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viernes, 19 de marzo de 2021

* Desconcierto climático *

 ***Feliz alfinViernes para todxs.

¿Calentami
ento?..


 

 

 

 

 

 

*Un estudio asegura que la mitad de la Tierra se enfría más rápido que la otra*

-Los fenómenos naturales relativos a la Tierra son indicadores de cómo fue la vida en el planeta, cómo evolucionó el mismo, que significaron estos cambios en sus habitantes y también sirven para entender el futuro que le espera al mundo. En una reciente publicación, investigadores afirmaron que la mitad del planeta perdió calor más rápidamente que la otra en los últimos 400 millones de años. En todo ese tiempo, el interior del planeta que coincide con el Océano Pacífico fue la parte de la Tierra que se enfrió más rápido.

El calor en el interior de la Tierra proviene, por un lado, de la descomposición de elementos radiactivos y también de las colisiones de los asteroides que formaron al planeta. Este interior se enfría continuamente, aunque de forma muy lenta y progresiva. El motivo de esto es que la superficie terrestre libera más calor del que se produce en el interior.
Según un estudio publicado en la revista Geophysical Research Letters, en los últimos 400 millones de años la Tierra perdió calor de forma desigual. Antes, el enfriamiento podría haber sido uniforme ya que las placas tectónicas se movieron durante muchos millones de años. En el último tiempo, los continentes se reunieron en un mismo lado del globo terráqueo, lo que implica que en los sectores continentales la pérdida de calor aún más lenta que en las zonas en las que predomina el agua.

Para calcular la pérdida de calor en el planeta, investigadores del Centro para el Desarrollo de la Tierra de la Universidad de Oslo, utilizaron modelos de cómo se movieron los continentes. Para hacerlo primero dividieron a la Tierra en dos hemisferios: Pacífico y Africano. En este último se encuentran agrupados la mayoría de los continentes, incluso más hace millones de años que en la actualidad.

Durante alrededor de 160 millones de años =entre hace 335 y 175 millones de años=, los continentes estaban juntos en un supercontinente conocido como Pangea, que tenía a África como centro. Esto implicaba que el Hemisferio Pacífico no tuviera continentes, por lo que la pérdida de calor en ese sector era aún mayor, explicó Krister Karlsen, autor principal del estudio.

De esta forma, los científicos pudieron reconstruir las pérdidas de calor en ambos hemisferios y calcular la diferencia de temperatura entre ellos. Tras realizar los cálculos correspondientes, los investigadores llegaron a la conclusión de que en los últimos 400 millones de años, el Hemisferio Pacífico se enfrió 50º centígrados más que el Hemisferio Africano.



¿Contrasentidos?...


 








Nieve y mucho frío, hasta 10 grados menos respecto a los valores actuales, protagonizarán el inicio de la primavera, el próximo sábado, tras la llegada a la península de una masa de aire polar ártico que, junto a una borrasca mediterránea, propiciarán un paulatino regreso al invierno en gran parte del país.

Vuelve *el frío de riguroso invierno* para dar la bienvenida a la primavera astronómica, ha avanzado Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología-Aemet, quien detalla que nevará en cotas bajas, aunque no va a ser un fenómeno meteorológico *ni extremo ni generalizado*.
Desde mañana se espera ya un descenso generalizado de las temperaturas, por la llegada de aire muy frío continental, que en el caso de las diurnas, será notable en amplias zonas del interior peninsular y en el área mediterránea, e incluso *extraordinario* en puntos del este de Castilla-La Mancha e interior de Valencia.
Esta jornada la cota de nieve de situará en 500/800 metros en Pirineos, 800/1.200 metros en el noroeste, centro y este peninsular, así como en Baleares, y en 1.400/1.800 metros bajando a 1.000/1.400 metros en el sudeste del país.



 







Récord fallero para Alicante;










En USA las cosas no son muy distintas, el frío no se va;









Y en partes de México tmpoco;










Aquí en Argentina, Marzo siempre ha sido una estación donde el calor persiste intercalando con algo más de fresco, pero éste Marzo viene frío, con temperaturas mínimas de un dígito...algo realmente inesperado;










-El frío de los últimos días hizo que muchos cayeran en la cuenta de que el verano está llegando a su fin y que se viene el otoño.

No more comments....










 

Gilgamesh***

Fuentes;
-dailymail
-efe
-20minutos
-englishradionews
-masslive
-telemundo33
-elheraldodechihuahua
-pagina12

domingo, 28 de febrero de 2021

* Ver para creer; estamos viendo. *

***Feliz Domingo para todxs.

Tal como en los viejos tiempos una mancha solar, en éste caso norteña, llega al borde de salida y comienza a salir de su silencio.
No es nada como para envalentonarse pero algo al menos que empieza a *parecerse* a viejos patrones solares que ya conocemos;



 

 

 

 

 

 

 

 

 

Evento C 3.9, lo cual nos invita a elucubrar que probablemente ateniéndonos  a esos viejos patrones mientras la mancha se encuentre en ese tramo =borde o a la vuelta del borde= nos entregue algún evento un tanto más importante de clase M, igualmente es nada para lo que estamos acostumbrados a ver de aquél sol que  supo ponernos en vilo con sus potentes llamaradas.
Tal como lo indica el querido LEHAIM  el cometa INMUNIDAD también podría ser señal de algún tipo de cambio en la conducta solar;


 

 

 

 

 

 

 

 

 

Pese a éstas señales que intentamos decodificar sobre si el Sol despierta o sigue durmiendo el sitio ruso PRAVDA en su versión alemana, insiste en remarcar que hemos entrado en un Gran Mínimo,  nota que traduzco para ustedes; 


 

 

 

 

 

 

 

 

-*Clima: El Gran Mínimo Solar actual traerá algo de enfriamiento*

Ya en 2016, el autor de este artículo señaló que el mínimo solar podría provocar una fase de enfriamiento en la Tierra. Salió con el comienzo de esto alrededor de 2020.
Si nos fijamos en los sucesos fríos de este y del año pasado =frío extremo y nieve en España, Japón, Siberia y recientemente en EE. UU. Y Grecia ¡aunque este último aún no ha aparecido en las noticias!=, entonces no puedes evitar atribuir un cierto valor de pronóstico a esta afirmación.
Sobre todo porque en el anterior invierno austral de julio y agosto en Australia y Argentina se produjo un frío extremo con trampas de nieve en zonas donde no había nevado durante muchas décadas. Así que este artículo es más una actualización sobre este tema.

En este editorial, usaré el campo magnético recién descubierto para la actividad solar para mostrar que el sol ha entrado en el Gran Mínimo Solar moderno 2020-2053, lo que resultó en una reducción significativa en el campo magnético solar y la actividad como durante el Mínimo de Maunder que conducirá a un notable enfriamiento de la temperatura de la tierra.
El sol es la principal fuente de energía de todos los planetas del sistema solar. Esta energía se suministra a la tierra en forma de radiación solar en diferentes longitudes de onda, lo que se conoce como Irradiancia Solar Total-TSI. Las fluctuaciones en la irradiancia solar conducen al calentamiento de la atmósfera planetaria superior y a complejos procesos de transporte de energía solar a la superficie del planeta.

Los signos de la actividad solar se derivan de las fluctuaciones cíclicas de 11 años en el número de manchas solares en la superficie solar, utilizando el número mensual medio de manchas solares como un indicador de la actividad solar durante los últimos 150 años. Los ciclos solares fueron descritos por la acción del mecanismo de dínamo solar dentro del sol, que crea hebras magnéticas en la parte inferior de la zona de convección solar.  


Estas hebras magnéticas viajan a través del interior del sol y aparecen en la superficie del sol, o fotosfera, como manchas solares que indican los puntos base donde estas hebras magnéticas están incrustadas en la fotosfera.
El campo magnético de la mancha solar forma un campo toroidal, mientras que el campo magnético solar de fondo forma un campo poloidal. La dínamo solar convierte cíclicamente el campo poloidal en uno toroidal y alcanza un máximo en un ciclo solar máximo y luego el campo toroidal vuelve al poloidal a un mínimo solar. Es evidente que para la misma polaridad principal del campo magnético en las manchas solares del mismo hemisferio, la duración del ciclo solar debería aumentarse a 22 años.

A pesar de comprender la imagen general de un ciclo solar, ha sido bastante difícil reconciliar los números de manchas solares observadas con los modelados a menos que el ciclo esté muy avanzado. Esta dificultad es una clara indicación de algunos puntos faltantes en la definición de actividad solar por números de manchas solares, lo que llamó nuestra atención sobre el estudio del campo magnético de fondo solar poloidal.
Se ha encontrado que estas dos ondas se generan en diferentes capas del interior del sol y alcanzan frecuencias cercanas pero no iguales. La curva acumulativa de estas dos ondas magnéticas muestra la interferencia de estas ondas, que forman los máximos y mínimos de los ciclos solares; 


 

 

 

 

 

 

 

 

 

Parece que la amplitud del campo magnético solar agrupado, que se muestra en la curva acumulativa, disminuye en la dirección de los ciclos 24-25 y se vuelve casi cero en el ciclo 26.


 

 

 

 

 

 

 

 

 

Como se muestra en la figura el pronóstico de Zharkova et al se puede ver, dos grandes mínimos solares modernos del sol se acercan en los próximos 500 años: el moderno en el siglo XXI =2020-2053= y el segundo en el siglo XXIV =2370-2415=
Actualmente, el sol ha completado el ciclo solar 24, el ciclo más débil en más de 100 años, y en 2020 comenzará el ciclo 25. Durante los períodos de baja actividad solar, como el gran mínimo solar actual, el sol suele estar libre de manchas solares. Esto ahora se está observando al comienzo de este mínimo, porque en 2020 el sol había visto 115 días sin manchas =78%= en agosto, lo que significa que 2020 está en camino de romper el récord de 281 días sin manchas =77%= para todo el año observado en 2019. El inicio del ciclo 25, sin embargo, sigue siendo lento en la aparición de regiones activas y llamaradas, por lo que con cada día / semana / mes adicional que pasa, el cero en la actividad solar se alarga, marcando el inicio del gran mínimo solar. ¿Qué consecuencias tiene esta disminución de la actividad solar para la tierra?
=El artículo está fechado en agosto de 2020. El sol todavía sin manchas subraya estas declaraciones=

Caída de temperatura durante el mínimo de Maunder

De 1645 a 1710, las temperaturas bajaron en gran parte del hemisferio norte de la Tierra cuando el sol entró en un período de descanso ahora conocido como Mínimo de Maunder. Esto probablemente sucedió porque el TSI se redujo en un 0.22%, lo que resultó en una disminución de 1.0º en la temperatura promedio de la tierra, medida principalmente en el hemisferio norte en Europa -1.5 ° C.
Esta aparentemente pequeña disminución en la temperatura promedio en el hemisferio norte resultó en ríos congelados, inviernos largos y fríos y veranos frescos.
Shindell y col.  pudieron demostrar que la caída de temperatura está relacionada con la disminución de la cantidad de ozono, que se forma por la luz ultravioleta del sol en la estratosfera, es decir, la capa de la atmósfera entre 10 y 50 kilómetros de altura. . Debido a que el Sol emitió menos radiación en general, incluida la fuerte emisión ultravioleta, durante el Mínimo de Maunder, se formó menos ozono, lo que afectó a las ondas hemisféricas planetarias, los meandros gigantes en la corriente en chorro.

Shindell y col. sugieren en la p. 2150 que *un cambio en las ondas planetarias durante el Mínimo de Maunder convierte la Oscilación del Atlántico Norte-NAO =el equilibrio entre un sistema permanente de baja presión cerca de Groenlandia y un sistema permanente de alta presión en su sur= en una fase negativa que significó que permaneció inusualmente fría en Europa durante el MM *.

                   
El papel del campo magnético en el enfriamiento terrestre en Grand Solar Minima

Pero no solo se modificó la radiación solar durante el Mínimo de Maunder. Hay otra contribución para reducir la temperatura de la Tierra durante el Mínimo de Maunder: el campo magnético solar de fondo, cuyo papel se ha pasado por alto. Después del descubrimiento de una reducción significativa en el campo magnético en el próximo gran mínimo solar moderno y durante el mínimo de Maunder, se reconoció que el campo magnético solar controla la fuerza de los rayos cósmicos que llegan a las atmósferas planetarias del sistema solar, incluida la Tierra.
Una reducción significativa del campo magnético solar durante el gran mínimo solar indudablemente conducirá a un aumento en la intensidad de los rayos cósmicos galácticos y extragalácticos, lo que a su vez conduce a la formación de nubes altas en las atmósferas terrestres y contribuye al enfriamiento de la atmósfera, como Svensmark et al. han demostrado.

En el último mínimo solar entre los ciclos 23 y 24 la intensidad de los rayos cósmicos aumentó en un 19%. En la actualidad el campo magnético solar predicho en el sol disminuye radicalmente, lo que a su vez conduce a una fuerte disminución en el campo magnético interplanetario del sol a solo 4 nanoTesla-nT desde valores típicos de 6 a 8 nT. Esta disminución del campo magnético interplanetario conduce naturalmente a un aumento significativo en la intensidad de los rayos cósmicos que ingresan a las atmósferas de los planetas, según lo informado por misiones espaciales recientes.
Por lo tanto, este proceso de reducción del campo magnético solar procede, como informaron Zharkova et al. , y su contribución será absorbida por las atmósferas planetarias, incluida la Tierra. Esto puede reducir la temperatura terrestre durante el gran mínimo solar moderno, que comenzó en 2020.

La disminución esperada de la temperatura terrestre durante el Gran Mínimo Solar actual

Esta curva acumulativa también indicó el próximo gran mínimo solar moderno *1* en los ciclos 25-27 =2020-2053= y el gran mínimo solar moderno *2* =2370-2415=. Esto traerá en los tiempos modernos las condiciones únicas de baja actividad del sol que ocurrieron durante el Mínimo de Maunder. Se espera que la actividad solar se reduzca significativamente durante el gran mínimo solar moderno, como fue el caso durante el mínimo de Maunder.
Similar al mínimo de Maunder, la disminución en el campo magnético solar, como se describe arriba, resultará en una disminución en la irradiancia solar de aproximadamente 0.22% durante tres ciclos solares 25-27 para el primer mínimo grande moderno 2020 -2053 y provocar cuatro ciclos solares desde el segundo gran mínimo moderno 2370-2415.

Esto, a su vez, puede conducir a una disminución de la temperatura terrestre de hasta 1 ° C en comparación con la temperatura actual durante los próximos tres ciclos 25-27 del mínimo grande *1*. Las fases de enfriamiento más fuertes ocurrirán durante los mínimos locales entre los Ciclos 25-26 y los Ciclos 26-27, cuando se alcanza el nivel más bajo de actividad solar.
Como resultado, la temperatura promedio en el hemisferio norte puede bajar hasta 1 ° C en comparación con la temperatura actual, que había aumentado 1.4 ° C desde el Mínimo de Maunder. Esto significará que la temperatura promedio es solo 0.4 ° C por encima de la temperatura medida en 1710. Luego, después de que termine el gran mínimo solar *1* de hoy, la actividad solar se normalizará nuevamente en el ciclo 28 en el ciclo solar grande bastante corto pero poderoso entre 2053 y 2370, antes de que llegue el próximo gran ciclo solar en 2370 .

Conclusión

En este editorial, he demostrado que los avances recientes en la comprensión del papel del campo magnético solar de fondo en la determinación de la actividad solar y en la cuantificación de las magnitudes observadas del campo magnético en diferentes momentos permiten una predicción confiable a largo plazo de la actividad solar en una escala de tiempo del milenio. . Este enfoque mostró que no solo hay ciclos solares de 11 años, sino también grandes ciclos solares con una duración de 350 a 400 años.
Pudimos demostrar que estos grandes ciclos se forman por la interferencia de dos ondas magnéticas con frecuencias muy próximas pero no iguales, que son generadas por el efecto de doble dínamo solar a distintas profundidades del interior del sol. Estos ciclos mayores siempre están separados por los mínimos solares mayores del tipo Mínimo de Maunder que ocurrieron regularmente en el pasado y formaron los conocidos mínimos de Maunder, Wolf, Oort, Homeric y otros mínimos mayores.

Durante estos grandes mínimos solares, se produce una reducción significativa del campo magnético solar y de la irradiancia solar, lo que obliga a la reducción de las temperaturas terrestres derivadas para estos períodos del análisis de la biomasa terrestre durante los últimos 12.000 años o más.
La disminución de la temperatura terrestre durante los próximos 30 años puede tener efectos importantes sobre el crecimiento de la vegetación, la agricultura, el suministro de alimentos y las necesidades de calefacción en los hemisferios norte y sur de diferentes partes del planeta.
Este enfriamiento global durante el próximo gran mínimo solar *1* 2020-2053 puede compensar cualquier signo de calentamiento global durante tres décadas y requeriría esfuerzos interestatales para abordar los problemas de calor y alimentos para toda la población mundial.

Más que claro el informe, lástima que muchos...ya no estaremos aquí para experimentarlo, pero sí para dejar testimonio de lo que nos tocó ver y vivir.
Fuerte abrazo.

Gilgamesh***

Fuente;
-pravda-tv 

jueves, 18 de febrero de 2021

* Friaje global *

 ***Gran alfinViernes para todxs.

=Jejeje= Fe de erratas..

recién unas 10 hs. después de publicar tomo nota que no es Viernes..¡¡es Jueves!!, sepan disculpar...los dos días de feriado por Carnaval me llevaron a la confusión y de paso...ya ven lo que hace el paso del tiempo en las neuronas de un hombre *mayor*...jeje.

Sigue  temblando Gaia   y propone un Febrero récord en sismos.
La actividad en Loyalty Islands no hacesado y se ha trasladado también a Vanuatu;


 

 

 

 

 

 

 

Y la climatología a nivel mundial también sigue dando que hablar.
Algunos medios parecen asustados a punto tal que ya están generalizando la situación;


 









Y la gran pregunta que aquí analizamos desde hace años comienza a volverse por fin..mediática;








Graves contratiempos genera ésta asolada provocada por el frío y las nevadas, algo que también mencioné aquí, por ejemplo la energía, sea eléctrica  o gasífera tal lo ocurrido en USA y en México;










Y lo peor en tiempos de Pandemia; la vacunación;











Desde todo rincón de Estados Unidos, Canadá y el Reino Unido se habla de récords, apagones,  heridos, muertos, paralización, estragos;












Europa, obviamente no está al márgen;









Y en España, al límite con África donde olas intermitentes de cierto calor pueden aparecer, nada ha terminado;









Pero ni en África o Asia están tampoco exentos;











Y si alguien creía que ésto era sólo una *anomalía temporaria*...parece ser que no;









Y sí señores...alguna vez había que hablar de ello...
Eso sí..para minimizar lo que está ocurriendo...se reflotan récords del pasado como para que no se note tanto..jeje..;









Nada es casual...;













Gilgamesh***

Fuentes;
-lugaresdenieve
-heraldodemexico
-pagina12
-elpais
-elsoldemexico
-excelsior
-abc12
-xinhuanet
-lugaresdenieve2
-wpta21
-detroitnews
-wdtn
-nbcnews
-cbc
-denverpost
-euronews
-eldia
-cope
-prensa-latina
-itongadol
-prensa-latina2
-elvocero
-meteored
-tiempo
-tiempo2
-lavanguardia

lunes, 15 de febrero de 2021

* Sismos, clima, Edad de Hielo al Norte y de Sequía al Sur *


***Excelente incio de semana y de carnaval sin carnaval  para todxs.

Les debía información sobre  el balance sísmico del pasado Enero con respecto a los Eneros de los últimos 5 años.

Enero 2016;  133
Enero 2017;  153
Enero 2018;  138
Enero 2019;  148
Enero 2020;  165
Enero 2021;  157

Sin dudas alto, el segundo del último lustro sólo superado por poco el año pasado.
Y si comparamos el mismo período transcurrido desde que comenzó éste 2021 con el del año pasado =01-01-2020/15-02-2020= pues, resulta ser que para el primer mes y

medio del año pasado ocurrieron 230 sismos por encima de los 51,  hoy en éste año nuevo ya tenemos...316..
¿Cuántos sismos de 6 y 7º para cada período?
Un mes y medio año 2020; de +6º 20 sismos.
Un mes y medio año 2021; de +6º 21 sismos.
Un mes y medio año 2020; de +7º    1 sismo.
Un mes y medio año 2021; de +7º    3 sismos.

La mano parece venir brava.
Pero hablemos del clima, pero antes de un Sol en estado de anemia absoluta;


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Y ahora sí, un clima sujeto a nuestra estrella.
En Argentina *dicen* un Febrero...atípico con jornadas frescas;


 

 

 

 

 

 

 No muy lejos de aquí;




 

 

 

 

 

 

 

 

 

Mucho más lejos de aquí;




 

 

 

 Algo más lejos todavía;










 

 

 

 

 

 

Les había prometido para una de éstas noches el relato de época sobre los sucedido en Sudamérica durante el período de la edad de hielo en el Hemisferio Norte, pero lo haré ahora.


El congelamiento del Hemisferio Norte tuvo otro tipo de implicancias por aquí, no idénticas, muy distintas, pero tuvieron algo en común y fué el desastre.
Los relatos incontrastables e indudables de toda duda, además de poseer una riqueza linguística que me encanta, reflejan  a la perfección y ayudan a *ver* con solo leer. 

De paso creo que éstos relatos son el mejor testimonio para entender lo que nuestra corrupta ciencia meteorológica no nos dice mientras inventa un relato que nada tiene que ver con los ciclos naturales del planeta. Y los relatos históricos antiguos creo que...deberían ponernos a hilar mucho más fino cuando en el Hemisferio Sur imaginamos un mismo escenario que en el Norte, siendo que al parecer...siempre han sido *opuestos*.

Si una nueva edad de hielo se avecina, aquí en el Sur deberíamos esperar otra cosa,  cosa más parecida a lo que les voy a compartir ahora y espero nos ayude para seguir estudiando en éste apasionante tema.


 

 

 

 

 

 

 


*Tanto era el polvo que la oscuridad obligaba a encender velas para iluminarse a mediodía y la gente podía ahogarse no con agua sino con polvo*.
Por Alberto Moroy

En 1576, Don Hernando de Montalvo =Tesorero del Río de la Plata= escribe al Rey sobre la expedición de Juan Ortiz de Zárate. En ella manifiesta: *… el año fue fértil de aguas cuando llegaron en 1574 y después acá en dos años y medio que estamos, no hemos visto llover sino muy poco, en esta tierra tan estéril que se siembra y no grana*.

En 1748 Joseph Cardiel, misionero jesuita realizó un viaje al sur de la Provincia de Buenos Aires durante el otoño de 1748. Del análisis de su diario de viaje se concluye que en la región recorrida predominaba una fuerte aridez, destacándose una amplia zona arenosa descripta por Cardiel como un *desierto de arena*. Se trata de una extensa área ubicada entre el río Quesquén Grande, partido de Necochea, y los arroyos Zavala y Cristiano Muerto, partido de San Cayetano, extendiéndose desde la costa hasta unos 50 km tierra adentro.

Cuando en el siglo XVIII se  instaló  la Guardia del Zanjón =75 km. del obelisco porteño=, en noviembre de 1758 ,su comandante, el teniente José I. Zabala escribió: *Estamos viviendo a la inclemencia del sol que nos abrasa y hay una gran polvareda*. En 1768 reitera la queja el capitán Juan de Mier quien, en marzo de ese año, señala *las caballadas están muy aniquiladas por la falta de pastos y de agua y en pocos días quedarían inservibles*. Febrero de 1781, el entonces comandante de la Guardia del Zanjón, Nicolás de la Sardeña escribe *La sequía al menos es una realidad: en su huida a lo largo de la costa bonaerense, un cautivo en Chascomús-Argen tina, a 116 Km de Colonia del Sacramento-Uruguay, estuvo cinco días sin poder dar de beber a su caballo. El comía huevos de avestruz y la cuajada del vientre de venaditos recién nacidos*

Impensable con la visión actual, las zona es una de las mas húmedas de la Provincia de Buenos Aires bordeada por arroyos, lagunas pantanos y zonas inundadas, ubicada a 120 km al SO de la desembocadura del rio Santa Lucia-Uruguay.

En 1828 el topógrafo francés Narciso Parchappe integra la expedición fundadora del fuerte 25 de Mayo a orillas  de la laguna Cruz de Guerra, actual partido de 25 de Mayo. En la descripción de su viaje, iniciado en enero de 1828 desde San José de Flores, barrio de  Buenos Aires,  son frecuentes las referencias a  médanos vivos por ejemplo, en los partidos de Bolívar, Alberti, 9 de Julio y a las condiciones de sequía, incluyendo la falta de aguas adecuadas para beber por el ganado. Dice Parchappe que *…las aguas saladas son extremadamente comunes en las provincias comprendidas entre el Paraná y los Andes y sobre todo, en la de Buenos Aires*

Toda vez que escasean las lluvias, la recarga de napas superficiales es baja dejando al descubierto el agua salobre que por ser más densa está situada por debajo de la dulce, en muchos lados de la Provincia de Buenos Aires los molinos y aguadas elevan la salobridad a tal punto que se provoca la mortandad del ganado. Hay que recordar que gran parte de la provincia de Buenos Aires era el fondo del mar.
Casi todos los viajeros que visitaron la Pampa con anterioridad a su finalización 1850, coinciden que más allá del Rio Salado =160 km al sur de la ciudad de Buenos Aires= era un desierto. La travesía hacia Tandil y Bahia Blanca era casi suicida sin baqueano, el principal problema no era el indio, sino la falta de agua.

Parece una paradoja pero la pequeña Edad de Hielo en Europa, pudo haber sido parte de un cambio climático mundial que provocó importantes sequías en el Rio de la Plata. Una de ellas, en especial la de 1832, dejó en las crónicas de época relatos dantescos como el que podrán leer al final de esta nota.

No obstante es más probable que un fuerte fenómeno meteorológico conocido como la Niña, el mismo que está impactando ahora la región y traerá sequía y bajo rendimiento de los cultivos, además de incendios a lo largo de Sudamérica haya sido en parte responsable. Para ese entonces, según crónicas citadas por el Diario Austral de Temuco-Chile en 1832  tambien entran en erupción simultánea los volcanes Llaima, Villarrica y Osorno. El ciclo continúa tres años después en 1835 cuando el Villarrica entra en violenta actividad, acompañado por ocho volcanes más.

Cuando Charles Darwin arribó a la Argentina traía por expertizaje solo la curiosidad, incluso tuvo que pagarse el viaje como acompañante de alcurnia del Capitan Fitz Roy, no como Naturista. Fitz Roy ya tenía uno,Robert Mc Cormick,  naturalista y cirujano escocés que abandonó la expedición en Rio de Janeiro en abril de 1832. Sin dudas en este viaje Darwin hizo el *Master*, justificó los hallazgos de tal cantidad de osamentas que recogió sin clasificar y lo asoció con la pequeña edad de hielo europea. 

 

En lo personal, en mi categoría de novato, lo asocio más con el evento de la niña en forma recurrente, lo que potenció los resultados, quizás con aportes de los volcanes chilenos por meses, y con los coletazos de un fenómeno a escala global como el final de la pequeña Edad de Hielo. Con la fama bien ganada años después su apellido sirvió como *chapa* de la verdad absoluta, en todas las referencias, incluso hoy hay titulares como *Darwin tenía razón* en relación a las osamentas de caballos encontradas en el rio Arrecifes, a 171 km. de la ciudad de Buenos Aires  con una antigüedad cercana a los 200 años y que pertenecen a este evento local que describió Darwin.

La gran sequia

*Desde fines de 1829 y hasta principios de 1832, una intensa sequía azotó la provincia de Buenos Aires, y fue seguida por violentos ataques indígenas. Alrededor de 1.500.000 de cabezas de ganado perecieron. Llovió tan pocas veces que los ríos y arroyos se transformaron en rutas. Las plantas de todas las especies, hasta los cardos, desaparecieron. Toda la región se convirtió en un inmenso desierto. Los caballos y bueyes errando por los campos en busca de un poco de agua  se dejaban caer exhaustos. La tierra desunida y hecha polvo por la sequedad y el pisoteo se dejaba levantar por los pamperos que cubría la hacienda muerta y los pocos que sobrevivían en busque de aguadas más al sur de Buenos Aires, en busqueda de lagunas y ríos. Por sus barrancas se precipitaban los vivos sobre los muertos y aplastados que habían llegado primero. Los mojones delimitadores de cada propiedad desaparecieron bajo el peso del polvo y el gobierno tuvo que enviar una comisión para evitar las disputas entre los propietarios de tierra. Como resultado de las sequías el precio promedio por legua cuadrada de campo cayó 50% en 1833*.

Para ese entonces,1830,  Uruguay tenía una baja densidad demográfica, se calcula que la población era cercana a 74.000 habitantes, 14.000 en Montevideo y el resto en el interior, con un promedio de un habitante cada 2.5 Km. Casi todas las construcciones eran con techo plano, lo que denota poca preocupación por las lluvias, habida cuenta que las técnicas de impermeabilizar las terrazas, para la época debieron ser complicadas.

La cubierta de las viviendas se hallaba construida sobre vigas de palma o madera dura, generalmente traídas de Corrientes o Paraguay, sobre las que se colocaban alfajías de madera cedro o algarrobo y arriba ladrillos en dos o tres capas cruzadas, llamándose estas de dos o tres órdenes, unidas por una mezcla de betún.  
¿Como evacuaban las aguas de lluvia? Generalmente se las orientaba a través de conductos realizados en madera, plomo o lata a los que denominaban cañones.

El relato de Darwin sobre la *Gran seca*

En el año 1833, al navegar las aguas del Paraná, frente a San Pedro, Charles Darwin plasmó testimonios desoladores de aquel período de sequía en su Diario del viaje de un naturalista alrededor del mundo. En sus páginas, escribió: *El período comprendido entre los años 1827 y 1832 se llama el gran seco o la gran sequía. Durante ese tiempo, fue tan escasa la lluvia caída, que no creció ninguna planta, ni siquiera cardos; los arroyos se secaron, y todo el país tomó el aspecto de un polvoriento camino carretero. Así ocurrió especialmente en la parte septentrional de la provincia de Buenos Aires y meridional de Santa Fe. Pereció un gran número de aves, animales silvestres, ganado vacuno y caballar por falta de alimento y agua.

Un hombre me dijo que los ciervos solían meterse en su corral a buscar la poza que se vio obligado a cavar para proveer de agua a su familia. Las perdices apenas tenían fuerza para huir volando cuando se las perseguía. El cálculo más bajo supone que se perdieron sólo en la provincia de Buenos Aires un millón de cabezas. Un testigo de vista me refirió que el ganado vacuno, en rebaños de millares, se precipitó en el Paraná y, exhausto por el hambre como estaba, no pudo encaramarse a los bancos de cieno y, así, pereció ahogado. El brazo del río que corre junto a San Pedro estaba tan lleno de cadáveres en putrefacción que, según me dijo el patrón de un barco, el hedor le hacía de todo punto infranqueable. Indudablemente, varios cientos de miles de animales perecieron así en el río*.

Crónicas de Arturo Reynal O´Connor- 1864/1920

*Abro un paréntesis a mis escritos sobre las colonias, para demostrar que la sequía incipiente, que tanto nos alarma, es una caricia celestial ante la espantosa y cruel que arrasó hace noventa años los prados verdes y fecundos de la sin par y nunca bien ponderada provincia de Buenos Aires. Contóme el otro siglo un antiguo de luengas barbas, que dos años antes envolvían a esta capital, que era entonces una aldea desempedrada, nubes de polvo que obligaban a sus vecinos a encender las velas de baño a mediodía: eran las polvaredas, que habían convertido a la campaña, que principiaba en extramuros, en una tempestad de tierra!

La carne y la leche, flacas, principiaron a escasear; las legumbres y las frutas tornáronse tan difíciles y caras como hoy, y hasta el pan y el pambazo =baja calidad de harina= de San Roque se endurecieron. **¡La seca, la seca!** exclamaban todos. Hacía más de un año que no llovía. Los lecheros no cantaban ya por las calles y los panaderos se escurrían silenciosos en sus mulitas con árganas. Nuestros maravillosos campos de esmeralda se pusieron cárdenos, después, gualdos, amarillos. Los ríos, los arroyos y las lagunas se secaron. No había, en toda la inmensidad de la pampa, una gota de agua. 

Los pastos eran una pajilla de raíz seca, que el viento arrancaba al primer soplo, la tierra, un arenal, y sudario de un futuro camposanto, polvo y polvo. El ganado vacuno sucumbía, porque, sin dentadura en la mandíbula inferior, no alcanzaba a envolver con la lengua hierba tan raquítica, y los estancieros, para salvar siquiera su cuero, principiaron a desollar, en medio de la escasez de brazos, que huían, sedientes, a los poblados, porque hasta los pozos estaban exhaustos, secos, pétreos, como maldecidos. No se oía en la soledad, que iba, paulatinamente, convirtiéndose en el pavoroso vacío, más que el ruido de las chairas y los chirridos de los chimangos y caranchos hambrientos.

Ya en todas las iglesias se había llamado *ad petendam pluviam* =*Señor, en ti vivimos, nos movemos y existimos: concédenos la lluvia necesaria, a fin de que ayudados con los bienes de la tierra, anhelemos con más confianza los bienes del cielo. Por Jesucristo, Nuestro Señor. Amén*= y orado ansiosamente. Los nuevos soles y lunas, en vez de convertir las rogativas, súplicas y ofrendas siquiera en esperanzas, traían días más secos todavía. Cuando se creía, por las nubes que obscurecían, que llovería = porque si nuestro clima es variable, el cielo es fiel= venía a medianoche un vendaval atmosférico, y la mañana amanecía cristalina y fresca.

Aún en los inviernos se sucedían así las semanas, los meses… ¡Ni qué se hubieran también secado las cataratas celestiales! ¿Era un castigo divino? ¡Ironía del destino!, porque, acostumbrados los porteños al aire húmedo, por la evaporización del Río de la Plata, aparecieron diversas epidemias, y cada mañana más iluminada, cada día más dorado, cada tarde más fresca, cada noche celeste o azul más plateada por la luna o los astros, y disfrutada en rueda de sillas al aire libre en las veredas, era un grado más en el horno que iba secando y quemando toda simiente de vida. ¡Y a no ser por la falta de provisiones y agua que aumentaba el hambre y la sed, habríase deseado que tales primaveras fueran eternas, porque eran plácidas y deslumbrantes!

La hacienda vacuna, que no había aún perecido, fue cuereada; las yeguadas huían en tropillas, desesperadas, por los campos sin alambrados, creyendo hallar, cuanto más afuera, pastos, agua… ¡Ilusiones del hambre! Y como más allá menos feraces, más secos y crueles todavía. Hasta los indios, atraídos por este espejismo fantástico, habían abandonado sus aduares, y arriaban, al resplandor de las blancas lunas, sus últimas vacas arrebatadas al cristiano, que, macilentas, sucumbían también en la procesión, siempre adelante.


Huyeron las yeguas alzadas, los venados, los avestruces, los guanacos…, los leopardos, los leones y todas las fieras, tan mansos por el común peligro, cual corderos o niños, y de hambre habrían proferido morir a manos del hombre. No quedó, en toda la pampa, ni una fiera, pereciendo, en sus cuevas, las vizcachas, los matacos, los peludos, las exquisitas mulitas, los zorrinos, el astuto zorro y los reptiles.

Y en el espacio, por haber huido también al austro todas las aves acuáticas, soñando ríos y mares dulces, no había un pájaro, ni un ave carnicera. No imperaba sino el sol a plomo, rajante, y de noche, los astros callados, diamantinos, centelleantes, con sus pestañas de luz y sus lunas de mármol. Era tal el silencio, que parecía que hubiese muerto todo, todos: un mutismo verdaderamente fúnebre, sepulcral, la agonía del desierto en un lecho de arena, con su corona de tréboles y gramíneas deshojada y torrada por los soles. Sólo se oían de vez en cuando, a fuer de estertores, los bufidos de los últimos toros y vacas y los relinchos de las inquietas yeguadas hambrientas, que si hubieran podido hablar, habrían gritado: **¡Agua, agua!**, ensordeciendo la inmensidad y arrancándole llantos.

Tal trascurrió el año 30, el 31 y el 32. Fué la sequía más pertinaz y espantosa que recuerdan los anales rurales bonaerenses. No se veía en las estancias, chacras y quintas ningún habitante. Todos, buscando al hombre, que perecía también de hambre y de sed, se habían guarecido en las poblaciones adyacentes, para ampararse y protegerse. Las moradas campesinas yacían vacías, solitarias; las aves y animales domésticos, abandonados por sus amos, perecían entre el polvo, y en las noches mudas, negras o blancas, rajaba el corazón el ronco ladrido de algún perro sobreviviente. **Nunca, =dijeron los indios= se había visto a nuestra rica campaña tan arrasada**. 


Las intermitentes polvaredas alteraban diariamente la monotonía de la inmensidad, convirtiéndose el polvo en un oleaje que rodaba enloquecido, girando sin rumbo, sublevándose como las tempestades marinas. Era un mar de polvo, y sus olas, iluminadas en sus flancos y crestas, tenían, los prismas, las reverberaciones y hasta las chispas de los incendios.

Sus resoplidos, sus quejas profundas y voces misteriosas retumbaban en el alma, y no se veía en esa tormenta que ahogaba como el agua, nada, nada.  A la tarde se serenaba; refrescaba, y las noches eran tan, silenciosas y solemnes, que, por el enrarecimiento del aire, las estrellas eran más grandes; parecía que bajaban: luceros; se oían sus parpadeos; cualquier graznido de buitre sobrecogía, atemorizaba, y el casco sólo de un caballo habría estallado en tal vacío con el estruendo de un a metralla en un suelo de bronce. ¡Qué alma viviente se atrevería a cruzar ese mar de polvo y fuego!… **¡Yo!** exclamó un paisano, llamado Contreras. 

 

**Salí de la Magdalena a buscar a mi hijo, que estaba cerca de Chacabuco 207 km al oeste de la ciudad de Buenos Aires. Tardé más de un mes, porque me detenía en las poblaciones a aprovisionar mi tropilla. Lo hallé al fin muerto contra el pozo, con la soga en la mano**. 

Fué, sin duda, desesperado de sed, a sacar agua, y lo ahogarían los huracanes de polvo.

Los indios se habían internado. El campo entero, tan vasto y bravío como el océano, se había convertido en un Sahara sin oasis, y estaba cubierto de cadáveres de ganados de todos géneros, de animales de trabajo, aves, hasta de fieras, que, descarnados por el aire seco, eran esqueletos marmóreos. Las ráfagas traían olores nauseabundos de las descomposiciones cadavéricas. ¡Qué tristeza terrorífica! La desaparición del pasto y el polvo había borrado las clásicas huellas; todo el campo eran caminos, y se reconocían, al llegar a los ríos o arroyos, por la mayor abundancia de esqueletos de los pobres animales  sedientos, que  expiraron allí desfallecidos.

Fueron en busca de agua y hallaron su tumba.
¡Qué espectáculo cuando las vacas hallan todavía una vertiente! Se atropellan por sorberla. Las que no han podido humedecerse siquiera la lengua contra el fondo de la rocalla, la lamen bramando, se cornean, — los toros…. no mugen, ni braman. Todo había muerto, todo, y lo que existía había desaparecido, huido. Los pozos de balde estaban llenos, rebosantes, de polvo, y las casas de las estancias, si se encontraban, yacían, juntamente con los corrales y palenques, tapados por la tierra reseca, desmenuzada, sirviendo de baluarte a sus torbellinos y trombas. Allí habían ido a parar, detenidas, en su furia, para morir, porque todo, todo, no tenia sino este fin: morir. 

Desde la orilla del Plata y el Atlántico, hasta más allá del Uruguay y el Paraná, y desde extramuros a los boquetes andinos, no se divisaba, en la maravillosa campiña, más que cadáveres de millones de animales de todas razas,... y aún de hombres...*

Impresionante el relato..

Sus mejores violines datan de entre 1680 y 1715, lo que coincide con un lapso singularmente frío de unos 70 años de la Pequeña Edad de Hielo. Stradivarius usó la madera de árboles como abetos y arces que crecieron durante ese período, resulta que los famosos violines y chelos fueron fabricados con madera particularmente compacta porque esos árboles crecieron muy lento y sin lapsos cálidos que pudieran disminuir la densidad.
Según el capitán Skogman, oficial sueco que participó de un viaje de la fragata Eugenia por América del Sur, en esos años, *en busca de aguas, enormes avalanchas de caballos y vacunos se dirigían a las márgenes del Paraná, donde se hundían en el fondo y sin fuerzas para salir por sus propios medios eran pisoteados por los grupos subsiguientes. Toda la provincia se convirtió en un desierto polvoriento…*. 1851 – 1853.

El naturalista Bravard publicó unos apuntes en el Registro Estadístico en los que refiere que llovió tan pocas veces y en tan poca cantidad que los lechos de los arroyos eran semejantes a grandes rutas; las plantas de toda especie, hasta los cardos, murieron de pie y fueron disecadas hasta sus raíces. Agrega que hasta lo pozos de agua para la gente estaban secos y la existencia del hombre estuvo más de una vez comprometida, hasta en las habitaciones, hasta en los pueblos, por una singular modificación del fenómeno del transporte del polvo, que, suspendido en el espacio, encontraba en él, a veces, nubes cargadas con vapor de agua con que se mezclaba. No era entonces bajo la forma pulvurulenta que volvía a descender, sino en la de una verdadera lluvia de lodo, cuya acumulación sobre los techos amenazaba destruirlos.

El lapso referido puede ser considerado como seco en general, destacándose por lo menos dos periodos de sequías muy graves y prolongadas entre 1690 y 1708 y entre 1753 y 1758 y muchas sequías breves. En medio de esta crisis de sequedad hay años de lluvias consideradas suficientes y solamente en 1636, 1671, 1685, 1774 y 1778, así como entre 1804 y 1810 hubo excesos de precipitaciones con encharcamiento, inundaciones y riadas de diversa gravedad.


Ojo entonces, las consecuencias de un ciclo *excepcional* global bien se han distinguido entre el Hemisferio Norte y el Sur.
Sea lo que fuere, de repetirse, instila la presunción de que nos espera un tiempo muy difícil.

Gilgamesh*** 

Fuentes;
-infobae
-tiempo
-overkarma
-excelsior
-voxpopulinoticias
-wwlp
-dailysabah
-kvoe
-lematin
-xinhuanet
-yna
-minutoar
-telam
-elpais