Son tiempos geopolíticos éstos que nos están ofreciendo una serie de eventos realmente educativos, especialmente para quienes ya pintamos canas y hemos visto bastante, como para que vaya siendo hora de autoevaluarnos especialmente en nuestra ideología, esa que cada día con cada suceso nos invita a tomar postura, a dejar de devanear en los grises y en las indefiniciones, en una típica actitud *ponciopilatesca* =permítaseme el neologismo= que generalmente hace a una porción de nuestras sociedades.
Ese porcentaje que se suele encasillar como *indecisos* y que creo, son aquellas y aquellos que no entienden nada, y que lamentablemente acuden a lo que les dicen los medios, y eligen principalmente a los *grandes medios*, como si si ese monopolio fuera garantía de ser el mejor consejero.
Están en juego las democracias, el estado de bienestar de sus ciudadanos, incluso la tan deseada *paz social*.
Hoy se ha inyectado en la mente colectiva una hábil estrategia que se utiliza para hacernos creer que hay una grieta, que hay dos bandos y que tienen que reconciliarse.
En esa grieta lo que hay en realidad es, de un lado el Pueblo, del otro, el poder real.
Esas reconciliaciones inducidas buscan en realidad que en pos de una paz social atada con alambre, los débiles sigan aceptando la dominación del poderoso, y así, declarar una ficticia unidad nacional, como esos matrimonios que salen a la calle y se los ve felices y sonrientes, tomados de la mano dan envidia a quienes se sorprenden de lo felices que son.
El matrimonio puertas adentro del hogar, no es más que un ring de box donde las apariencias del *afuera* no se disimulan, donde se putean en todos los idiomas, se tiran con todo lo que tengan a mano, y no se soportan más.
Hipocresía...le dicen, algo que en las democracias actuales exige el poder real para tratar de apaciguar conflictos que en un alto porcentaje son generados por el mismo poder, pero el poder nunca se hace cargo.
Yo tomo postura, es decir que a pesar de la extraterritorialidad y esa imposibilidad de vivir in situ para opinar con la mayor neutralidad posible =la neutralidad en sí no existe= me permite de todos modos decía, tomar postura y hacer causa común con lo que a uno lo identifica.
Y vemos el mundo y nos enteramos de muchas cosas, y tomamos postura sin que ello nos tenga que acobardar o tener verguenza de pensar como pensamos, habrán discrepancias, habrán tensiones, y un sano ejercicio que nada tiene que ver con la hipocresía de refugiarse en un pretendido *acuerdo* cuando en realidad hay luchas de poder que tienen que ver precisamente con nuestras garantías como ciudadanos.
Mucha cortina de humo se suelta desde ese poder para desviar la atención de esos temas que el poder no quiere tratar, y que son precisamente aquellos que garantizan *su* poder y nuestra pauperización a favor de aquellos.
Ponernos a discutir odiosamente sobre el aborto, la igualdad sexual, los viejos próceres, el fútbol, es algo similar a lo que hacían los bizantinos cuando dedicaban gran parte de su tiempo a discutir qué sexo tenían los ángeles..
Es decir que nos inducen a dividirnos en cosas que realmente no afectan nuestra vida, se banalizan los temas, es una especie de *chusmerío* barato de barrio en el cual todos se entretienen a ver cuál vecina es la que tiene el chimento de último momento y si está bien o está mal lo que el matrimonio de la esquina hace o deja de hacer entre sus cuatro paredes, mientras que, la verdadera división que hay y por la cual debemos indefectiblemente preocuparnos =poderosos versus débiles= nos pasa por encima.
Bendita división, esa, si es la que debemos asumir con valor y sin reservas cuando lo que está en juego es nuestra calidad de vida, nuestros derechos, y que todo eso lo debemos defender para todas y todos aquellos que estamos en la vereda de enfrente de un poder....que tambalea cada vez que amagamos a ponernos de acuerdo.
Acuerdo, sí, el realmente positivo, el que vale la pena cuando despejamos el humo y nos ponemos a luchar contra el verdadero enemigo que nos oprime y que nos divide en nimiedades para que no le molestemos a él.
Así anduvimos tomando postura con Venezuela, con Siria, con el Brexit, con cada región o país que nos invite a reflexionar y a aprender si se quiere.
Hoy por ejemplo, España está al rojo vivo, y más allá de que muchos españoles crean que el asunto es sólo de su incumbencia, el asunto va mucho más allá de sus límites fronterizos.
Ya sabemos, la eterna *grieta* entre separatistas o independentistas y quienes luchan por una unidad que es similar al ejemplo del matrimonio antes citado.
Bien podría elaborar mi razonamiento o postura que para muchos sería errada o sesgada y por ello, improcedente, inadecuada, atrevida, ignorante, pues...afortunadamente uno encuentra a otras y otros que no podrían ser sospechados de extraterritoriales o ajenos, con los cuales tenemos la misma mirada sin que tengamos los mismos intereses ya que la realidad de un país ajeno no va a modificar la mía, sin embargo... en un mundo que está perfectamente asociado en determinados intereses, el poder de cualquier lugar será el mismo que mantiene estrecha relación en cualquier rincón del planeta y que finalmente aplica un plan estratégico global, con colores y banderas según el lugar y la ocasión, hecho a medida del cliente, o sea, nos, los ciudadanos.
Comparto totalmente la siguiente editorial, a la cual no le quito ni una coma, porque expresa lo que siento y reflexiono, me representa absolutamente, como ciudadano del mundo.
-No por esperada, la sentencia del procés a los políticos independentistas catalanes es menos demoledora.
En varios sentidos.
Hay uno general que nos cae como una losa a todos, de punta a punta del país:
saber que en las decisiones de poder, España siempre derrapa por el mismo sesgo, o siempre carga del mismo pie.
Es una mezcla de autoritarismo, involución y torpeza que no mejora con el tiempo y el desarrollo.
Pedro Sánchez y su gobierno vinieron a demostrarlo este lunes, cuando a las 8 de la mañana, empezaron a tuitear una campaña, en varios idiomas, contando que España es una democracia consolidada.
¿Se imaginan algo igual en cualquier parte del mundo civilizado?
¿Les cabe en la cabeza que Francia, Alemania, el Reino Unido, Portugal... hicieran esa proclamación que nadie les pide?
La pluma del complejo asomaba con sonrojante desmaña.
Y el martes le dan otra vuelta de tuerca contando lo felices que son los extranjeros en España.
Aunque no incluyen a los que trepan por las vallas con púas de Ceuta y Melilla.
La Sala de lo Penal del Supremo se puso a opinar sobre sus decisiones, lo que parece fuera de lugar en su cometido, al decir de algunos expertos.
Pero lo que sí dijo sobrecoge.
Los líderes independentistas hicieron *un simulacro* que engañó a los ciudadanos.
Un simulacro.
Y eso está penado con entre 9 y 13 años de cárcel.
A Carme Forcadell, como presidenta del Parlament, la sentencian a 11 años y medio de cárcel porque tuvo la responsabilidad principal a la hora de aprobar *el cuadro normativo* inconstitucional que creó una legalidad paralela e hizo posible todo lo demás.
Primer caso en la historia democrática de condena por presidir la aprobación que un tribunal penal considera anticonstitucional.
Cuesta seguirlo.
Los *Jordis alentaron a ocupar los colegios* y a *impedir la actuación policial* el 1-O con sus tuits y declaraciones.
Con sus tuits.
Personas especialmente pacíficas como valora la propia sentencia.
Parece una pesadilla pero es cierto.
No hubo ni violencia organizada, ni rebelión, ni secesión, ni golpe de Estado.
El Supremo aplica la sedición, como explica Ignacio Escolar, una figura penal de origen autoritario y que no aparece como tal en buena parte de las legislaciones europeas.
El Supremo, además, nos obsequia con una teoría sobre la desobediencia civil que convierte en sedición cualquier protesta.
Lejos de derogar las leyes y códigos mordaza con un gobierno declarado progresista, se da un recorte a las libertades civiles francamente preocupante.
La España eterna bulle en este marco.
No deja de ser curioso repetir innecesariamente =en apariencia= elecciones justo cuando se esperaba la sentencia del Supremo y en los duros términos que ha sido rubricada.
Se preveían las consecuencias que iba a provocar.
Fue una sentencia tan anunciada que todos tomaron posiciones.
Para sacar provecho en varias de ellas.
Pablo Casado confirma la afirmación de, entre otros, Oriol Junqueras:
No es justicia, es venganza.
Ofende oír al presidente del Partido Popular decir que *quien la hace, la paga*, conociendo la historia de corrupciones e impunidades de su partido.
Y pedir un cambio en la tipificación de los delitos para que se ajusten a su voluntad.
Por la misma línea andan sus correligionarios.
La afición de la derecha =desde el centro derecha a la extrema derecha= a legislar según sus apetencias parece ser endémica.
Las reacciones han sido las esperadas.
Disturbios, represión policial, heridos, tensión.
Con una amplia cobertura mediática, con retransmisiones dramatizadas en directo, culpabilizaciones al gusto.
A protestar no salen solo los independentistas sino los agraviados por unas *sentencias despiadadas*, según las calificó textualmente el periódico francés Liberation. *Encarcelamientos draconianos* que *avergüenzan España*, según el editorial de The Guardian.
Lo son.
No olvidemos que la violencia la vimos en la represión de octubre de hace dos años.
Los españoles con los ojos abiertos y el mundo entero escandalizado por mucho que la vistan de no se sabe qué modernidad en campañas de lavado.
Es como reacciona la vieja España, la que no arranca al progreso pasen los años que pasen.
Luego están los que se atrincheran en odios y rencores, ideas preconcebidas, y ese destructor *A por ellos* con el que se llenan las tripas muchos de quienes tienen el cerebro vacío.
Un sector de la sociedad que no cree en la democracia, hemos de ser conscientes de ello, de esa gravísima realidad en la que vivimos.
Como aragonesa, descendiente de la Corona que compartimos en la Edad Media nada menos, sé desde niña que *el problema* catalán no nació ayer.
La identidad catalana es una aspiración muy arraigada;
abochorna ver cómo la simplifican.
Fue el rey Borbón Felipe V quien, vencedor en la Guerra de Sucesión contra la Casa de los Austrias, suprimió en los Decretos de Nueva Planta leyes e instituciones de varios territorios, fundamentalmente los que componían el reino de Aragón =entre 1707 y 1716=.
Como harían Casado, Rivera y Abascal ahora mismo, y quién sabe si alguno más.
Y es esa pugna lo que alimenta votos.
En ciertas personalidades, las dignidades y patriotismos auténticos no dejan de ser una presunción.
En esa progresión del uso de los sentimientos de muchos catalanes, Rajoy se aplicó a fondo y logró que el independentismo catalán se triplicara con creces pasando del 15% al 48% en una década.
Más poder para aquello que hagan cuando están en los gobiernos.
Artur Mas también lo utilizó, creyendo que los miles que salían en la Diada lo hacían por él.
Unos más, otros menos.
Ahora, a toda máquina con nuevas elecciones a la vista.
Una cuestión, discrepancia, aspiración, llámenle como quieran, que sin duda habría que resolver de una vez por cauces políticos.
Es un tema muy dificil, de ahí, los años, los siglos que lleva sin resolverse.
Lo piden jueces progresistas, cualquiera con dos dedos de frente y todos los de las dos manos de demócrata.
Por supuesto que no se puede declarar la independencia sin más.
Para eso era necesario un referéndum con todas las garantías.
Con luz y cámaras, que los taquígrafos son ya de los siglos de los que no nos dejan salir.
Con libertad.
Negociando.
Pero había que sacar tajada.
Y hay que seguir en esa tarea que da beneficios.
No precisamente de los más limpios.
La sentencia, con todas las dudas que ofrece, ha ahondado las heridas en multitud de catalanes.
*Casi la mitad no quieren seguir en España.
Más de dos tercios de ellos quieren votar.
Una mayoría absoluta =superior al movimiento independentista= cree que el juicio no ha sido justo y que los presos deberían estar en libertad*, informa el artículo del director de Eldiario.es.
El caso es vivimos en una Europa, organizada en Unión, que cierra los ojos hasta a genocidios.
O en una España que viene usando las poltronas de gobierno para intereses particulares, incluidos los saqueos de las arcas públicas.
Una que soporta la degeneración de instancias esenciales para la democracia, amiguismos, privilegios, trapicheos sin fin.
Con una parte de la sociedad que se ciega como si le pusieran la bandera por capote =como hacen algunos especímenes en su delirio=.
Todo eso y más pasa.
Incluyan la estupefacción, el dolor de ver que, de las dos Españas, casi siempre lleva las riendas la misma.
Así pasen los días, los meses, los años, las décadas, las centurias.
Y en ese marco, unos políticos van a estar años encarcelados por hechos que en nada se parecen a los auténticos destrozos de la convivencia.
Nos dicen, en la típica trampa española, que pronto saldrán con permisos, que hasta podrían ser indultados por las leyes catalanas =que por cierto los políticos de la amplia ala ultra querrían cambiar también=.
Pero no, la justicia exonera.
Sus familias merecen esa justicia.
Entre rejas y con estigma de condenado sin haber usado =que lo vimos= la violencia que la injusticia insoportable aplica.
Siempre que los Tribunales superiores, europeos, no le pongan remedio.
Que por algo se hacen *promos* en idiomas foráneos.
O que la política de verdad, limpia y abierta, se decida de una vez a buscar una solución.
Rosa María Artal
Ésta postura no es solo propia o de un grupo de opinólogos de poca monta;
-Once diputados del Parlamento británico han presentado una moción en la que exhortan al Gobierno para que éste plantee ante las instituciones pertinentes de la UE el inicio de un procedimiento en virtud del artículo 7 del Tratado de la Unión Europea, *en respuesta a las acciones del estado español en relación con la crisis catalana*, según indican en el propio texto.
Señalan que las acciones también incluyen *el enjuiciamiento y la sentencia de contra políticos catalanes y líderes cívicos*.
Consideran que *existe un claro riesgo de que España haya cometido una violación grave y persistente de los valores fundacionales de respeto de la libertad, la democracia, la justicia y los derechos humanos de la UE, descritos en el artículo 2 del Tratado de la Unión Europea*.
Los promotores de la moción son Hywel Williams, Jonathan Edwards, Liz Saville Roberts, Ben Lake, Brendan O’Hara, Douglas Chapman, y por el momento se han adherido David Linden, Ronnie Cowan, Tommy Sheppard, Gavin Newlands, y Alison Thewliss.
La editorial de Rosa María Artal citaba una *campaña* lanzada por el Socialismo;
-Después del vídeo difundido este lunes donde los ministros elogiaban la fortaleza de la democracia española, el Gobierno ha difundido este martes un nuevo vídeo de la campaña *Spain, everybody's land* =España, la casa de todos=, donde se pueden escuchar los testimonios de *historias reales* de diferentes extranjeros que viven en España y su opinión sobre la calidad de vida del país.
Todo son elogios.
Efectivamente el Sr. Sánchez emitió un twit que...parece más del tipo neoliberal que de un Socialista;
No me cabe la menor duda de que los españoles tienen que estar orgullosos de su Nación, como cualquier otra que goza también de luces y virtudes, algunas con lo que otras no tienen y viceversa, España es una gran país, sobre su *Democracia moderna, consolidada y diversa* tengo serios reparos ya que no es moderna si tengo en cuenta que es una Monarquía Parlamentaria y las monarquías no son nada modernas.
*consolidada*..mmm...las infructuosas elecciones últimas no muestran consolidación alguna, y esa *diversidad democrática* a la cual alude Sánchez no parece verse reflejada en un sistema electoral que no permite gobernar plenamente de acuerdo al voto ciudadano, que exige que el que gane gobierne, el que pierda haga sana oposición, y punto.
Sobre *seguridad, talento, empresa, ciencia, deporte y cultura* no tengo ninguna duda, ahora bien sobre *sanidad y tolerancia*...también tengo mis reservas.
Me sorprende francamente la clase de Socialismo que expresa Sánchez....
Y tal como decía en otro post de días atrás, si bien la cuestión de Catalunya no es un tema menor y merece una resolución que es política y que debe darse en algún momento para terminar con algo que está siendo usado como cortina de humo, OTRAS deberían ser las cosas que al ciudadano español *le ocupen prioritariamente*.
Aquí tenemos el claro ejemplo de qué es lo que el poder real no quiere que el ciudadano español exija ni reclame;
-El Fondo Monetario Internacional pone las luces largas sobre la economía española.
Y muestra que los problemas que le afectan =paro y deuda pública, sobre todo= van a continuar por un largo periodo de tiempo.
En los próximos cinco años, la tasa de desempleo no va a bajar del 12% y la ratio de deuda pública sobre PIB va a seguir por encima del 90%, según las previsiones publicadas el martes.
Además, el organismo rebaja su pronóstico de crecimiento para este año.
Pero más preocupantes son las proyecciones del FMI a largo plazo.
Según estos cálculos, el crecimiento del PIB español será del 1,59% en 2024, cerca de su potencial, según los datos extraídos de una herramienta estadística del FMI.
Durante los próximos cinco años la actividad en España se irá posando como una pluma sobre un crecimiento potencial del 1,5%.
Por eso, el organismo reclama reformas estructurales para relanzar la actividad.
Las proyecciones del FMI también ponen de manifiesto los problemas estructurales que arrastra la economía española.
Entre ellos, el alto nivel de desempleo.
Dentro de cinco años, el Fondo espera que la tasa de paro aún siga en el 12,5%, una barrera de la que le costará bajar.
Por último, la deuda pública, uno de los principales indicadores para determinar la salud financiera de un país, seguirá por encima del 90,53% del PIB a finales de 2024
Este lento ritmo de reducción de deuda deja a España con un escaso colchón fiscal para afrontar futuras crisis.
Cierro con una excelente y breve editorial de la columna del Periodista Fernando Borroni emitida en el programa radial *La mañana con Víctor Hugo Morales* que se emite de 9 a 12 por AM 750.
Borroni aborda la situación de Ecuador y cuestiona sabiamente el tipo de democracia que se ha venido instalando en la región, cuestiona la propaganda de ese poder al que refiero cuando estalla una crisis provocada por el mismo poder y sus políticas, siempre extractivistas y empobrecedoras, quitando derechos y libertades para que, cuando el Pueblo toma las calles y exige, el poder se victimice aduciendo que hay violencia.
La editorial de Borroni, viene además también a demostrar que un tema que nos puede parecer ajeno, de ninguna manera lo es.
Fuerte abrazo.
Gilgamesh***
Fuente;
-eldiario
-diario16
-20minutos
-elpais
