A tal fin dividiré el post en dos entregas, éste de ahora y otro para ésta noche.
Me confieso ser ideológicamente un hombre anti-sistema, siempre lo fuí, es decir que lo mío no es una moda, es una estilo de vida hecho realidad en lo cotidiano.
Mi niñez y mi temprana juventud me mantuvieron inmerso en una sociedad que para mí era correcta, pero el paso de los años me hizo comenzar a observar la enorme hipocresía que me rodeaba.
Parámetros mentirosos perfectamente orquestados desde lo alto del poder, han estado manipulando a la gente desde siempre.
Podrán imaginar que para un hombre como yo con un espíritu que siempre se revela ante lo que la mayoría aprueba, tener que ser testigo hoy de las revueltas sociales es algo así como un sentimiento de alegría o más bien, de esperanza.
Pero cuando algo carece de inteligencia y deviene en violencia sin sentido...estamos siendo funcionales a lo que confrontamos.
He dado un paseo por la red y he visto una gran cantidad de nuevos sitios y otros ya creados, que están fomentando la rebelión anti-sistema, las proclamas de tomar las calles, y de llegar al corazón del poder mismo para derrocarlo en pos de un mundo mejor.
Hasta ahí todo bien, pero..¿ Quién pone el cuerpo?
Porque con la lengua podemos crear lo que querramos, pero hay un momento en el cual, *luchar contra el poder* implica poner el cuerpo. Me parece un tanto irresponsable fomentar revueltas sentados desde un cómodo sillón o desde la tranquilidad de una oficina escribiendo en la computadora. Hay que ser valientes para fomentar una protesta pero también hay que ir a encabezarla...
¿Se entiende?.
Con el cuerpo de los otros cualquiera es valiente y eso no es inteligente ni honesto.
Es de obtusos imaginar que la gente tome las calles y no se provoquen desmanes, es iluso pensar que nadie será reprimido, es ingenuo planificar un cambio utilizando las estrategias que el poder ya conoce y domina.
Las armas las tienen ellos, hay países en los cuales se proclama la libertad de expresión pero a su vez son estados represores que no dudan en salir a romper huesos cuando la órden así lo establece.
Hay fuerzas que ya están pre-establecidas desde hace mucho tiempo para salir a *sofocar* revueltas populares, y lamentablemente los ejemplos están a la vista.
Tenemos una amplia gama, desde las dictaduras de oriente que no escatiman balas de plomo asesinando a civiles, hasta las élites antimotín de los países muy desarrollados, que tienen toda la infraesctructura y la estrategia para disparar balas de goma, gases de todo tipo, y un hábil procedimiento de detención sin hacer mucho escándalo a la vista de las cámaras filmadoras.
Unos y otros, son lo mismo con distinto proceder. No considero inteligente promover protestas para que jóvenes, mujeres y hasta a veces niños, *pongan el cuerpo* en las calles. Me encanta ver la masividad de gentes coordinadamente protestando contra el sistema en todo el planeta, pero....también debo despojarme de ese regodeo porque el cuerpo lo están poniendo otros...mientras yo lo miro por TV. Cualquier persona que tenga algo de inteligencia puede utilizar un sitio en internet para enhebrar con habilidad el contenido del mismo, qué noticias, qué informes y qué opinión, con el fin de inducir, preparar, CONDICIONAR a sus visitantes para que posteriormente las condiciones estén creadas para que miles o millones de gentes indignadas al extremo, salgan a las calles cuan Mastin babeando espuma por la boca...dispuestas a romper todo, pero lo más grave...saliendo a inmolarse ante las balas represivas.
Jamás voy a fomentar desde aquí una rebelion primitiva e inmadura.
Tenemos numerosos mecanismos *inteligentes* como para *detener* el curso de ésta civilización, sin una sola gota de sangre, sin un solo herido, sin un solo padecimiento.
Pero no me pidan que les haga la lista, porque mi objetivo no es ser ideólogo de nada, mi objetivo es que ustedes pongan a trabajar sus neuronas, porque la verdad y la inteligencia no es patrimonio de una sola persona, si no de todos.
Ser un anti-sistema implica no usar los procedimientos que son funcionales a ese sistema. Erigirse en líder es pro-sistema, *organizarse inteligentemente* es anti-sistema.
Muchos de ustedes han de ser padres de jóvenes, adolescentes, y niños, y quiero alertarles sobre el riesgo que implica que sus hijos compren un discurso revolucionario que es cándido y hermoso para una protesta estudiantil, pero no para luchar contra el sistema...Cuidado...porque el cuerpo se lo harán poner a sus hijos.
Es bien sabido que una protesta si es pacífica no tiene grandes efectos, entonces se decide hacer protestas cruentas donde no solo que no se obtienen efectos, si no que además hay que lamentar vidas.
Hemos sido educados por el sistema y hemos estado obrando de acuerdo a sus planes.
Alguien, sentado en un escritorio, decidió que Gadaffi debía ser derrocado, muerto y acabado. Pero el cuerpo lo pusieron otros, a eso el sistema le llama *patriotas valientes, héroes llenos de coraje*, y he allí el error.
Siguen enseñándonos que el poder se ejerce con la fuerza, nos enseñan que al contrario se le aniquila extinguiendo su vida, que el más ostentoso es el que triunfa, y la tonta humanidad compra una y otra vez ese discurso mentiroso.
Tampoco es lo correcto encolumnarse en ideologías facilistas creadas por el mismo sistema, hecharse a esperar que los *hermanos extraterrestres* vengan a solucionerme el problema, es inmaduro.
Cultivar la filosofía de que diciéndo dos veces al día *ooooommm* el mundo va a cambiar, o esperar que prendiendo velas a los ángeles el mundo cambie, o vivir dopados leyendo que las vibraciones que envian los maestros cósmicos de la confederación intergaláctica harán un mundo ideal...
No quieren que pensemos...esa es la idea del sistema, y para ello han sabido utilizar el gran *combo*, dentro del cual la realidad se cambia con las armas, pero también pronunciando un mantram...
Despertemos de una vez pero con inteligencia.
Inteligencia implica usar el dardo con anestesia para atrapar al tigre y no dispararle en la cabeza con un calibre 44.
Inteligencia implica que dejemos de comprarle al comercio que nos roba con sus precios exagerados, inteligencia implica *pensar* qué es lo que al sistema más le duele, le inquieta y le da pánico.
No necesitamos armas, ni violencia, ni hacerle poner el cuerpo a los demás.
Si lo decidiéramos, el sistema acabaría en poco tiempo.
Para ello se requiere no solo inteligencia si no también buenas intenciones, porque cambiar algo malo por otra cosa igual de mala...no tiene sentido.
Buenas intenciones implica la búsqueda de igualdades, de auténtica libertad, del no sometimiento, del no lucro personal, del cese total de la explotación humana y bioplanetaria. Sentarse a esperar que Dios haga todo el trabajo es ingrato, porque una de las más enormes armas que el Creador nos dió, fué la inteligencia, como para que lo dejemos descansar un poco y resolvamos los problemas nosotros mismos, ya llegará el tiempo en el que Dios deba ocuparse de cosas que están ajenas a nuestra voluntad.
Enterrar las ideologías que exponen siempre al cuerpo del otro, y evitar la muerte en pos de un objetivo. Una sola vida perdida, da por tierra con cualquier intento de evolución. La muerte inducida hace fracasar cualquier reclamo justo.
Espero y deseo de todo corazón, que muchas personas estén pensando de ésta forma, descarto que sólo a mi se me pueda ocurrir ésto, intuyo que habrán miles de personas pensando en éstas cosas y que finalmente....la inteligencia y la buena intención, harán que seamos libres de una vez por todas. De lo contrario, seguiremos en picada, sin rumbo y sin brújula.
***Gilgamesh***
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