miércoles, 11 de junio de 2014

* Conclusiones sobre el pasado y la religión-parte 10 *

***Excelente noche de Miércoles para todos.

Les insití muchas veces en que debemos sentirnos agradecidos con quienes hicieron estudios y trabajos maravillosos, muchísimo antes de que hoy el mundo esté plagado de pretendidos *expertos*, que no hacen más que subirse al éxito ajeno en su incapacidad de generar cosas nuevas, tal el caso de Zecharia Sitchin a quien debemos agradecerle enormemente habernos abierto las puertas al tema sumerio, en lugar de criticar lo que hizo, ensuciándolo para poder decir algo distinto. Si queremos decir algo distinto es imprescindible tomar su trabajo, reveerlo y seguir estudiando.
Si me pongo en la piel de Sitchin a la hora de aplicar su estudio sumerio a éstos tiempos modernos, no me cabe duda que yo habría interpretado tal vez de la misma forma que él lo hizo. 

Me refiero a pensar en esos *dioses* como entidades extraterrestres. Pero...¿de dónde nos surge la idea de extraterrestres?. Nos la vendió hollywood amigos...Cuando nos impusieron esa forma de *catalogar* a dioses o entidades *invisibles*como seres de carne y hueso idénticos a nosotros, o al menos..parecidos, supieron colmar nuestra avidez que tenemos por creernos el ombligo de la Creación. A partir de ello comenzamos a pensar que si existía vida en otros planetas o sistemas solares debían ser como nosotros, porque de esa forma, la religión cerraba a la perfección, *Dios hizo al hombre a su imágen y semejanza*.
Después, comenzamos a repasar las obras de arte antiguas donde sin ninguna duda pudimos ver vestigios de lo que interpretamos como *naves* o artefactos voladores.



Y ya en tiempos modernos, esas naves se han hecho evidentes e inocultables a nuestra vista, me refiero a lo que llamamos *OVNI*. Ahora bien....¿nunca se han puesto a razonar sobre si esos artefactos fueron y son humanos?. Humanos digo, en el legado de aquellos dioses que necesitaron matrerializarse no con un cuerpo como el nuestro y mucho menos con nuestra tecnología.
Si nos remitimos a todos los textos religiosos hay mucho sobre ésto, y nosotros le hemos dado vida en nuestra concepción como *seres de otros mundos*.
Luego de estudiar a fondo los orígenes de las religiones pudimos ver que nos han hablado de ángeles y dioses, que de ninguna manera hoy se han hecho manifiestos, al menos desde que nuestra civilización comenzó a *intercomunicarse*. 
Con las cámaras de TV, las radios, las cámaras de fotos, las filmadoras, etc., parece que los ángeles y dioses...ya no se dejan ver.... ¿Porqué antes sí y a partir de nuestra tecnología de detección ya no?, pues porque nunca se dejaron ver como humanos físicamente. 

Pero.. ¿y los ovnis que hoy identificamos en filmaciones, fotos e inclusive a simple vista?, sí, es real, pero eso no revela de ninguna manera de que sean ni ángeles, ni dioses, ni seres de otros mundos. Podrían ser las entidades de antaño necesitadas de *materia* para entrar en éste hades y no con un cuerpo humano. Bien podrían ser proyectos en secreto de nuestras potencias = avalados por aquellos dioses imperfectos= para sus planes futuros de dominación y de distracción, en un *apocalipsis a medida*, a la medida de la religión por supuesto, implantada por ellos mismos. En un mundo en el cual cada día las personas están evolucionando hacia la salida del sistema, el sistema debe tener pregeniado algo magistral y qué mejor que poner en práctica un apocalipsis como *carta final* para continuar manteniendo la dominación por otros 2.000 años más..., piénsenlo.



La materia existe como tal después de que los Eones, o seres que existían sin materia, decidieran crearla. Es decir que la materia como hoy la concebimos, es fruto de la manifestación del deseo de éstos Eones.
Para que los Eones se manifestaran a través de la materia debieron cumplirse muchos pasos. Pensemos que algo tan majestuoso como un Eón debería comprimirse para entrar *dentro de algo*, algo material obviamente. Cuando el Eón Sofía, luego de crear con el deseo del pensamiento =única explicación concebible para nosotros= generó materia, el largo proceso comenzó. 

Cuando nuestra ciencia avanzó y nuestros ojos fueron puestos en el espacio con los telescopios voladores, los científicos se sorprendieron al ver las distintas formas, sistemas, *barrios* dentro de otros grandes barrios espaciales para llegar a la conclusión que el Universo tenía unos TRECE MIL MILLONES de años. Pero crear semejante cantidad de materia no llevó obviamente el tiempo que lleva hacer un *clic* chasqueando nuestros dedos.
Para llegar al proceso de lograr que un Eón pudiera sintetizarse a punto tal de *caber* en algo llamado *cuerpo humano*, se han necesitado seguramente..muchos miles...o millones de años.
Por lo tanto, el producto final que creemos ser nosotros, no es tal.
Y esa es una gran noticia.



Cuando repasamos la historia humana =hasta donde podemos=nos quedamos muy cortos si pensamos que siempre la humanidad fué igual, que las guerras, que la muerte, que el desorden, que el drama.
Si analizamos la historia de esa forma estamos olvidando al tiempo...es como si quisiéramos explicar los 13 mil millones de años del Universo en apenas un segundo.
Si analizamos la evolución como lo que dura la trayectoria de una bala...estamos errando el concepto. Mirar la trayectoria de una bala pero con la ayuda de una cámara lenta, nos muestra cómo lo que sale del revólver no es lo mismo a medida que va atravesando el espacio y lo que llega a destino. Cuando conceptualizamos a la evolución humana como un disparo, no podemos entender que estamos resolviendo mal el asunto. 

Si queremos remontarnos apenas a 3.000 o 6.000 años para decir que nada cambia pues...deberíamos entender que recién estamos en un pequeño trayecto desde el disparo inicial. Si pudiéramos advertir que lo que analizamos debe hacerse en cámara lenta =como con la bala=, entenderíamos que las cosas han cambiado y van a cambiar pero no con la *velocidad* que nosotros pretendemos. El resultado de lograr un *ser humano* fué la experimentación de concebir materia a manera de útero, para posteriormente poner a incubar en ella, al Espíritu. Si los Eones Primordiales no necesitaban materia para existir, puesto que ya existían en la invisibilidad, entrar en la materia debe haberse sentido como entrar en una tumba.



No hay infierno sino *caída*, y la caída es proceder desde lo alto hacia abajo, quedar atrapado en un mísero cuerpo como el nuestro, habrá sido y debe ser para un Espíritu =emanación del Eón= más o menos como estar preso a cadena perpetua. El gran guiño de la Creación =la Superior= fué remedar el error de Sofía, entrando en la materia, que, como recordarán, fué el experimento del Demiurgo o Anunnaki, de crear intentando emular a la Creación Superior. Ellos, como ciegos espirituales que eran, crearon una masa informe que no respondía a su capricho, y obviamente...porque eran dioses imperfectos. Pero ésto cambió cuando el *Espíritu* entró en la materia, no para quedar encarcelado sino para hacer de esa *argamasa* nueva, llamada *ser humano*, una trilogía muy poderosa y especial que de ninguna manera podía *estancar la evolución de la Creación* por un error o mala forma de crear a cargo de Sofía y sus involuntarios Demiurgos. 

Ya no hace falta *creer en* sino aplicar lo que conocemos para darnos cuenta que el triunfo del Espíritu sobre la materia es un destino =afortunadamente= inevitable. El Ser Humano va a evolucionar a punto tal que será un Eón triunfante en el mundo material, pero claro...nosotros lo vemos como la bala que sale del revólver y no en el proceso largo, en cámara lenta. Miren cómo era la religión hace 2.000 o 3.000 años y véanla ahora, vean cómo pensamos hoy y cómo pensábamos hace 3.000 años, ¿algo ha cambiado o no?.
Así como ha avanzado la parte eónica también la parte material o demiúrguica, pero si nosotros sólo vemos la parte material en auge, no estamos haciendo más que potenciarla.



Los medios hoy están en una batalla aguerrida para sacarnos del eje, su mensaje es que todo está cada vez peor y que siempre gana el malo y nunca el bueno, pues no es así.
Que un ser humano desde la soledad de su habitación pudiera estar comunicando éstas cosas que escribo y ustedes leen, era algo impensado, pues está pasando y no es en vano ni es menor, porque no soy yo solo, son millones los que lo hacen y cada uno desde su forma particular de hacerlo pero todos hacia un mismo objetivo, hacer prevalecer al Espíritu sobre la materia.
Si a Cristo se le ha llamado *Logos* es porque precisamente un Espíritu Superior debía manifestarse en la forma que lo hace la materia, porque nuestros sentidos estaban adormecidos en esa materia y el Logos debía manifestarse como *la palabra*, un proceso también. 

Es decir que Cristo cumplió con su meta que no fué como erróneamente se nos ha enseñado para retrasar nuestra evolución, me refiero a que en lugar de quedarnos con lo que Cristo vino a decirnos, nos quedamos con el cuerpo de Cristo, es decir que nos han hecho prevalecer lo material de Cristo y no su verdadero fin que fué la Prescencia de Su Espíritu a través del Logos, su palabra. La distorsión de la religión ha sido fenomenal, algo que fué un regalo de la Creación se transformó en una historia lacrimógena de muerte e impresión, de derrota, de sangre derramada y de un culebrón típico de las actuales novelas y películas que nos ofrece el sistema.



Hemos estado adorando no sólo a dioses inferiores, creyendo que adorábamos al Creador Supremo, sino que además, hemos hecho realidad la idolatría, viendo a Jesús como un ícono material y no como lo que fué.
A partir de lo que Cristo nos reveló, que yacía dormido y tergiversado en nuestra materia, él ha entrado en nosotros  o mejor dicho, nos recordó que ya estaba desde siempre. El Espíritu, ese que mora en nosotros y que debe vencer a la mente-materia, algo que no es tan fácil como pretender ser salvos por practicar cualquier religión o rito, sino que es evolución victoriosa, pero que lleva tiempo como los tiempos del Universo.

Si seguimos distraídos esperando que desde algún planeta o galaxia lleguen seres *extraterrestres* a resolver nuestros problemas estaremos frenando nuestra evolución y no será porque nos fuercen a hacerlo, sino por nuestra propia decisión de seguir creyendo cosas que fueron demolidas hace 2.000 años cuando Cristo vino a darnos la llave maestra. Pero el ejemplo de Cristo fué mucho más allá de la palabra revelada, nos mostró en el ejemplo de la *acción*. Él fué un mortal más en la materia, nació, creció y evolucionó, pero se INVOLUCRÓ, por lo cual no aplicó el concepto que hoy muchos hermanos y amigos, o personas que no conozco aplican, cuando dicen que nada va a cambiar, que da igual, que mejor me ocupo de mí mismo y bla, bla, bla. Claro que hay que ocuparse de uno mismo, eso es lo principal, por lo tanto, si se siente el ser frustrado al aceptar que debe recluirse es a la vez aceptar que la idea de *cambio positivo* que creía conocer, estaba errada y basada en el triunfalismo fácil y rápido de esperar que las soluciones llegaran desde arriba.

El siguiente video es la mejor forma actual de entender lo que es la re-acción necesaria para un cambio. Primero saber qué nos oprime, identificarlo y entrar en acción.
La acción no implica violencia porque la violencia es combustible letal que se propaga sin saber hasta dónde llega matándolo todo. La reacción debe ser utilizada bajo la elección inteligente, la del Espíritu que no necesita violencia para someter a la materia. No me pregunten qué hay que hacer para cambiar la realidad injusta, ustedes saben cómo hacerlo sin violencia, Cristo lo hizo así, utilizando la Inteligencia Suprema que doblega a cualquier cosa material. Cristo no se quedó durmiendo la siesta esperando un milagro, él se transformó en milagro. 

Se puso los pocos trapos que tenía para vestirse y salió a la calle, se juntó con otros y planificó cómo gestar una idea, se reunió, no se quedó esperando que los fariseos se volvieran buenos....salió a ponerlos en evidencia, Cristo no fué cómodo y holgazán...hizo lo que mejor podía hacer y eso es lo que debemos hacer, no sólo quejarnos una vez identificado el centro de la injusticia, sino accionar para erradicarla, pero no durmiendo la siesta ni poniendo el voto a cualquiera que se presente. Los injustos seguirán interfiriendo y a nadie podemos culpar mas que a nosotros por permitirlo sin usar la Inteligencia Suprema. Lo vamos a lograr, estoy seguro, aunque nuestro tiempo de vida aquí y ahora sea tan rápido como la bala que sale del revólver..y así no se puede pensar en un cambio largo, que se volverá cada vez más largo en la medida de que no hagamos lo que debemos hacer, poner a la materia en sometimiento del Espíritu, esa es la depuración sabia del libre albedrío, la elección correcta por sobre la incorrecta.

Éste video lo he tomado gracias a su publicación en el blog amigo de Ágora Libre =sitio que recomiendo visitar= a quien le agradezco de antemano sin haberle pedido el permiso formal.

Claro que podemos...pese al poder que le hemos otorgado a la materia inferior.

Gilgamesh***

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