agitar un rato un par de Thing-shas en señal de agradecimiento por la amable acogida, y de tomarme un tecito Amacha en cuenco, subí a mi vehículo espacial, encendí mi reproductor de video a manera de broche final para agradecer a lxs lectorxs de Fullerton, disfrutando con la voz de Gwen, una de sus hijas predilectas, y una de esas canciones que siempre guardo en mi memoria auditivo-musical.
¡¡¡Muchas gracias lectorxs de Fullerton!!!
Ya habiendo salido de aquella ciudad, el tecito de Amacha que disfruté con un par de amixs me sabía a poco, digamos en criollo que me *chillaban las tripas*, razón por la cual, pulsé el botón de cristal del panel de navegación de mi nave con rumbo a Betanzos-Galicia-España.
Una buena tortilla gallega...me llamaba a gritos...
Y en lugar del cuenco para el tecito...más necesitaba de una *Cunca* y un Albariño...
Fuerte abrazo.
Gilgamesh***
Fuentes;
-wikipedia
-googlemaps
-cityoffullerton
