jueves, 25 de febrero de 2016

* Divagando de entrecasa *

***Muy buen JUEVES para todos.

Se preguntarán ¿porqué jueves con mayúscula? pues por nada especial, solamente un ejercicio chistoso hacia mi mismo.
Verán.., la situación viene bastante dura y de vez en cuando tomarse las cosas con humor es un sano ejercicio.
Todo nace de un comentario que me dejara el amigo Lehaim, y es la segunda vez que el tipo ...jajaja..me avisa que he confundido los días de la semana.

¡Y es cierto!!! jajajaja...¡gracias amigo!!!, pero no vale la excusa de que en tu caso es por esos *humos*, jajajaja...porque si bien yo no me veo nublado por esa clase de humos, podría hacerte una lista enorme de la cantidad de cosas por las cuales me está tocando ocuparme por éstos días.

Yo creo que cuando nos tocan momentos en la vida donde debemos poner suma atención en múltiples objetivos nos pasa ésto...el *bocho* nos juega malas pasadas con eso de *la memoria*.



Y agradezco a Lehaim su excelente humor, en lugar de molestarme o enojarme como es la tendencia general, yo me lo tomo así, y es más, invito a que ante cualquier desatino de ésta clase, se me notifique...jejeje, al menos para ir dándome cuenta que tal vez el problemita pueda obedecer a una cuestión que...jajaja...¡mama mía!..podría ser genética, y ante eso.. ,bueno...no habrá más remedio que convivir con el famoso y tan temido *alemán*.

Yo tengo un familiar a quien amo profundamente que ya pinta los 62 y a veces se olvida de algo que le dije o repite algo que ya me dijo, y cuando se lo remarco la reacción es de enojo...jajaja..., parece que aceptar que la memoria nos falla es como un pecado o un deshonor, cuando en realidad deberíamos tomarlo como lo que es...¿no? el desgaste que los años van haciendo a nuestra corruptible materia.
No puedo olvidar cuando un día, entro a la casa de mi viejo y siento un olor a gas muy fuerte, de inmediato detecto que la hornalla de la cocina ...estaba abierta pero no encendida.

Le pregunté al viejo ¿qué pasó Papá, ¡¡dejaste la hornalla encendida!!?...y el pobre viejo se encogió de hombros..con sus ojos abiertos a más no poder y me dijo;..*que yo recuerde...no, no la prendí hijo..*.
Francamente ese día me quedé muy preocupado..pensando en que ese suceso pudiera repetirse y no poder tener la suerte de detectarlo a tiempo, pero ahí...empecé a tomar dimensión de lo que significan esas desconexiones misteriosas de nuestro cerebro, que a uno le van a llegar algún día.

Por eso amigo Lehaim, yo espero que mis confusiones de éstos días sobre los días en curso no sean una temprana señal de que *lo genético*...tenga algo que ver.
Insisto en que creo, que estoy tocando varios instrumentos al mismo tiempo por éstos días, al menos...jejeje...quiero creerlo y espero que sea solo eso, pero si un día de éstos ustedes notan severos contrastes en algún escrito, vuestros avisos serán bien recibidos...jajaja...

Sé que estamos atrasados con la zaga del estudio de los Cátaros, por ejemplo, y eso no se debe a que me olvidé, simplemente que estoy súper-atareado además de que los temas de la realidad diaria se anteponen a algo que se puede postergar.



Hace tiempo que no hablo de la *cocina* del blog, tal vez no están al tanto pero vamos a cumplir en Abril 5 años...., no podía creer cuando el otro día vi en mi panel de control =o descontrol= que escribí en esos 5 años ya...3.000 posts o entradas..., que en semejante cantidad de texto uno puede llegar a repetir muchas cosas, incluso a perder el órden a través de las famosas etiquetas o palabras claves, y bueno...es probable. Probable también es que en tantos y tantos temas o comentarios, me hayan quedado pendientes muchas cosas o muchas respuestas, y pido mil disculpas, no es desinterés ni falta de consideración, ¡es que es muchooo!!! jajaa...

Cuando se inventó ésto de que una persona común y corriente tuviera la posibilidad de escribir y compartir sus cosas, creo que mucha gente no supo reconocer la enorme diferencia entre lo que era habitual, es decir, los sitios de noticias, que en realidad son empresas periodísticas que cuentan con una organización detrás.
Hacer ésta clase de sitio que hago es un poco como tocar todos los instrumentos, aquí no hay nadie que me traiga una hoja con las últimas noticias, para que yo lo lea al mejor estilo de una Radio, ni que me tengan preparado un guión para que diga lo que otros previamente prepararon.

Y partamos de la sencilla base de abrir un blog...que no es lo mismo que abrir un muro en google+ o incluso tener un Face o un Twiter, un blog es algo complejo, y mucho más para gente de mi edad =suena a viejo sí...jeje= que no nació con una PC al lado de la cuna.
Y otra gran ventaja o incentivo con que cuentan los llamados *profesionales* de la Comunicación es que a cambio de su esfuerzo reciben al menos una paga.
Entonces abrir un blog, entender su funcionamiento, manejar ciertos códigos de edición, sea de imágenes o textos, se acompaña de además... llenarlo..., darle vida, y si a eso le sumamos que en los últimos tiempos el editor debe *interactuar* con los lectores...¡¡¡pufff!!! menuda tarea ¿no?.

El tipo del noticiero llega al canal, lo maquillan, lo visten, le dan la hojita con lo que debe anunciar en la media hora u hora entera de lo que dura el noticiero, termina y se va a su casa. El redactor de noticias hace su investigación cómodamente en su oficina, redacta, deja el texto al encargado corrector, se publica, y se va a su casa, si la gente deja comentarios al pie de su noticia ni se molesta en responderle a los 40 o 50 lectores que generalmente se agarran de los pelos, mientras el redactor los lee al día siguiente para ver la repercusión de su nota, y le importa muy poco si lo insultan o lo elogian.

A fin de mes pasa a cobrar su sueldo y así la cosa.
Ésto de un blog como éste es otra cosa, difícilmente puedan imaginar que un tipo llega a su fábrica, levanta la persiana, enciende la máquina y produce piezas, después va a su oficina y hace el balance, luego sale a la calle a ofrecer su producto, al otro día regresa a la fábrica, barre los pisos, y empieza de nuevo la rutina...jeje...es un imposible.
Por eso, hacer un blog y que el tiempo pase a uno le enseña que si no tiene fin de lucro, uno puede darse el gusto de hacerlo aún con errores, con algo de desórden, con faltazos, en fin...uno lo hace sin el peso de la obligación, ni de un jefe que te esté soplando la nuca controlándote, ni de billetes que no existen, ni del qué dirán los lectores.

Si uno escribe lo que realmente siente y piensa sin tratar de quedar bien con todos, uno sabe que genera conflictos y divergencias, que del otro lado habrán quienes sienten afinidad y otros que sentirán rechazo, y bueno...después de todo no entenderán que uno hace ésto por convicción, y que si comete errores uno es como ese tipo de la fábrica que les ejemplificaba antes y que seguramente...dejará muchas cosas libradas al azar de sus propios errores.



Cuando tomé la decisión de hacer éste sitio me propuse que tuviera sentido, poder utilizar un canal de Comunicación para tratar temas que generalmente los medios tradicionales no tocan, por ahí pasaba mi interés, porque he pensado que el poder romper con esos cerrojos informativos sería un forma de contribuir con tanto anhelo que muchos tenemos de un mundo distinto.
Lograrlo o no, no está en cuestión, ya que mis amigas las hormigas...si se detuvieran a ver si solas pudieran hacer la enorme tarea de sostener al hormiguero que las mantiene vivas...ufff...renunciarían antes de siquiera... empezar a andar.
Siempre voy a recomendar que en lo posible, alguna vez intenten hacer un blog como para aprovechar la ocasión de experimentar lo que se siente.

A mí me reconforta hacerlo, y si debo o debería reflexionar junto a ustedes que ficticiamente están *del otro lado*, diría que en el caso de los blogs similares a los de éste formato, nunca vean en el editor a alguien que está *por encima de*, porque sino...terminamos cayendo en la idiotez del cholulo o fanático que va al fútbol y que dice *dar la vida por su equipo*, o el artista por el cual se dejarían humillar por un autógrafo.

Tampoco ver al bloguero como el puchinball sobre el cual descargar la ira reprimida que generalmente, siempre necesita de un fusible externo para aplacar esos monstruos internos que a la vista...se ocultan.
No soy ingenuo al pensar así ya que hoy las redes sociales dejaron de tener corazón...y raciocinio para convertirse en instrumentos de estrategia social, de marketing, de consultorios psicológicos gratuitos o de bares virtuales para aplacar las desventuras de un mundo cada vez más egoísta y cruel.

Lo sé, pero bueno...yo sigo apostando a aquellas personas que se revelan a dejarse usar, y que puedan entender que alguien puede pensar distinto sin que uno u otro tengan el derecho a *combatirlo*, sino por el contrario a disentir inteligentemente tomando lo que del otro pueda ser útil sin tener que abandonar lo que a uno le convence, total...quien se siente convencido de su idea no siente la necesidad de perder su tiempo en lo que no le convence...¿verdad? y mucho menos perdiendo energías peleando con otros a los cuales definitivamente no va a convencer.

La tarea de escribir como lo hago tómenlo como una forma de pensar en voz alta, que para nada intenta adoctrinar ni afiliar absolutamente a nada que exista, sino más bien compartir puntos de vista que les sume, o incluso restándoles...también les será de utilidad para hacer vuestro propio discernimiento.
Así que bueno amigos...el llamado de atención del querido Lehaim ha sido un excelente disparador que he recogido con alegría y humor y que me ha servido para volver a hablar de éstas cosas de entrecasa que de vez en cuando son necesarias compartir, especialmente cuando me sorprende ver que han pasado 5 años de mi vida y de las vuestras, sentándonos a compartir un montón de cosas de las cuales creo, todos hemos sacado algo positivo.

Y quién sabe...jeje...si lo genético prevalece un día, no vaya a ser cosa que en lugar de escribir sobre todo ésto se sorprendan al ver que hablo de alguna poción que les venderé en cómodas cuotas para que logren llegar al paraíso...jeje..., en ese caso...apiádense de mí y no regresen nunca más...jeje.

Gilgamesh***

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