* Entre vientos y lluvias; en alerta meteorológica *

***Muy buenas noches estimados lectores, aunque en nuestro vasto mundo, para otros será buen día. Les comento que he tenido inconvenientes para postear hoy en el horario habitual del mediodía como así también ahora. Estamos en ésta zona bajo alerta meteorológica severa. Y vaya si lo es, porque ha llovido mucho y además unos vientos infernales que no recuerdo haber padecido en ésta zona del país. Ha habido que hacer un trabajo extra destapando rejillas y cloacas llenas del polen y las semillas de los árboles que en ésta época sueltan sus esporas. Prácticamente nada de tiempo para estar informado, mas que dedicar el tiempo a la luz de los acontecimientos.
Luz, que arroja como resultado una ciudad con anegamientos en zonas bajas, accidentes mortales de tránsito, caída importante del arbolado público y voladura de techos precarios con caída de algunas antenas de radio. 

Rachas de viento de hasta 40 km que para nosotros es una barbaridad en ésta zona, que suele sentir los efectos cuando hay *sudestada* como le llamamos aquí, pero nunca como hoy, cuando parecía que mi ventanal iba a estallar. A la tarde alguna actividad eléctrica intensa que me llevó a apagar los aparatos eléctricos, como lo es la PC. Hay áreas del país que la están pasando mucho peor, y en ellos concentro mi energía mental. Tarde en la cual apenas pude ver que el Sol ha estado para los instrumentos, plano. Sin embargo, lo que viene por el oeste parece ser muy grande tal como veo en ésta actual imágen, una típica explosión ultravioleta como así también un enorme penacho en el borde de la corona al norte central que asemeja a un gran árbol de fuego;



Sabrán disculpar ésta ausencia involuntaria que obedece a algo que venimos reiteradamente tratando aquí, el estrago climático, que en realidad es la visión de quienes ven el medio vaso vacío...porque en mi caso, éstas cosas son claros indicadores de que un cambio es inminente y no será para mal. Ya conocen mi parecer.
Les dejo un gran afecto y el agradecimiento por permitirme acompañarles cada día y que ustedes me otorguen su tiempo. Rescato de éstas cosas climatológicas una reflexión. Los miedosos no habrían ni siquiera escuchado el alerta preventivo de tormenta severa, se habrían quedado reptando como una mantis religiosa sin hacer nada y el caudal de agua les habría sorprendido brotando a chorros por las rejillas de el baño y en toda la casa. 

Estar prevenidos no nos asegura nada pero al menos nos da un plus ante una amenaza. Salir a limpiar las hojas acumuladas en torno a las canaletas, desagues, y rejillas sirvió para que el caudal enorme de agua, se fuera mansamente por las cloacas. Creo que estar preparados para una contingencia eventual no implica tener todo garantido, y lo mismo sucede con todo lo que hablamos aquí siempre. Uno confía en su propia creencia, en su dios o en lo que sea, pero mientras tengamos un cuerpo que nos lleva y un techo que nos cobija y personas que dependen de nuestra existencia, a dios hay que colaborarle. 

Nada de paranoias tales como aquellos que creen que van a salvarse porque están preparados, y acumulan y acumulan víveres, y se arman hasta los dientes contra los fantasmas que no han llegado, pero sí evaluar que en éste tiempo uno puede irse de éste mundo repentina e irremediablemente, como también puede quedar para seguir los planes de la Creación. No a la paranoia, pero sí a la prevención necesaria que es un instinto tan natural como el mismo miedo.
Que pasen una buena noche.
Gilgamesh***