Ante todo, no quiero dejar pasar la ocasión ya que voy a tratar el tema extraterrestre, de recomendarles visitar el sitio del querido hermano Antonio Uribe.
Como ya sabrán, entre otras cosas Antonio es un investigador del fenómeno OVNI, y es independiente, algo que nos garantiza la objetiva presentación pública de sus avistamientos.
Un día le dije a Antonio que era un privilegiado porque le ha tocado vivir en una zona de México donde los fenómenos de ésta clase abundan, y como si fuera poco, pareciera que ocurren siempre cuando él está mirando el cielo.
Antonio ha estado publicando últimamente fotografías de sus últimos avistamientos y a quienes les interesa el tema, seguramente van a apreciar el trabajo que éste amigazo nos comparte desde hace años en su blog.
Extraterrestres...tema por el cual muchos nos iniciamos en lo que luego sería, un laberinto lleno de puertas.
En mi caso, intentando decodificar el mensaje del Nag Hammadi de hace unos 2.000 años, éste tema encaja a la perfección.
Incluso muchos investigadores como Lash y otros, llegaron a relacionar a éstos seres que hemos catalogado como extraterrestres, con los Arcontes del libro Nag Hammadi.
Sabemos también de las múltiples experiencias de encuentros con seres no humanos que comenzaron especialmente a partir de las guerras mundiales.
Cuando relaciono a éstos extraterrestres con las *entidades* que describe el Nag Hammadi no puedo dejar de pensar en voz alta con todos ustedes.
Teniendo en cuenta especialmente el capítulo *El orígen del mundo*, antes de el Adán de carne y hueso, el Eón llamado Demiurgo creó a su vez una multiplicidad de seres poderosos que colaboraron con él en la creación. Siendo Adán el primer *ser humano* y siendo el gran prodigio del Demiurgo dentro del mundo físico, es dable pensar que somos los únicos seres de éstas características en el Universo.
Y claro, siempre buscamos aferrarnos a cosas que nos indiquen lo contrario, porque tal vez, el hecho de sabernos solos es aterrador, tal como lo dijera Blaise Pascal hace 4 siglos;
*Le silence Eternel de ces espaces Infinis m'effraie*.
*El silencio eterno de estos espacios infinitos me aterra*.
Y uno espera siempre que un día nos desayunemos con la gran noticia de que han descubierto un planeta con vida inteligente, que nos han hecho señales y que entonces...no estamos solos...
Pero lamentablemente de manera *oficial* eso no ocurre, y no ocurre ni siquiera con la impetuosa tecnología con que contamos.
Pero otra vez nos aferramos..y pensamos que no nos dicen la verdad, que lo tienen bien guardado, y que los cuerpos en Roxwell, y que la mar en coche.
Ésta semana he estado leyendo varias noticias sobre nuevos esquemas de búsqueda a cargo de los Astrónomos en algo llamado *Índice de habitabilidad*, estrategia que permita mejorar la búsqueda futura de vida en planetas viables para tal fin.
El tiempo pasa y seguimos esperando, esperamos que por fin una flota de cientos de naves de otras civilizaciones aterricen por fin en la Tierra, y hagan su presentación pública, pero ésto...no ocurre.
Y volvemos a aferrarnos, y nos encargamos de justificar con que *ellos* no van a interferir en nuestra voluntad, porque esos hermanos celestiales respetan nuestra evolución, y para ello han designado a algunos privilegiados *videntes y contactados* como canales de su mensaje.
Pues de ese tema...prefiero no hablar porque considero que cada quien juzga y discierne en base a su estado de razonamiento, estimo que, a éstas alturas de la vida, hay quienes pasan el fino cedazo y quienes no lo quieren pasar.
Entonces, si me baso en el extraordinario testimonio del Nag Hammadi, ¿de dónde salen las naves, los seres, y los mensajes que mucha gente recibe en sueños o en estados de semiconsciencia?.
Las naves, bien podrían ser de orígen humano, puesto que es hartosabido que el mismísimo Hitler experimentaba con modelos bastante sofisticados para ese tiempo.
Incluso, hemos sabido también de objetos que quedaron retratados en cuadros de la antiguedad, o tallados en piedras de milenarias culturas.
Es decir que las naves que los humanos vieron y siguen viendo, son reales, y si descartamos que sean entonces un moderno invento top secret de las potencias mundiales, y descartamos que existan seres físicos basándonos en el Nag Hammadi, tenemos otra explicación posible.
El Nag Hammadi está en lo cierto, hay vida fuera de la Tierra, pero no es física como lo nuestra, ni tienen naves, ni cuerpo dichos seres, *excepto* para entrar en éste mundo que *sí es físico*. Si nos remitimos al hito de Cristo, deberíamos entender que para *entrar* en éste mundo, necesitó munirse de un cuerpo físico para interactuar con nosotros.
Si recordamos las escrituras Sumerias descritas en el Enuma Elish y los posteriores y valiosos trabajos de Sitchin, pensamos que esos *dioses* con-vivían con el humano, pero qué curioso que sus cuerpos tenían características, como ya hemos visto, antropo-zoomórficas =mitad humana mitad animal=.
Es decir que su forma necesitaba de algo que ya existía en la Tierra, un homo y un animal, razón por la cual caemos en la misma deducción; lo que llamamos *extraterrestres* efectivamente lo son porque no pertenecen a éste mundo en el que habitamos, y provienen de *afuera*.
Éstos seres pueden andar entre nosotros sin que los veamos, son incorpóreos, pero necesitan *un cuerpo* cuando deciden interactuar con los humanos.
Sabemos que los avistamientos no suelen durar demasiado tiempo, entonces la pregunta es;
¿porqué se dejan ver o para qué?, pues ahí podríamos pensar que es adrede precisamente para que sigamos albergando la esperanza y todo lo que conlleva sostener la ilusión de que en algún planeta de alguna galaxia hay seres similares a nosotros que en algún momento vendrán a salvarnos de éste mundo tan ruin, o mejor dicho *de un sistema civilizatorio* ruin.
Mientras esperamos, esos seres que se dejan ver por un rato, logran que el tiempo pase y nosotros sigamos esperando y nada hagamos aquí y ahora.
También podríamos pensar que, si hay esferas invisibles e incluso, el cielo azul que vemos no es tal si no fuera por esa especie de artilugio llamado atmósfera..., éstos seres se hacen visibles a nuestros ojos por la misma causa, el velo atmosférico que distorsiona y falsifica lo que en realidad hay fuera de él.
Stephen Jay Gould fue un paleontólogo estadounidense, geólogo, biólogo evolutivo, historiador de la ciencia y uno de los más influyentes y leídos divulgadores científicos de su generación. Gould fué docente en la Universidad de Harvard y trabajaba en el Museo Americano de Historia Natural de Nueva York.
La mayor contribución de Gould a la ciencia fue la teoría del equilibrio puntuado que desarrolló con Niles Eldredge en 1972. La teoría propone que la mayoría de los procesos evolutivos están compuestos por largos períodos de estabilidad, interrumpidos por episodios cortos y poco frecuentes de bifurcación evolutiva. La teoría contrasta con el gradualismo filogenético, la idea generalizada de que el cambio evolutivo se caracteriza por un patrón homogéneo y continuo.
Una de las citas importantes de Gould fué;
*Es probable que estemos solos*.
Éste post no intenta, como muchos fanáticos creen; imponer mi teoría, si algo les pido encarecidamente es que pongan en su larga lista de supuestos, lo que el Nag Hammadi aporta. No lo crean ciegamente si no les convence, sólo guárdenlo y cotéjenlo cuando el tiempo pase. Es una herramienta importantísima para quienes nos sucedan, porque un día ya muchos no estaremos aquí para decirles *¿se acuerdan?*, por eso la posta es lo que va a ayudar a quienes dediquen su tiempo a compartir en un futuro lo que piensan con el abono de todos los que antes pensaron.
Y sé también que así como tantos lectores hay, tantas teorías serán posibles.
Sería imposible evolucionar sin el enorme esfuerzo y gratitud de quienes nos dejaron sus pensamientos, muchos eh..., y el trabajo más difícil siempre es de quienes tienen en sus manos múltiples herramientas para depurar, filtrar y sacar conclusiones lo más cercanas a la verdad.
OVNIS.s, extraterrestres, entidades..., la buena noticia es que en verdad no estamos solos, y si hay seres que pueden existir para perjudicarnos, eso quiere decir que también los hay ...para beneficiarnos.
Gilgamesh***
Fuentes;
-losovnisddt
-sjgarchive
-astrobio
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