***Último día de Febrero, que sea bueno para todxs.
Mientras el Sol y su pequeña mancha chispeante no logra subir del nivel B, y mientras el planeta se sacude a más no poder con sismos a granel que van a marcar un récord, bajamos un cambio.
Toda persona en su vida tiene hobbys, o gustos por ciertas cosas más que por otras, en mi caso y en el de muchos que vienen a leer lo que escribo o a escuchar lo que digo, nos une la afición por el clima espacial, que nos llevó después a interesarnos por el clima terrestre, y que nos invitó también a hacernos preguntas sobre nuestra existencia, los misterios, y así, podríamos decir que nos interesan muchas cosas porque somos eternos buscadores y en la búsqueda aprendemos a descubrir qué tienen los otros para decir, qué piensan sobre lo mismo que nosotros observamos.
Y últimamente debo decir que lo que estoy *viendo* que algunos otros dicen...alcanza unos niveles de locura que parecen...increíbles.
Ya sabemos que lo morboso vende, difícilmente alguien que planifique un negocio comunicacional descartará el morbo porque es como una flor para las abejas.
Y el morbo aglutina a los morbosos, unos lo venden y otros curiosamente lo compran, o lo consumen gratuitamente.
Se están elaborando una teorías que...son disparates totales, quienes se cansaron de esperar a los Pleyadianos o a un planeta que sólo existe en su imaginación, hasta los que creen ser elegidos para un arrebato que nunca ocurre, o los que van a tomar un café con los extraterrestres y regresan para contar lo que tienen para decir, y ni hablar de los apocalípticos que se regodean mirando el almanaque para adivinar en qué día todo va a estallar creyendo que ellos lo verán cómodamente por TV mientras comen palomitas de maíz..., todos y absolutamente todos recorren sitios de internet buscando una nueva teoría, se la compran a quienes viven de vender morbo, y van cambiando de piel, como esas que serpentean..
Y nada cambia para los que viven *esperando*, muchos de ellos que creían, iban a ser televidentes de tragedias ajenas, se han muerto bajo los escombros luego de un terremoto, o los partió al medio un rayo cuando acampaban. Es decir que toda señal que les indique algo que esperan, los pone muy locos..cuando nada pasa, y si en verdad hay señales no entienden que forman parte de algo que va mucho más allá de nuestras cortas vidas, y se llama Ciclo.
Algunos lo imaginaban como enormes períodos de tiempo y les llamaron Eones, en definitiva, nuestra breve mirada es apenas de breve como el corto tiempo que nos toca vivir.
En tiempos como éste de una transición cíclica en materia de clima espacial, y por ende terrestre, nos toca ver cosas que no imaginábamos, un Sol durmiente, un clima desbocado, volcanes despertando, y la gran bola en la cual estamos inevitable y físicamente imantados, temblando y mucho.
Y nos cuesta decía, entender que todo eso no tiene nada de especial sino que forma parte de algo que siempre ha ocurrido en éste planeta.
Muchas cosas que estaban desaparecen, por ejemplo un volcán que se derrumba en sí mismo, o una isla que emerge donde antes sólo había agua.
Tiempo final para muchas cosas, tiempo nuevo para otras, y todo pasa, con o sin nosotros.
Entonces nos damos cuenta que la morbosidad, por muy entretenida que parezca, nos distrae de las cosas en la cuales no deberíamos dejar de pensar, y en éste caso de los cambios dramáticos que podríamos englobar en lo geológico o climático, o planetario, en lo que deberíamos pensar es en evitar en lo posible, que tantísimas personas vulnerables a éstos cambios los padezcan, pues si bien en gran parte es algo imposible, mitigar daños siempre será lo único y mejor que podamos desear y hacer.
Por eso dentro de lo comunicacional, saber qué pasa con el Sol, los sismos, los volcanes, es además de una afición, una manera de hacernos pensar en otras cosas que van más allá de lo meramente material.
Tenemos derecho a sorprendernos con lo que nos toca hoy como testigos, apenas un fotograma de un video de millones de años, y tenemos derecho a interpretar y sentir como querramos lo que observamos, y podremos coincidir en algo, en mucho o en nada, con lo que otros piensen sobre lo mismo que nos toca ver, pues nos une entonces el coincidir y nos desune el discrepar, y cada quien elige de que lado de la raya al medio se ubica.
Peinados andamos en un revoltijo que si no detectamos a tiempo, nos va a dejar pelados a todos.
Por eso cuando me doy una vuelta fuera de ésta casa virtual, lo que me alarma es el nivel de morbo que se construye no sé para qué, exceptuando al que se crea por dinero, porque a ese ya se lo identifica inmediatamente, y es por eso que en lugar de difundir y premiar a los morbosos quiero difundir a los virtuosos, y en éste caso, elijo a José Luis Valencia Castañeda quien describe la situación geológica evitando caer en el morbo, y con quien coincido plenamente en sus conceptos, especialmente en el párrafo final de su artículo.
Abrazo.
-La impresionante cantidad de sismos que están pasando en nuestros días, nos han hecho pensar que efectivamente no es la simple consecuencia de la acción del hombre, es algo más que ya está destinado a ser, y será debido a los ciclos propios de la naturaleza, de la tierra y del universo, la acción del hombre solo lo hace ver más dramático y hasta nos hace sentir culpables de que todo esto pase y en cierta medida lo somos, pues aceleramos un proceso que era más lento y que es propio de la tierra y del universo.
La semana pasada sucedieron 25 temblores mayores a 4 grados en México y algunos más en el resto del mundo, todos los temblores acontecidos y que están aconteciendo en este momento, están ubicados en el perímetro del cinturón de fuego, el cual pasa por México en toda la costa del Pacífico, termina en la tierra del fuego en Sudamérica hacia el sur, hacia el norte se va por toda la costa de Estados Unidos, sigue por la costa de Canadá, continua por la costa de Alaska, allí hace el arco y baja por la costa de Rusia, por Japón, Taiwán, las Filipinas, Las Marianas, y siguiendo el perímetro de Australia, donde se pierde o termina.
El cinturón de fuego o también llamado anillo de Fuego es una frontera de placas tectónicas ubicadas en el Océano Pacífico, en las costas de América y Asia, en donde existe una constante actividad sísmica y volcánica, su desarrollo es de 40, mil kilómetros y tiene forma de herradura, y dentro de esta área se ubican el 75% de los volcanes existentes en el mundo y se producen el 90% de los terremotos del mundo, México está considerado como uno de los territorios más peligrosos del cinturón de fuego, peligrosos para vivir, debido a la cantidad de terremotos que están sucedido últimamente.
De las siete zonas con mayor actividad sísmica y volcánica, que están activas al día de hoy, la zona de las costas mexicanas entre Chiapas y Sonora es la más activa y peligrosa por la cantidad temblores y cantidad de poblaciones que pueden afectar estos, seguida por la costa Chilena, por el Caribe, por las fronteras entre Canadá y Estados Unidos y las Islas de Papúa Nueva Guinea.
En el anillo de fuego se encuentran la mayoría de los volcanes que han hecho erupción actualmente. En México tenemos 17 volcanes que se consideran activos y peligrosos por la cercanía a los centros de población. Por orden de peligrosidad por su actividad son:
Popocatépetl cercano a la ciudad de México, De Fuego en Colima, Tacaná en Chiapas cerca de Tapachula, Chichón en Chiapas casi frontera con Tabasco, Ceboruco en Nayarit, El Bárcena en las Revillagigedo, El Pico de Orizaba en Veracruz, Evermann en Isla Socorro, en las Revillagigedo, el Nevado de Toluca, en el Estado de México, El Jorullo cerca de La Huacana, en Michoacán, El Paricutín en Michoacán cercano a Uruapan, el San Andrés en la sierra de Ucareo en Michoacán, El Cerro Prieto en Baja California norte, Cerro Pelón o Cerro Chino en el Bosque de la Primavera en Jalisco, El Villalobos en las Revillagigedo, El Derrumbado Rojo en Zacatepec Puebla y El San Martín en los Tuxtla, Veracruz. Algunos tienen actividad constante como el Popo, el de Fuego y el Tacaná.
La sucesión de temblores, toda ella, se ha concentrado en zonas donde existen volcanes, los cuales han estado en constante actividad o han empezado a despertar, debido al movimiento tectónico de las placas y la propia concentración de energía, los volcanes que han estado haciendo erupción en este año 2018 y parte final del 2017, son:
Popocatépetl, actividad ininterrumpida.
Volcán Sinabung, Sumatra Indonesia, 19 de Febrero de 2018, había estado dormido por 400 años, despertó en 2010.
Volcán de fuego de Guatemala el 2 de Febrero de 2018
Volcán Mayón de Filipinas el 24 de Enero de 2018
Monte Shirane Japón, 23 de Enero de 2018
El Reventador en Ecuador el 21 de Diciembre de 2017
Volcán Agung en Bali, el 27 de Noviembre de 2017
Los científicos consideran que hay volcanes propensos a hacer erupción en 2018, debido a su constante actividad, y proponen que estemos preparados para ver el espectáculo, desde luego, lejos de pensar en un espectáculo, debemos pensar en las medidas precautorias que deben tomar los habitantes de las faldas y zonas de influencia, debemos pensar en que no son necesariamente los únicos, pero si los más propensos y que algún otro puede iniciar actividad, los señalados como seguros de hacer erupción en 2018 son los siguientes:
Popocatépetl, cercano a la Ciudad de México.
Kirishima, Japón.
Monte Merapi, Indonesia.
Volcán Öræfajökull en Islandia.
Volcán Villarica, Chile.
Volcán Kilauea, Hawái.
Yellowstone, Estados Unidos
Si se revisa un mapa de temblores, junto con un mapa de ubicación de volcanes, se observa claramente que el comportamiento de los sismos está asociado a actividades volcánicas, hasta el día de hoy y desde el año pasado que se destaparon los seísmos con gran prodigalidad, se han estado sucediendo en zonas volcánicas, a la vez que ciertos volcanes están empezando a despertar y los que están activos, están teniendo fases de actividad fuera de lo común.
Esto no tendría que alarmarnos a los que vivimos en zonas de alta actividad volcánica, como en Michoacán donde existen cerca de mil doscientos volcanes que significa el 30% del total de volcanes registrados en el país, que se consideran sean poco más de cuatro mil, la mayoría ubicados en el cinturón volcánico Trasnmexicano ubicado entre Michoacán y Veracruz en una línea diagonal que atraviesa el país.
En esta situación, es necesario estar pendientes de la información que suceda relativo a seísmos y erupciones, para poder actuar en consecuencia y salvar nuestras vidas.
Les recomendamos no entrar en la conspiración del desastre, ni atender información falsa que pretende crear pánico y aprovecharse de las mentes débiles, los tiempos de la tierra no son los mismos del hombre, así que los sucesos se darán, pero no necesariamente en una fecha específica, o una intensidad específica en el caso de seísmo o erupción, tampoco es el fin del mundo o señales del Apocalipsis, son ciclos que la tierra y el universo tienen que cumplir y el hombre debe adaptarse a ellos, y no esperar a que la tierra se adapte a las necesidades del hombre, el hombre es solo un pasajero más de la nave universal.
José Luis Valencia Castañeda
Gilgamesh***
-periodicoeldespertar
miércoles, 28 de febrero de 2018
* Virtuosismo sin morbo *
Publicado por
Gilgamesh
en
14:06
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4 comentarios :
genial como siempre gracias
No sabia que el ceboruco en nayarit estuviera dentro de los mas activos como siempre son noticia los del centro del país, aunque unas pocas veces que he ido he visto que salen fumarolas de la tierra.
Aunque ya no estoy ahí, aquí estoy cerca de otro que mencionas y que yo no conocía, a estar pendientes...
Saludos
+1.
Alejandro Arrabal Díaz-Vandinha; muchas gracias.
carlos; ¡¡gracias!! muy generoso de tu parte, abrazo.
Mario; ya ves Bro, a veces ni sabemos de lo que creemos conocer. Abrazo.
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