*Mejorar*..palabra que hoy es utilizada por el poder mundial en pro de...¿de nosotros?...¿del planeta? pues no..
Todo tipo de intromisión tecnológica tiene como objetivo que algo se más rentable..
Sin importar el posible daño y aún.. certero daño...lo importante es *producir* lo más rápido posible y con el mínimo costo.
Les dejo como buena lectura un excelente informe sobre la manipulación genética en el reino animal...como para ir entendiendo porqué el desprecio por la vida y el amor a lo material generado a través del poder que da el dinero, es el ADN de los arcontes;
-La naturaleza en todo su esplendor se manifiesta y adopta diversas formas. Más allá de la raza humana, fueron creadas también otras especies vegetales y animales para convivir en el planeta Tierra. Pero ¿qué pasaría si esta fantástica obra se comenzara a distorsionar y los animales comenzaran a ser mutantes o las plantas comenzaran a ser todas híbridas? En la década de los 80, el hombre comenzó con la manipulación genética en laboratorios tratando de *mejorar* las especies o brindarles alguna nueva utilidad, desbaratando así =en cierta manera= la obra perfecta de la *creación*. Esta experimentación no solo continúa hasta hoy sino que se potencia cada vez más.
¿Qué son los animales transgénicos?
Los animales transgénicos son aquellos que han sido modificados genéticamente, añadiendo genes foráneos de manera deliberada, para modificarle alguna característica, añadirle alguna funcionalidad o para bloquear la expresión de algún gen.
Hay una gran cantidad de precedentes, como por ejemplo la modificación genética de un mosquito en Brasil para reducir la población de un portador de enfermedades =Aedes Aegipty= y así evitar la propagación del dengue y del zica, método cuestionado aún en la actualidad.
Hace aproximadamente 20 años se creó el primer *Frankestein* de laboratorio, un ratón gigante al cual se le incorporó a su genoma la hormona de crecimiento humana.
Actualmente, existen ratas, pollos, conejos, cerdos, vacas, ovejas, cabras, codornices y peces transgénicos, aunque los que encontramos en mayor número son las ratas y ratones, que representan un 95% del total.
Supuestamente fueron creados para fortalecer el sistema inmunológico del animal y hacerlo resistente o inmune a ciertas enfermedades para después replicar estas características en el género humano y -en otros casos- se les implantan hormonas del crecimiento para que crezcan más y a mayor velocidad.
Sin embargo, la creación y el uso de animales transgénicos incluyen varios aspectos y repercusiones negativas. Algunas de ellas a considerar son:
Alteración del orden natural
Podría decirse en este caso que hay una cuestión de índole ética o moral. Algunos activistas de los derechos de los animales declaran que la manipulación deliberada del ADN tiene un impacto negativo sobre la integridad física del animal.
Asimismo también es tema de debate en los ámbitos espirituales o religiosos ya que esta experimentación altera el orden natural del universo. Los creyentes consideran que existe una autoridad superior, ya sea Dios o la naturaleza, que es el verdadero arquitecto de toda la vida sobre la Tierra y que el hombre se está entrometiendo en un territorio donde no tiene ni el derecho ni el conocimiento profundo de la verdadera creación.
Explotación de los animales
Los animales que han sido criados deliberadamente con defectos genéticos pueden padecer problemas y sufrimientos. Las modificaciones genéticas que introducen cáncer y otras enfermedades pandémicas a los organismos de los animales tendrán efectos residuales que afectarán su salud durante toda su vida y en algunos casos incluso la especie muere como resultado de la aplicación.
Según el investigador Chris Stevenson, la industria farmacéutica ha promovido la explotación de una gran cantidad de especies animales. Se han criado pollos transgénicos con hormona paratiroidea para el tratamiento de la osteoporosis, se ha utilizado ganado para producir terneros con niveles elevados de proteínas antibacterianas y se ha creado un factor de coagulación humano a expensas de la utilización de leche de cerdas, entre otras intervenciones.
Desequilibrio en los ecosistemas
De acuerdo al Dr. Eduardo Rodríguez Yunta , la introducción de animales transgénicos puede provocar desequilibrios en los ecosistemas si poseen ciertas ventajas sobre especies silvestres. Peces y mariscos producidos por ingeniería genética pueden suponer riesgos adicionales ecológicos, debido a que organismos acuáticos tienen la capacidad de sobrevivir en la naturaleza, moviéndose fácilmente desde un ambiente controlado a uno natural y podrían competir con las especies nativas suplantándolas y degradar ecosistemas por el alto grado de consumo de alimentos.
Peligro para otros animales o plantas
La posibilidad de liberar animales transgénicos a la vida silvestre puede tener un gran impacto negativo sobre las especies naturales, además del ecosistema. Los animales que portan defectos transgénicos, agentes patógenos, virus y bacterias constituyen una amenaza grave para otros animales e incluso para las plantas.
Los animales alterados genéticamente que se cruzan con otras especies pueden crear híbridos y mutaciones que pueden infectar el patrimonio genético completo de una especie, llevándolo a la aniquilación y posiblemente la extinción. Solo sería necesaria una hembra preñada para comenzar una reacción de reproducción fuera de control y el impacto podría ser muy rápido.
Animales transgénicos para consumo humano
Actualmente, no existe ningún animal transgénico cuyo consumo esté autorizado. A pesar de ello, se está investigando con este objetivo. Científicos de la empresa norteamericana AquaBounty Technologies han producido una especie de salmón transgénico que crece el doble que un salmón normal y a mayor velocidad.
Este salmón transgénico, llamado *AquAdvantage*, contiene la hormona del crecimiento del salmón Chinook. El gobierno canadiense ha autorizado la producción y exportación de huevos no fértiles de este pez transgénico. A pesar de que su producción y venta para consumo humano no estén autorizadas, es un paso más cercano hacia ese propósito.
Al mismo tiempo, se está trabajando en la cría comercial de peces transgénicos para el consumo en todo el mundo. Para evaluar los posibles riesgos, científicos de la Universidad de Gotemburgo =Suecia= estudiaron los animales transgénicos por encargo de la Unión Europea.
El enfoque central estaba en las consecuencias que puede tener la liberación accidental de los peces transgénicos sobre las poblaciones naturales. Los resultados del estudio son alarmantes: los peces transgénicos =una vez liberados en el medio ambiente= podrán desplazar a las especies autóctonas.
Sería una consecuencia totalmente lógica ya que la variedad transgénica fue creada para ser más resistente que las naturales.
Los genes de otras especies con los que cuentan los peces transgénicos hacen que también toleren temperaturas más frías. Además, su crecimiento más rápido les brinda ventajas en la competencia por los alimentos y el hábitat. Por último, los peces transgénicos resultan inmunes contra determinados venenos gracias a la manipulación de sus genes.
Esto, a su vez, es un problema para el consumidor ya que podrían llegar a comercializarse peces altamente contaminados.
Una vez más, la mano del hombre irrumpiendo en la naturaleza *queriendo ayudar* y obtener beneficios puede provocar un efecto contraproducente y nocivo para la salud y el medio ambiente. La manipulación genética es un arma de doble filo que ha demostrado =hasta el momento= más riesgos que ventajas.
Gilgamesh***
Fuente;
-wormsargentina
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