jueves, 18 de febrero de 2021

* Friaje global *

 ***Gran alfinViernes para todxs.

=Jejeje= Fe de erratas..

recién unas 10 hs. después de publicar tomo nota que no es Viernes..¡¡es Jueves!!, sepan disculpar...los dos días de feriado por Carnaval me llevaron a la confusión y de paso...ya ven lo que hace el paso del tiempo en las neuronas de un hombre *mayor*...jeje.

Sigue  temblando Gaia   y propone un Febrero récord en sismos.
La actividad en Loyalty Islands no hacesado y se ha trasladado también a Vanuatu;


 

 

 

 

 

 

 

Y la climatología a nivel mundial también sigue dando que hablar.
Algunos medios parecen asustados a punto tal que ya están generalizando la situación;


 









Y la gran pregunta que aquí analizamos desde hace años comienza a volverse por fin..mediática;








Graves contratiempos genera ésta asolada provocada por el frío y las nevadas, algo que también mencioné aquí, por ejemplo la energía, sea eléctrica  o gasífera tal lo ocurrido en USA y en México;










Y lo peor en tiempos de Pandemia; la vacunación;











Desde todo rincón de Estados Unidos, Canadá y el Reino Unido se habla de récords, apagones,  heridos, muertos, paralización, estragos;












Europa, obviamente no está al márgen;









Y en España, al límite con África donde olas intermitentes de cierto calor pueden aparecer, nada ha terminado;









Pero ni en África o Asia están tampoco exentos;











Y si alguien creía que ésto era sólo una *anomalía temporaria*...parece ser que no;









Y sí señores...alguna vez había que hablar de ello...
Eso sí..para minimizar lo que está ocurriendo...se reflotan récords del pasado como para que no se note tanto..jeje..;









Nada es casual...;













Gilgamesh***

Fuentes;
-lugaresdenieve
-heraldodemexico
-pagina12
-elpais
-elsoldemexico
-excelsior
-abc12
-xinhuanet
-lugaresdenieve2
-wpta21
-detroitnews
-wdtn
-nbcnews
-cbc
-denverpost
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-prensa-latina
-itongadol
-prensa-latina2
-elvocero
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-tiempo
-tiempo2
-lavanguardia

martes, 16 de febrero de 2021

* Coronavirus 230 *

***Muy buen Martes para todxs.

Corona-sueltas


-El COVID-19 está vinculado a anomalías oculares potencialmente peligrosas. Los investigadores han encontrado, mediante resonancia magnética, anomalías significativas en los ojos de algunas personas con COVID-19 grave, según un estudio publicado en la revista Radiology.

-Hosteleros de Castilla y León preparan una cascadas de demandas por lucro cesante. El presidente de la Confederación de Hostelería y Turismo de Castilla y León, Fernando de la Varga, ha advertido que la decisión del Tribunal Supremo de suspender el toque de queda a las 20:00 horas provocará una *cascada de demandas* por lucro cesante.

-Colombia recibirá el fin de semana 192.000 vacunas de la china Sinovac. El país recibirá el próximo fin de semana otras 192.000 vacunas contra la COVID-19, producidas por la farmacéutica china Sinovac, que se sumarán a las 50.000 dosis de Pfizer que llegaron al país el lunes, ha anunciado este martes el presidente Iván Duque.

-Escándalo de las vacunas en Perú: La exministra de Sanidad del país andino, Pilar Mazzetti, admite haberse vacunado y dice que *ha sido el peor error de su vida*. Reconoce que la inoculación se produjo de forma extraoficial después de que saliera a la luz que cientos de altos cargos fueron inmunizados al margen de los ensayos clínicos que se estaban realizando en Perú.

-Países Bajos: Rutte pide respetar toque de queda pese a la decisión judicial. El primer ministro saliente, Mark Rutte, ha instado a los neerlandeses a respetar el toque de queda para evitar *un grave impacto en la lucha contra el coronavirus*, aunque no consiga paralizar esta tarde en los tribunales la sentencia que le exige la suspensión inmediata de la restricción por basarse en una ley de emergencia sin cumplir las condiciones.

-Israel no autoriza de momento la entrada de vacunas en la Franja de Gaza. Se trata de una primera remesa de 2.000 dosis de las 10.000 de la vacuna Sputnik V recibidas de Rusia. *Las autoridades de ocupación israelíes han impedido el acceso de vacunas contra el coronavirus enviadas por la propia ANP*, ha informado el Ministerio de Sanidad palestino en un comunicado.


Bue...como la musiquita..*un pasito palante un pasito patrás*, así vamos con ésta Pandemia.
De las *demandas judiciales* tal como leíamos en España y en Holanda uno sigue preguntándose si gobiernan los elegidos por el Pueblo o los atornillados Jueces...
¿Hasta qué punto tiene utilidad o razón de ser el llamado Poder Judicial?, porque una cosa es reglar o mediar conflictos a nivel particular o comercial, pero cuando dicho poder se entromete en cuestiones que obedecen al Ejecutivo me parece que estamos cediendo ante una casta vieja y bien conocida que tiene privilegios sobre el resto de los mortales y que creo, es la garantía del *sistema* que pervive disfrazada bajo la excusa de ser la experta en ..defender la *Justicia*..., el gobierno de los Abogados y Jueces...

Lo de Perú...je...los privilegios de los gobernantes que no le hacen honor a la Política, lo de Colombia y la tortuga renga que trae las vacunas y el veloz avestruz que compra armas. Lo de Israel y un estado que debería ser ejemplar a la hora de garantizar la no discriminación y el no rascismo es quien los practica contra el sufrido Pueblo Palestino.
Un pasito palante...un pasito patrás....

Una Unión Europea que de unida...tiene poco cuando Alemania hace lo que se le antoja y sin pedir permiso;


  

 

 

 

 

 

*Palante* con las vacunas y su ahora frondosa proliferación, y de repente cada país dice que tendrá la suya propia cosa muy positiva, ya hay tantas que solo falta que creen una y le ponga Covid-Cocacola.
Mientras pierden el tiempo produciendo algo que no funciona el vivo bicho...del cual dicen; *las bacterias y microorganismos no tienen inteligencia*, nos sigue dando cátedra de superviviencia superando a cualquier computadora creada por humanos.
Entonces..*Patrás*;



 

 

 

 

 

 

 

 

 Y como para complicar aún más las cosas, los *Laboratorios Farmacéuticos* al mejor estilo de poderosos estados encubiertos por fuera de lo democráticamente constituído, hacen lo que les da la gana ante la mirada silenciosa de esa misma *Justicia* que citaba arriba, justicia más bien complaciente de ese que llamamos *poder real*;


 

 

 

 

 

 

 

 

 

Como para ir cerrando el análisis de medios y frutilla del postre con respecto al tema de vacunación y estrategia contra el virus, una nota digna de ser desmenuzada para entender porqué todo lo que hacemos está condenado al fracaso en materia de Pandemia, ¿porqué  digo ésto? porque estamos haciendo lo contrario a lo que deberíamos haber hecho; 


 

 

 

 

 

 

 

 

 

-La vacuna era =es; será= la solución a los males que, en forma disruptiva, cambió el rumbo de nuestras vidas a principios de 2020.

                                                                                  
*Supongamos que las vacunas que se están desarrollando no funcionen. ¿Por qué? Porque no bloquean bien la interfase de reconocimiento entre la espira del virus y el receptor.
¿Qué es una vacuna? Es un pedazo del virus amarrado a un vehículo molecular que no tiene la capacidad de infectar, pero sí de inducir la producción de anticuerpos que se unen a la región que reconocería al receptor. Y, en principio, a otras regiones inmunogénicas. Pero eso último probablemente falle. Es decir, va a tener una eficacia que, se calcula, del 30 o 40 % en el mejor de los casos y no en todos los individuos. Y va a durar unos meses.

¿Qué quiere decir que falle? Que el virus reconoció al receptor de la célula humana y, al mismo tiempo, eludió al anticuerpo inducido por la vacuna. Ahora, si uno quiere limpiar el organismo del virus, habrá que tener un freno de emergencia, porque la vacuna no resultará suficiente y será como la eficacia de la vacuna contra la gripe, que es muy relativa. Ayuda, pero no elimina el problema*.


Las respuestas las dió el químico, matemático e investigador bahiense Ariel Fernández, en una nota publicada el 11 de octubre , al proponer una estrategia terapéutica con anticuerpos monoclonales como alternativa a las vacunas contra el coronavirus. Ahora, con el diario del lunes , el Dr. Fernández dice que la verdadera batalla contra el coronavirus aún no comenzó.

*Se ha vacunado a un pequeño porcentaje de la población, entre un 5 y un 10 %, de acuerdo con cada país, pero cuando llegue al 60 % el virus tratará de adaptarse y acelerará su proceso de selección natural. Probará tantas variantes como sean necesarias para zafar*, asegura.
*Está claro que el antígeno =una molécula ajena o tóxica para el organismo que, una vez dentro del cuerpo, induce una respuesta inmunitaria, provocando la formación de anticuerpos= que se está usando para la vacuna no es óptimo; es subóptimo. Si se tuviera varias alternativas de ataque, la realidad sería diferente*.

El Dr. Fernández relativiza la efectividad de las vacunas actuales.

*Si los laboratorios no reaccionan y no cambian de antígeno, se ingresará a una fase **endémica**.
Es decir, vamos a convivir con el virus por los siglos de los siglos. Va a ser más suave y vamos a estar más adaptados, pero será algo semejante al proceso de la gripe.
Claro, a la gente no le importa demasiado, porque la mortalidad es muy baja. Si uno se engripa a los 80 años por ahí es preocupante, pero con una edad menor no pasa demasiado; son siete días y se termina. Pero esto =por el coronavirus= no es lo mismo.
Ciertamente, no podemos permitir un coronavirus endémico como el que ya tenemos =gripe=, pero creo que vamos hacia eso*.


El Dr. Fernández egresó de la UNS y luego se trasladó a Yale-Estados Unidos, en 1981, donde obtuvo su doctorado. Fue investigador en Princeton University y en el Instituto Max Planck de Alemania, y profesor en las universidades de Indiana y de Chicago. Se retiró como profesor emérito de Bioingeniería en Rice University.
Actualmente posee una consultora de patentes de medicamentos, AF Innovation, que cuenta con un  instituto privado, Daruma, donde se utiliza la inteligencia artificial para el diseño de fármacos. También conserva un cargo de investigador del Conicet y rinde los informes bianuales.
Sus especialidades son la físico-química; la biofísica molecular y el diseño racional de fármacos. Ha publicado cuatro libros y el quinto está en camino, más de 400 artículos en revistas especializadas. Posee tres patentes biotecnológicas.

-Dr. Fernández, por la gripe mueren, por año en el mundo, entre 600.000 y 800.000 personas. ¿Cuál sería entonces un eventual escenario por el coronavirus?

Podrían ser 5 millones de personas por año. O 10.


-¿Cómo es una endemia?

Es un panorama complicado y confuso. El virus va perdiendo virulencia, pero no se extingue.

-¿Un escenario así es evitable o inevitable?

No se sabe. Pero podríamos hacer algo para combatirlo, como decía: cambiar el antígeno de acuerdo con los resultados publicados en este octubre. Y así sería como el caso de la viruela, que fue erradicado del mundo con una vacuna. Casi no existe más. ¿Por qué? Porque el virus no muta y el antígeno que se utilizó fue muy bueno de entrada. Pero esto ya no pasará con el coronavirus.

-¿A esto te referías cuando dijiste, también en octubre, que no había que poner todos los huevos en la misma canasta?

No confiar sólo en la vacuna; eso quise decir.
La vacuna resolvió el problema en muy pocos casos. En la viruela, por ejemplo y lo hizo parcialmente en la poliomelitis, que está casi erradicada, pero otras enfermedades son endémicas, como la malaria, que subsiste en toda Africa Subsahariana. O la tos convulsa, que tampoco tiene vacuna, sino que se trata con medicamentos.
Con el coronavirus no podemos confiar en que la vacuna sea la solución, sobre todo si los laboratorios no están dispuestos a cambiar de antígeno por otro optimizado. Hay que tener alternativas.


-En la última publicación científica, de este viernes 5, justamente sugerís la utilización de otro antígeno. ¿De qué se trata?

Lo que propongo, básicamente, es que, en vez de usar la espira como antígeno, se utilice sólo una región de ella, que se libera cuando el virus va a entrar a la célula humana.
Con este antígeno, la vacuna atacaría al virus en dos fases: cuando es viral, porque reconoce esa región única que no se camufla, pero también cuando está preparado para ingresar. Es otra estrategia donde, puntualmente, si al virus no lo destruís en la primera opción, lo hacés en la segunda.


-¿Por qué no se cambia el antígeno?

Todas las compañías están a full con la vacuna. Hoy no es sencillo modificar ese rumbo: es muy costoso y existen complejidades logísticas y de tiempo.
Lo que pasa es que el virus ya demostró su capacidad de adaptarse. Y hay una variante capaz de eludir a la vacuna: la denominada sudafricana.
Por fortuna a la Argentina aún no llegó, pero hay que pensar que la presión selectiva del virus aún no ha sido ejercida, ya que apenas se vacunó un pequeño porcentaje de la población.


-¿Qué es la presión selectiva?

Son las nuevas cepas. Tiene que ver con la evolución del virus, que va cambiando para tratar de adaptarse a condiciones más hostiles.
Cuando se vacuna al paciente, el virus advierte que se enfrenta a condiciones adversas y empieza a probar variaciones para intentar salvarse. Si la vacuna no tiene el antígeno correcto, le será más fácil resolverlo. Por eso es que cuantas más regiones ataque la vacuna, mejor.
Todavía no hay tanta presión sobre el virus porque, insisto, el porcentaje de vacunados es pequeño y falta bastante, pero cuando implique a mucha gente la situación cambiará.


-Más vacunados, ¿más problemas?

Sí.
Será un problema en la medida que haya un mayor número.
Ya vemos que el virus reacciona y que no se queda quieto. Incluso, la variante sudafricana que elude a la vacuna sólo es efectiva en el 10 %, cuando otras tienen un registro del 92 %.


-¿En qué etapa de desarrollo están los medicamentos antivirales?

Como otros investigadores propuse, usando anticuerpos monoclonales, medicamentos que atacan directamente al virus. Son anticuerpos inoculados. Eso está en fase 1, en desarrollo. Faltan dos fases.
Pero hay antivirales más genéricos. Por ejemplo, antiparasitarios como la ivermectina, que no se puede suministrar en una dosis muy alta para que sea efectiva porque genera un bloqueo de procesos. Es decir, el ácido sulfúrico mata al virus, pero no se puede bañar al paciente en ácido sulfúrico. La de la ivermectina es 100 veces inferior a la que habría que aplicar para que sea efectiva. Es decir, mal no va a hacer y con una alta carga viral puede llegar a ser buena, ayuda, pero insisto: no están precisadas aún las dosis.


-¿Y la etapa de medicamentos para reducir el daño en el sistema inmunológico?

Hay corticosteroides. Cada vez se le da más importancia a la inflamación y es algo relacionado con la senectud. La inflamación denota un signo de disfuncionalidad, tal como sucede con las personas mayores. Y algo así podría ocasionar la muerte.
En parte, la mortalidad del virus se debe a que el sistema inmune, como nunca vio un enemigo de esa naturaleza, sobredimensiona su reacción y eso puede ser letal. Pero estas son batallas locales.


-¿Y con los anticuerpos?

Es lo que había propuesto inicialmente: ir directamente al virus. Está en fase 1, con análisis de tolerancia, pero aún restan dos fases clínicas. Entiendo que puede llevar un par de años más. Por razones obvias, no tienen la prioridad. La diferencia es que las vacunas pretenden detener la enfermedad a nivel poblacional, pero con los anticuerpos es una batalla individual.

-¿Por qué hay demoras en la producción de vacunas?

Para su elaboración se utilizan plataformas nuevas y muy sofisticadas.
El principio de la vacuna tiene 100 años y no debería ser difícil manufacturarlas en proporciones importantes. Esas plataformas son maravillosas en el laboratorio, pero cuando se pasa a la gran escala el tema es diferente.
Por ejemplo, la vacuna rusa utiliza un adenovirus inocuo e inofensivo y le adosan, por manipulación de biología molecular, la espira del coronavirus.
No se trata de vacunas convencionales. Por ejemplo, las de Pfizer y las de Moderna, que usan el ARN Mensajero, están empleando un material genético inestable. Hay que trabajar a 70 grados bajo cero, en condiciones complejas y ahí existe otro problema logístico: cómo hacerla a escala industrial con semejante demanda mundial.


-A esta altura, ¿qué es lo mejor que nos puede pasar respecto del coronavirus?

Lo ideal sería que el virus se mude a otro huésped. Es decir que, con el aumento de la presión selectiva, se vaya a otro lado.
Puede ser que, conforme al aumento de la vacunación, el virus entienda que esta batalla no le conviene y decida pasarse a otra especie para propagarse mejor y sin tanto costo. Para dar ese salto tiene que ser un receptor parecido al humano y que esté en su misma esfera de influencia. Un perro; un gato, una bacteria y así. Este es el escenario de la extinción respecto de los humanos.


-¿Es probable?

Poco probable. Aunque eso parece que sucedió en 1918 con la gripe española.


-¿Y qué es lo peor que nos podría pasar?

Que se torne endémico, porque vamos a tener que convivir con el virus. Y acaso terminemos como la malaria en Africa. Si entramos en eso estaremos en problemas. No está bueno convivir con una enfermedad tan peligrosa.
¿Los plazos? Depende de cómo reaccionen los laboratorios. Hay algunos, como Merck o Novartis, que no han entrado en el juego. No sabemos qué están haciendo porque trabajan en secreto, pero mañana pueden aparecer y decir: Ahora ingresamos nosotros, pero con otro antígeno. Eso sería formidable                        .
¿Por qué llegamos a las dos dosis?
Hasta octubre no se sabía que el virus se camuflaba. ¿De qué se trata?

Los americanos lo llaman sugar coating. El virus hace una glicolización; es decir, se recubre de unas moléculas de determinados azúcares y hace que se camufle del sistema inmune. Esto no se sabía en mayo, cuando se empezaron a desarrollar las vacunas. La estrategia de camuflaje del virus es muy parecida a la de la gripe.
Con la vacuna al paciente se le suministra la espira del virus con distintas plataformas. El sistema inmune la ve, genera anticuerpos que atacan distintas zonas de la espira y producen una respuesta inmune. Ahora, cuando viene el virus verdadero, y no el antígeno de la vacuna, llega con un camuflaje y el sistema inmune no reacciona; excepto en un solo lugar, donde no se puede camuflar y donde reconoce al receptor para entrar en la célula humana, e infectar.

El resultado es que las vacunas generan muchos anticuerpos que atacan distintas regiones de la espira, pero sólo un 30 % de ellos son efectivos, porque van al único lugar en el virus donde no está camuflado.
De buenas a primeras se empezó a hablar de las dos dosis de la vacuna. Antes nadie lo decía. ¿Por qué? Porque el resultado recién salió en octubre y los laboratorios, por ahora, han resuelto no cambiar de antígeno en la mitad del río.

Por eso se refuerza con una segunda dosis, porque gran parte del sistema inmune está distraído en atacar sitios camuflados en el virus. Para ser exactos, insume dos tercios de los recursos que, en este caso, recuerdo que no son infinitos. Es sólo un repertorio de anticuerpos. Esto es: Si gastaste dos tercios de los anticuerpos en ir en una dirección equivocada y que no es productiva para el ataque, ¿cómo lo resolvés? Con dos dosis.



-¿Qué pasa en el Reino Unido?
A este viernes 12, por coronavirus en el Reino Unido ya habían fallecido más de 114.000 personas.

Reino Unido es uno de los países de mayor densidad de población =66,6 M/H=. Tiene la misma cantidad de habitantes de Francia, pero la superficie es de casi un tercio. Por ejemplo, Inglaterra tiene 250.000 km2; Francia posee 600.000 y Argentina unos 2,7 millones. Es decir, estamos hablando de un país que, en superficie, es la décima parte de la Argentina.

Es como un laboratorio abierto. Más allá de los hábitos sociales de las personas, que también incide, la presión selectiva allí es mayor y se aplica una suerte de sobrevivencia del más apto. Es un principio darwiniano.
La cepa que allí permanezca será la que permita un mayor número de contagios.
Es un caso contrario a los países nórdicos, que están muy despoblados. Dinamarca tiene casi 6 millones de habitantes y Suecia llega a los 10 millones, por ejemplo.


A fumarnos el bicho los cinco años que en principio mencioné aquí cuando empezábamos a conocer ésta desgracia, mal que nos pese, recién ha pasado el primero...

Top20 de cantidad de infectados;


 

 

 

 

 

 

 

 

 


Top40 en cantidad de muertes por millón de habitantes;



 

 

 

 

 

 

 

 

 

América Latina Jueves 11 de Febrero;

-Brasil 9.662,305
-Colombia 2.173.347
-Argentina 2.001.034
-México 1.957.889
-Perú 1.203.502
-Chile 764.307    
-Panamá  329.367
-Ecuador 260.076
-Bolivia 232.502
-República Dominicana 226.714
-Costa Rica 198.338    
-Guatemala 165.532
-Honduras 157.468
-Paraguay 140.797
-Venezuela 131.476
-El Salvador 56.653
-Uruguay 46.778
-Cuba 35.772
-Jamaica 18.237
-Haití 12.016
-Nicaragua 6.347

Hoy Martes 16 ;

-Brasil 9.874.956
-Colombia 2.198.549
-Argentina 2.029.057
-México 1.995.892
-Perú 1.238.501
-Chile 782.039    
-Panamá  332.679
-Ecuador 267.701
-Bolivia 237.144
-República Dominicana 231.095
-Costa Rica 200.024    
-Guatemala 168.103
-Honduras 160.983
-Paraguay 145.095
-Venezuela 133.577
-El Salvador 58.023
-Uruguay 49.360
-Cuba 39.941
-Jamaica 19.773
-Haití 12.192
-Nicaragua 6.347



Gran abrazo.

Gilgamesh*** 

Fuentes;
-niusdiario
-lavanguardia
-filo
-elmundo
-lanueva

lunes, 15 de febrero de 2021

* Sismos, clima, Edad de Hielo al Norte y de Sequía al Sur *


***Excelente incio de semana y de carnaval sin carnaval  para todxs.

Les debía información sobre  el balance sísmico del pasado Enero con respecto a los Eneros de los últimos 5 años.

Enero 2016;  133
Enero 2017;  153
Enero 2018;  138
Enero 2019;  148
Enero 2020;  165
Enero 2021;  157

Sin dudas alto, el segundo del último lustro sólo superado por poco el año pasado.
Y si comparamos el mismo período transcurrido desde que comenzó éste 2021 con el del año pasado =01-01-2020/15-02-2020= pues, resulta ser que para el primer mes y

medio del año pasado ocurrieron 230 sismos por encima de los 51,  hoy en éste año nuevo ya tenemos...316..
¿Cuántos sismos de 6 y 7º para cada período?
Un mes y medio año 2020; de +6º 20 sismos.
Un mes y medio año 2021; de +6º 21 sismos.
Un mes y medio año 2020; de +7º    1 sismo.
Un mes y medio año 2021; de +7º    3 sismos.

La mano parece venir brava.
Pero hablemos del clima, pero antes de un Sol en estado de anemia absoluta;


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Y ahora sí, un clima sujeto a nuestra estrella.
En Argentina *dicen* un Febrero...atípico con jornadas frescas;


 

 

 

 

 

 

 No muy lejos de aquí;




 

 

 

 

 

 

 

 

 

Mucho más lejos de aquí;




 

 

 

 Algo más lejos todavía;










 

 

 

 

 

 

Les había prometido para una de éstas noches el relato de época sobre los sucedido en Sudamérica durante el período de la edad de hielo en el Hemisferio Norte, pero lo haré ahora.


El congelamiento del Hemisferio Norte tuvo otro tipo de implicancias por aquí, no idénticas, muy distintas, pero tuvieron algo en común y fué el desastre.
Los relatos incontrastables e indudables de toda duda, además de poseer una riqueza linguística que me encanta, reflejan  a la perfección y ayudan a *ver* con solo leer. 

De paso creo que éstos relatos son el mejor testimonio para entender lo que nuestra corrupta ciencia meteorológica no nos dice mientras inventa un relato que nada tiene que ver con los ciclos naturales del planeta. Y los relatos históricos antiguos creo que...deberían ponernos a hilar mucho más fino cuando en el Hemisferio Sur imaginamos un mismo escenario que en el Norte, siendo que al parecer...siempre han sido *opuestos*.

Si una nueva edad de hielo se avecina, aquí en el Sur deberíamos esperar otra cosa,  cosa más parecida a lo que les voy a compartir ahora y espero nos ayude para seguir estudiando en éste apasionante tema.


 

 

 

 

 

 

 


*Tanto era el polvo que la oscuridad obligaba a encender velas para iluminarse a mediodía y la gente podía ahogarse no con agua sino con polvo*.
Por Alberto Moroy

En 1576, Don Hernando de Montalvo =Tesorero del Río de la Plata= escribe al Rey sobre la expedición de Juan Ortiz de Zárate. En ella manifiesta: *… el año fue fértil de aguas cuando llegaron en 1574 y después acá en dos años y medio que estamos, no hemos visto llover sino muy poco, en esta tierra tan estéril que se siembra y no grana*.

En 1748 Joseph Cardiel, misionero jesuita realizó un viaje al sur de la Provincia de Buenos Aires durante el otoño de 1748. Del análisis de su diario de viaje se concluye que en la región recorrida predominaba una fuerte aridez, destacándose una amplia zona arenosa descripta por Cardiel como un *desierto de arena*. Se trata de una extensa área ubicada entre el río Quesquén Grande, partido de Necochea, y los arroyos Zavala y Cristiano Muerto, partido de San Cayetano, extendiéndose desde la costa hasta unos 50 km tierra adentro.

Cuando en el siglo XVIII se  instaló  la Guardia del Zanjón =75 km. del obelisco porteño=, en noviembre de 1758 ,su comandante, el teniente José I. Zabala escribió: *Estamos viviendo a la inclemencia del sol que nos abrasa y hay una gran polvareda*. En 1768 reitera la queja el capitán Juan de Mier quien, en marzo de ese año, señala *las caballadas están muy aniquiladas por la falta de pastos y de agua y en pocos días quedarían inservibles*. Febrero de 1781, el entonces comandante de la Guardia del Zanjón, Nicolás de la Sardeña escribe *La sequía al menos es una realidad: en su huida a lo largo de la costa bonaerense, un cautivo en Chascomús-Argen tina, a 116 Km de Colonia del Sacramento-Uruguay, estuvo cinco días sin poder dar de beber a su caballo. El comía huevos de avestruz y la cuajada del vientre de venaditos recién nacidos*

Impensable con la visión actual, las zona es una de las mas húmedas de la Provincia de Buenos Aires bordeada por arroyos, lagunas pantanos y zonas inundadas, ubicada a 120 km al SO de la desembocadura del rio Santa Lucia-Uruguay.

En 1828 el topógrafo francés Narciso Parchappe integra la expedición fundadora del fuerte 25 de Mayo a orillas  de la laguna Cruz de Guerra, actual partido de 25 de Mayo. En la descripción de su viaje, iniciado en enero de 1828 desde San José de Flores, barrio de  Buenos Aires,  son frecuentes las referencias a  médanos vivos por ejemplo, en los partidos de Bolívar, Alberti, 9 de Julio y a las condiciones de sequía, incluyendo la falta de aguas adecuadas para beber por el ganado. Dice Parchappe que *…las aguas saladas son extremadamente comunes en las provincias comprendidas entre el Paraná y los Andes y sobre todo, en la de Buenos Aires*

Toda vez que escasean las lluvias, la recarga de napas superficiales es baja dejando al descubierto el agua salobre que por ser más densa está situada por debajo de la dulce, en muchos lados de la Provincia de Buenos Aires los molinos y aguadas elevan la salobridad a tal punto que se provoca la mortandad del ganado. Hay que recordar que gran parte de la provincia de Buenos Aires era el fondo del mar.
Casi todos los viajeros que visitaron la Pampa con anterioridad a su finalización 1850, coinciden que más allá del Rio Salado =160 km al sur de la ciudad de Buenos Aires= era un desierto. La travesía hacia Tandil y Bahia Blanca era casi suicida sin baqueano, el principal problema no era el indio, sino la falta de agua.

Parece una paradoja pero la pequeña Edad de Hielo en Europa, pudo haber sido parte de un cambio climático mundial que provocó importantes sequías en el Rio de la Plata. Una de ellas, en especial la de 1832, dejó en las crónicas de época relatos dantescos como el que podrán leer al final de esta nota.

No obstante es más probable que un fuerte fenómeno meteorológico conocido como la Niña, el mismo que está impactando ahora la región y traerá sequía y bajo rendimiento de los cultivos, además de incendios a lo largo de Sudamérica haya sido en parte responsable. Para ese entonces, según crónicas citadas por el Diario Austral de Temuco-Chile en 1832  tambien entran en erupción simultánea los volcanes Llaima, Villarrica y Osorno. El ciclo continúa tres años después en 1835 cuando el Villarrica entra en violenta actividad, acompañado por ocho volcanes más.

Cuando Charles Darwin arribó a la Argentina traía por expertizaje solo la curiosidad, incluso tuvo que pagarse el viaje como acompañante de alcurnia del Capitan Fitz Roy, no como Naturista. Fitz Roy ya tenía uno,Robert Mc Cormick,  naturalista y cirujano escocés que abandonó la expedición en Rio de Janeiro en abril de 1832. Sin dudas en este viaje Darwin hizo el *Master*, justificó los hallazgos de tal cantidad de osamentas que recogió sin clasificar y lo asoció con la pequeña edad de hielo europea. 

 

En lo personal, en mi categoría de novato, lo asocio más con el evento de la niña en forma recurrente, lo que potenció los resultados, quizás con aportes de los volcanes chilenos por meses, y con los coletazos de un fenómeno a escala global como el final de la pequeña Edad de Hielo. Con la fama bien ganada años después su apellido sirvió como *chapa* de la verdad absoluta, en todas las referencias, incluso hoy hay titulares como *Darwin tenía razón* en relación a las osamentas de caballos encontradas en el rio Arrecifes, a 171 km. de la ciudad de Buenos Aires  con una antigüedad cercana a los 200 años y que pertenecen a este evento local que describió Darwin.

La gran sequia

*Desde fines de 1829 y hasta principios de 1832, una intensa sequía azotó la provincia de Buenos Aires, y fue seguida por violentos ataques indígenas. Alrededor de 1.500.000 de cabezas de ganado perecieron. Llovió tan pocas veces que los ríos y arroyos se transformaron en rutas. Las plantas de todas las especies, hasta los cardos, desaparecieron. Toda la región se convirtió en un inmenso desierto. Los caballos y bueyes errando por los campos en busca de un poco de agua  se dejaban caer exhaustos. La tierra desunida y hecha polvo por la sequedad y el pisoteo se dejaba levantar por los pamperos que cubría la hacienda muerta y los pocos que sobrevivían en busque de aguadas más al sur de Buenos Aires, en busqueda de lagunas y ríos. Por sus barrancas se precipitaban los vivos sobre los muertos y aplastados que habían llegado primero. Los mojones delimitadores de cada propiedad desaparecieron bajo el peso del polvo y el gobierno tuvo que enviar una comisión para evitar las disputas entre los propietarios de tierra. Como resultado de las sequías el precio promedio por legua cuadrada de campo cayó 50% en 1833*.

Para ese entonces,1830,  Uruguay tenía una baja densidad demográfica, se calcula que la población era cercana a 74.000 habitantes, 14.000 en Montevideo y el resto en el interior, con un promedio de un habitante cada 2.5 Km. Casi todas las construcciones eran con techo plano, lo que denota poca preocupación por las lluvias, habida cuenta que las técnicas de impermeabilizar las terrazas, para la época debieron ser complicadas.

La cubierta de las viviendas se hallaba construida sobre vigas de palma o madera dura, generalmente traídas de Corrientes o Paraguay, sobre las que se colocaban alfajías de madera cedro o algarrobo y arriba ladrillos en dos o tres capas cruzadas, llamándose estas de dos o tres órdenes, unidas por una mezcla de betún.  
¿Como evacuaban las aguas de lluvia? Generalmente se las orientaba a través de conductos realizados en madera, plomo o lata a los que denominaban cañones.

El relato de Darwin sobre la *Gran seca*

En el año 1833, al navegar las aguas del Paraná, frente a San Pedro, Charles Darwin plasmó testimonios desoladores de aquel período de sequía en su Diario del viaje de un naturalista alrededor del mundo. En sus páginas, escribió: *El período comprendido entre los años 1827 y 1832 se llama el gran seco o la gran sequía. Durante ese tiempo, fue tan escasa la lluvia caída, que no creció ninguna planta, ni siquiera cardos; los arroyos se secaron, y todo el país tomó el aspecto de un polvoriento camino carretero. Así ocurrió especialmente en la parte septentrional de la provincia de Buenos Aires y meridional de Santa Fe. Pereció un gran número de aves, animales silvestres, ganado vacuno y caballar por falta de alimento y agua.

Un hombre me dijo que los ciervos solían meterse en su corral a buscar la poza que se vio obligado a cavar para proveer de agua a su familia. Las perdices apenas tenían fuerza para huir volando cuando se las perseguía. El cálculo más bajo supone que se perdieron sólo en la provincia de Buenos Aires un millón de cabezas. Un testigo de vista me refirió que el ganado vacuno, en rebaños de millares, se precipitó en el Paraná y, exhausto por el hambre como estaba, no pudo encaramarse a los bancos de cieno y, así, pereció ahogado. El brazo del río que corre junto a San Pedro estaba tan lleno de cadáveres en putrefacción que, según me dijo el patrón de un barco, el hedor le hacía de todo punto infranqueable. Indudablemente, varios cientos de miles de animales perecieron así en el río*.

Crónicas de Arturo Reynal O´Connor- 1864/1920

*Abro un paréntesis a mis escritos sobre las colonias, para demostrar que la sequía incipiente, que tanto nos alarma, es una caricia celestial ante la espantosa y cruel que arrasó hace noventa años los prados verdes y fecundos de la sin par y nunca bien ponderada provincia de Buenos Aires. Contóme el otro siglo un antiguo de luengas barbas, que dos años antes envolvían a esta capital, que era entonces una aldea desempedrada, nubes de polvo que obligaban a sus vecinos a encender las velas de baño a mediodía: eran las polvaredas, que habían convertido a la campaña, que principiaba en extramuros, en una tempestad de tierra!

La carne y la leche, flacas, principiaron a escasear; las legumbres y las frutas tornáronse tan difíciles y caras como hoy, y hasta el pan y el pambazo =baja calidad de harina= de San Roque se endurecieron. **¡La seca, la seca!** exclamaban todos. Hacía más de un año que no llovía. Los lecheros no cantaban ya por las calles y los panaderos se escurrían silenciosos en sus mulitas con árganas. Nuestros maravillosos campos de esmeralda se pusieron cárdenos, después, gualdos, amarillos. Los ríos, los arroyos y las lagunas se secaron. No había, en toda la inmensidad de la pampa, una gota de agua. 

Los pastos eran una pajilla de raíz seca, que el viento arrancaba al primer soplo, la tierra, un arenal, y sudario de un futuro camposanto, polvo y polvo. El ganado vacuno sucumbía, porque, sin dentadura en la mandíbula inferior, no alcanzaba a envolver con la lengua hierba tan raquítica, y los estancieros, para salvar siquiera su cuero, principiaron a desollar, en medio de la escasez de brazos, que huían, sedientes, a los poblados, porque hasta los pozos estaban exhaustos, secos, pétreos, como maldecidos. No se oía en la soledad, que iba, paulatinamente, convirtiéndose en el pavoroso vacío, más que el ruido de las chairas y los chirridos de los chimangos y caranchos hambrientos.

Ya en todas las iglesias se había llamado *ad petendam pluviam* =*Señor, en ti vivimos, nos movemos y existimos: concédenos la lluvia necesaria, a fin de que ayudados con los bienes de la tierra, anhelemos con más confianza los bienes del cielo. Por Jesucristo, Nuestro Señor. Amén*= y orado ansiosamente. Los nuevos soles y lunas, en vez de convertir las rogativas, súplicas y ofrendas siquiera en esperanzas, traían días más secos todavía. Cuando se creía, por las nubes que obscurecían, que llovería = porque si nuestro clima es variable, el cielo es fiel= venía a medianoche un vendaval atmosférico, y la mañana amanecía cristalina y fresca.

Aún en los inviernos se sucedían así las semanas, los meses… ¡Ni qué se hubieran también secado las cataratas celestiales! ¿Era un castigo divino? ¡Ironía del destino!, porque, acostumbrados los porteños al aire húmedo, por la evaporización del Río de la Plata, aparecieron diversas epidemias, y cada mañana más iluminada, cada día más dorado, cada tarde más fresca, cada noche celeste o azul más plateada por la luna o los astros, y disfrutada en rueda de sillas al aire libre en las veredas, era un grado más en el horno que iba secando y quemando toda simiente de vida. ¡Y a no ser por la falta de provisiones y agua que aumentaba el hambre y la sed, habríase deseado que tales primaveras fueran eternas, porque eran plácidas y deslumbrantes!

La hacienda vacuna, que no había aún perecido, fue cuereada; las yeguadas huían en tropillas, desesperadas, por los campos sin alambrados, creyendo hallar, cuanto más afuera, pastos, agua… ¡Ilusiones del hambre! Y como más allá menos feraces, más secos y crueles todavía. Hasta los indios, atraídos por este espejismo fantástico, habían abandonado sus aduares, y arriaban, al resplandor de las blancas lunas, sus últimas vacas arrebatadas al cristiano, que, macilentas, sucumbían también en la procesión, siempre adelante.


Huyeron las yeguas alzadas, los venados, los avestruces, los guanacos…, los leopardos, los leones y todas las fieras, tan mansos por el común peligro, cual corderos o niños, y de hambre habrían proferido morir a manos del hombre. No quedó, en toda la pampa, ni una fiera, pereciendo, en sus cuevas, las vizcachas, los matacos, los peludos, las exquisitas mulitas, los zorrinos, el astuto zorro y los reptiles.

Y en el espacio, por haber huido también al austro todas las aves acuáticas, soñando ríos y mares dulces, no había un pájaro, ni un ave carnicera. No imperaba sino el sol a plomo, rajante, y de noche, los astros callados, diamantinos, centelleantes, con sus pestañas de luz y sus lunas de mármol. Era tal el silencio, que parecía que hubiese muerto todo, todos: un mutismo verdaderamente fúnebre, sepulcral, la agonía del desierto en un lecho de arena, con su corona de tréboles y gramíneas deshojada y torrada por los soles. Sólo se oían de vez en cuando, a fuer de estertores, los bufidos de los últimos toros y vacas y los relinchos de las inquietas yeguadas hambrientas, que si hubieran podido hablar, habrían gritado: **¡Agua, agua!**, ensordeciendo la inmensidad y arrancándole llantos.

Tal trascurrió el año 30, el 31 y el 32. Fué la sequía más pertinaz y espantosa que recuerdan los anales rurales bonaerenses. No se veía en las estancias, chacras y quintas ningún habitante. Todos, buscando al hombre, que perecía también de hambre y de sed, se habían guarecido en las poblaciones adyacentes, para ampararse y protegerse. Las moradas campesinas yacían vacías, solitarias; las aves y animales domésticos, abandonados por sus amos, perecían entre el polvo, y en las noches mudas, negras o blancas, rajaba el corazón el ronco ladrido de algún perro sobreviviente. **Nunca, =dijeron los indios= se había visto a nuestra rica campaña tan arrasada**. 


Las intermitentes polvaredas alteraban diariamente la monotonía de la inmensidad, convirtiéndose el polvo en un oleaje que rodaba enloquecido, girando sin rumbo, sublevándose como las tempestades marinas. Era un mar de polvo, y sus olas, iluminadas en sus flancos y crestas, tenían, los prismas, las reverberaciones y hasta las chispas de los incendios.

Sus resoplidos, sus quejas profundas y voces misteriosas retumbaban en el alma, y no se veía en esa tormenta que ahogaba como el agua, nada, nada.  A la tarde se serenaba; refrescaba, y las noches eran tan, silenciosas y solemnes, que, por el enrarecimiento del aire, las estrellas eran más grandes; parecía que bajaban: luceros; se oían sus parpadeos; cualquier graznido de buitre sobrecogía, atemorizaba, y el casco sólo de un caballo habría estallado en tal vacío con el estruendo de un a metralla en un suelo de bronce. ¡Qué alma viviente se atrevería a cruzar ese mar de polvo y fuego!… **¡Yo!** exclamó un paisano, llamado Contreras. 

 

**Salí de la Magdalena a buscar a mi hijo, que estaba cerca de Chacabuco 207 km al oeste de la ciudad de Buenos Aires. Tardé más de un mes, porque me detenía en las poblaciones a aprovisionar mi tropilla. Lo hallé al fin muerto contra el pozo, con la soga en la mano**. 

Fué, sin duda, desesperado de sed, a sacar agua, y lo ahogarían los huracanes de polvo.

Los indios se habían internado. El campo entero, tan vasto y bravío como el océano, se había convertido en un Sahara sin oasis, y estaba cubierto de cadáveres de ganados de todos géneros, de animales de trabajo, aves, hasta de fieras, que, descarnados por el aire seco, eran esqueletos marmóreos. Las ráfagas traían olores nauseabundos de las descomposiciones cadavéricas. ¡Qué tristeza terrorífica! La desaparición del pasto y el polvo había borrado las clásicas huellas; todo el campo eran caminos, y se reconocían, al llegar a los ríos o arroyos, por la mayor abundancia de esqueletos de los pobres animales  sedientos, que  expiraron allí desfallecidos.

Fueron en busca de agua y hallaron su tumba.
¡Qué espectáculo cuando las vacas hallan todavía una vertiente! Se atropellan por sorberla. Las que no han podido humedecerse siquiera la lengua contra el fondo de la rocalla, la lamen bramando, se cornean, — los toros…. no mugen, ni braman. Todo había muerto, todo, y lo que existía había desaparecido, huido. Los pozos de balde estaban llenos, rebosantes, de polvo, y las casas de las estancias, si se encontraban, yacían, juntamente con los corrales y palenques, tapados por la tierra reseca, desmenuzada, sirviendo de baluarte a sus torbellinos y trombas. Allí habían ido a parar, detenidas, en su furia, para morir, porque todo, todo, no tenia sino este fin: morir. 

Desde la orilla del Plata y el Atlántico, hasta más allá del Uruguay y el Paraná, y desde extramuros a los boquetes andinos, no se divisaba, en la maravillosa campiña, más que cadáveres de millones de animales de todas razas,... y aún de hombres...*

Impresionante el relato..

Sus mejores violines datan de entre 1680 y 1715, lo que coincide con un lapso singularmente frío de unos 70 años de la Pequeña Edad de Hielo. Stradivarius usó la madera de árboles como abetos y arces que crecieron durante ese período, resulta que los famosos violines y chelos fueron fabricados con madera particularmente compacta porque esos árboles crecieron muy lento y sin lapsos cálidos que pudieran disminuir la densidad.
Según el capitán Skogman, oficial sueco que participó de un viaje de la fragata Eugenia por América del Sur, en esos años, *en busca de aguas, enormes avalanchas de caballos y vacunos se dirigían a las márgenes del Paraná, donde se hundían en el fondo y sin fuerzas para salir por sus propios medios eran pisoteados por los grupos subsiguientes. Toda la provincia se convirtió en un desierto polvoriento…*. 1851 – 1853.

El naturalista Bravard publicó unos apuntes en el Registro Estadístico en los que refiere que llovió tan pocas veces y en tan poca cantidad que los lechos de los arroyos eran semejantes a grandes rutas; las plantas de toda especie, hasta los cardos, murieron de pie y fueron disecadas hasta sus raíces. Agrega que hasta lo pozos de agua para la gente estaban secos y la existencia del hombre estuvo más de una vez comprometida, hasta en las habitaciones, hasta en los pueblos, por una singular modificación del fenómeno del transporte del polvo, que, suspendido en el espacio, encontraba en él, a veces, nubes cargadas con vapor de agua con que se mezclaba. No era entonces bajo la forma pulvurulenta que volvía a descender, sino en la de una verdadera lluvia de lodo, cuya acumulación sobre los techos amenazaba destruirlos.

El lapso referido puede ser considerado como seco en general, destacándose por lo menos dos periodos de sequías muy graves y prolongadas entre 1690 y 1708 y entre 1753 y 1758 y muchas sequías breves. En medio de esta crisis de sequedad hay años de lluvias consideradas suficientes y solamente en 1636, 1671, 1685, 1774 y 1778, así como entre 1804 y 1810 hubo excesos de precipitaciones con encharcamiento, inundaciones y riadas de diversa gravedad.


Ojo entonces, las consecuencias de un ciclo *excepcional* global bien se han distinguido entre el Hemisferio Norte y el Sur.
Sea lo que fuere, de repetirse, instila la presunción de que nos espera un tiempo muy difícil.

Gilgamesh*** 

Fuentes;
-infobae
-tiempo
-overkarma
-excelsior
-voxpopulinoticias
-wwlp
-dailysabah
-kvoe
-lematin
-xinhuanet
-yna
-minutoar
-telam
-elpais