* Fuga tóxica en Buenos Aires; negligencia *

Nos desayunamos ésta mañana con la noticia que tiene en vilo a todos los medios de comunicación. Un contenedor almacenado en la terminal 4 del Puerto de Buenos Aires provocó una fuga de pesticida que inmediatamente generó una densa y gigantesca nube de material tóxico. Las primeras presunciones hablan de una filtración en el contenedor a través de la cual ingresó el agua de lluvia que caía durante varias horas sobre la Capital Federal, provocando una reacción química del producto que comenzó a liberarse a manera de hongo, cubriendo vastísimas zonas del centro porteño. Las condiciones climáticas favorecieron que la nube en lugar de elevarse se quedara en la capa baja, a nivel de suelo, lo que provocó que miles de personas comenzaran a ver afectadas sus vías respiratorias y un fuerte ardor en la vista. 

A medida que transcurrían los minutos escenas de pánico se apoderaron de la gente que en ese horario es numerosísima en la zona. El producto químico es un pesticida que tenía como destino de aplicación el ámbito agropecuario, precisamente producciones agrícolas.
Al momento se efectúan masivas evacuaciones de sedes públicas de Gobierno, escuelas y edificios en un radio muy extenso de la ciudad capital. Se decretó la Alerta Sanitaria en toda la ciudad, especialmente en los barrios de Retiro, Balvanera, Recoleta, Monserrat, San Telmo y Microcentrola, la autopista Illia permanecía cerrada, y se suspendieron los servicios del Ferrocarril Mitre, al igual que las líneas de Subtes que debieron anticipar las paradas. Se movilizan cuerpos especiales de Defensa Civil, Prefectura, Gendarmería, Policía, etc. Muchas personas fueron derivadas a centros médicos ante los cuadros de intoxicación. Desde las esferas de Salud Pública se indica que el producto es de baja toxicidad, sin embargo se recomienda permanecer en recintos cerrados sin ventilación para evitar la exposición al pesticida. Se sigue trabajando en la zona del siniestro que a éstas horas se estima como *controlado*. Hasta el momento no hay reportes de gravedad con respecto a las personas hospitalizadas.



***Éste tema de la prevención ante lo que comúnmente se llama accidentes o catástrofes, es algo que siempre catalogué como negligencia. Más allá de los protocolos de seguridad que sin duda existen y funcionan ya que ésta clase de incidentes no son habituales, el reproche sigue siendo el mismo, la mala planificación de los asentamientos urbanos entremezclados con *cosas peligrosas*. Si bien el puerto tiene una sección especial donde se almacenan ésta categoría de productos peligrosos bajo estrictas normas de seguridad, me resulta inconcebible que todo éste complejo permanezca aún en una zona tan densamente poblada, cuando lo correcto sería trasladar éstas unidades portuarias a zonas alejadas de los conglomerados urbanos, al menos éstas secciones donde se apilan y amontonan una enorme cantidad de contenedores. Lo mismo sucede con industrias químicas y de toda índole sujetas a la peligrosidad de lo que en ellas se manipula, que se encuentran enclavadas en medio de las áreas densamente pobladas. 

Siempre estamos a la mano de Dios, y en ésta oportunidad Él ha puesto su mano, porque ésto pudo ser realmente una devastación sin precedentes, tengamos en cuenta que en ésta zona residen alrededor de 3 millones de habitantes en zona urbana y unos 14 millones en zona metropolitana. A pocos metros del puerto se encuentran las tomas de agua que abastecen a la ciudad, como así también los mercados de alimentos que receptan mercancías desde todo el país. Todos los gobiernos han sido responsables por acción u omisión y la falta de participación ciudadana exigente, es lo que ha contribuído a la laxitud de quienes deben hacer la planificación adecuada de éstos énclaves.
Siempre estamos jugando a que no va a pasar nada hasta que un día...pasa.

Estoy a apenas 300 Km al norte de Buenos aires y la llegada de vientos procedentes desde allí es algo muy frecuente y natural, no quiero imaginar si cualquier contendor de ésta peligrosidad explota y provoca una reacción en cadena incontenible ya que en esa área los contenedores se pueden contar por miles, y la nube tóxica llegara a ser 3 veces más grande, con condiciones meteorológicas como las de hoy, que tenemos tormentas severas con lluvia, granizo y fuertes vientos...esos 300 Km de distancia además, están densamente pobladas, es el área centro del país donde se concentra la mayor población de Argentina. Como verán, vivir en la ladera de un volcán, encima de una falla o en la zona costera no son lo único peligroso para nuestra humanidad, la negligencia humana es el peor factor, el que permite que la vida conviva permanentemente con la muerte, pero una muerte que se podría evitar. La codicia, el ahorro, y los negocios parecen prevalecer antes que movilizar el dinero al servicio de la vida.
Gilgamesh***